La posesión del dictador Nicolás Maduro, llevada a cabo el 10 de enero de 2025, generó indignación a nivel nacional e internacional debido al fraude electoral que denunció la oposición y que fue reconocido por más de 30 países. Colombia, por el contrario, se abstuvo de tomar una posición con respecto a las elecciones, asegurando que era necesario esperar a una revelación completa de las actas electorales para determinar si fue Maduro el ganador o el opositor Edmundo González.
Teniendo en cuenta que el oficialismo venezolano no mostró las actas electorales, la oposición sí lo hizo y dejó en evidencia la victoria de González. En consecuencia, el Gobierno colombiano, a solo un día de efectuarse el acto de posesión del dictador, reconoció que las elecciones no fueron libres, pero que, igualmente, habría un representante del país en la ceremonia. Se trata del embajador de Colombia en Venezuela, Milton Rengifo.
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Las críticas en contra del presidente Gustavo Petro, del embajador Rengifo y del canciller Luis Gilberto Murillo se intensificaron por la presencia de Colombia en el país vecino, que fue calificada como vergonzosa. Asimismo, otros funcionarios del Gobierno fueron blanco de cuestionamientos por la postura del país ante la crisis política venezolana que, al parecer, es benevolente con la dictadura.
El director del Departamento Administrativo para la Prosperidad Social (DPS), Gustavo Bolívar, fue incluido en la lista de funcionarios criticados, por lo que salió a defenderse a través de su cuenta de X, en la que aseguró que lleva varios años manteniendo una misma posición sobre el régimen de Maduro. Según demostró, en más de una oportunidad cuestionó su gestión y lo tildó de ser un dictador.
Además, aprovechó la oportunidad para compararse con políticos de derecha, a los que cuestionó por guardar silencio ante las violaciones de derechos humanos de otros gobiernos en Colombia y de otros países.
“Mi diferencia con Uds los fachos es que siempre llamo las cosas por su nombre. Para mí Maduro es un dictador y lo vengo diciendo hace una década, no ahora. En cambio Uds callan cuando Uribe se robó la presidencia en 2006, cuando Duque reprimió a los jóvenes que perdieron la vida y los ojos, cuando Bukele viola derechos humanos, cuando Netanyahu destroza bebés con bombas”, escribió.
Reafirmó, entonces, que reconoce a las administraciones de Nicolás Maduro en Venezuela y de Daniel Ortega en Nicaragua como dictaduras, contrario a otros políticos colombianos que respaldan regímenes “de derecha”.
Para respaldar sus afirmaciones, compartió en sus redes varias publicaciones de años anteriores en las que criticó la dictadura de Maduro. Una de ellas corresponde a 2016; en ella enlistó las conductas que evidencian un mandato de corte dictatorial. “Maduro suspende revocatorio, aplaza elección de gobernadores, anula Asamblea Nal de mayoría opositora, encarcela disidentes. Dictador total”, precisó entonces.
En otra publicación de 2019, señaló al dictador de interferir en temas que no son de su competencia, de incurrir en irregularidades y de omisión ante la violación de derechos humanos. “Es un dictador abusivo. No se puede llamar distinto a alguien q manipula la justicia, roba elecciones, censura la prensa, golpea estudiantes y persigue y permite asesinar opositores. Igual que en Colombia”, indicó.
No obstante, internautas recordaron cuando, el 28 de julio de 2024, día de las elecciones presidenciales en Venezuela, rescató las garantías que supuestamente estaba otorgando el régimen de Maduro para que la contienda fuera transparente y libre. Incluso, comparó el sistema electoral venezolano con el colombiano, para resaltar el del país vecino.
“El sistema electoral es tan confiable que el chavismo puede perder. Ojalá en Colombia pudiéramos confiar así en nuestro sistema electoral”, sostuvo.