El 10 de enero se registró la ilegítima posesión de Nicolás Maduro en Venezuela, que sin publicar las actas electorales se mantiene en el poder a pesar de que múltiples naciones en el mundo reconocen a Edmundo González como ganador de los comicios registrados en 2024.
Por su parte, el Gobierno colombiano indicó que no reconocerá el triunfo de Maduro; sin embargo, envió al embajador Milton Rengifo al evento de posesión, lo que ha sido tomado de manera negativa por varias figuras políticas del país, que piden al presidente Gustavo Petro tomar una postura radical en esta situación.
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En diálogo con Infobae Colombia, Juan Camilo Ubaque, que es experto en geopolítica, seguridad y defensa internacional, opinó sobre la situación que se debe estar analizando al interior del Estado colombiano y los posibles caminos de cara a un respaldo a la dictadura venezolana o una terminación de relaciones bilaterales.
En primer lugar, Ubaque indicó que es fácil para los opositores del Gobierno nacional pedir que se aleje de Venezuela sin pensar “por qué la frontera colombo venezolana es la más importante en el Caribe para las grandes potencias” y cómo una crisis entre naciones podría repercutir a nivel regional.
“Es aquí en que el Gobierno de Gustavo Petro está en un ajedrez geopolítico en el que se juega el destino de las naciones”, indicó el experto, para el que se debe pensar no solo en la petición general, sino en las consecuencias de las posibles acciones.
“Desde la geoestrategia, este destino está ligado a su geografía; su política exterior parte de sus llanuras, sus mares, sus montañas. Ahora, Colombia y Venezuela tiene un destino compartido en el que tienen para ambos bandos las siguientes condiciones: la frontera más larga compartida, la frontera más inestable y la frontera viva más activa comercialmente”, indicó Ubaque.
A pesar de que figuras políticas de la región han indicado que el rechazo general podría provocar que la dictadura de Nicolás Maduro pierda poder, para el experto en geopolítica también se debe analizar el contexto desde el costado de las naciones que han apoyado al régimen y hasta los opositores de este; además de la importancia de una relación sana entre Venezuela y Colombia.
“Es entendible que los presidentes divaguen sobre la situación y su posición frente su vecino geopolítico más relevante, pero para los asesores de seguridad nacional es bien sabido que hay dos variables importantes entre estos dos pesos geopolíticos. Venezuela es uno de los mayores suplidores de petróleo crudo de los Estados Unidos y activo geoestratégico comercial con potencias hemisféricas (China, Rusia, Irán). Dos, Colombia es máximo aliado no Otan de Estados Unidos”, declaró a Infobae Colombia Juan Camilo Ubaque.
Con este panorama, Ubaque indicó que está de acuerdo en que Venezuela “está en su mejor momento para desalinearse del chavismo por tener a Moscú ocupado en Ucrania”, por lo que un apoyo público de Colombia al régimen solo haría que el país se alejara de la “diplomacia que ha consolidado durante este siglo”.
“En un balance geopolítico, Venezuela se consolida como actor mucho más importante que Colombia. Cuenta con apoyos internacionales y no convencionales en forma de reservas estratégicas de grupos armados como lo es el ELN; en cambio, la posición del presidente Gustavo Petro al ser neutral opaca la relevancia de Colombia en este ajedrez geopolítico y le castra de maniobras diplomáticas a diferencia de los tres anteriores gobiernos que maximizaron la política exterior colombiana. La geografía es un destino, mientras que la geopolítica es desafiar ese destino asumiendo todas las consecuencias”, puntualizó.