El presidente del Senado, Efraín Cepeda, se pronunció sobre el fracaso de la reforma política en el Congreso y la falta de coordinación entre la bancada del Pacto Histórico y el Gobierno nacional.
En su intervención, Cepeda defendió la labor del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, pero subrayó que el hundimiento de la reforma política fue causado por una serie de fallas internas en el Gobierno.
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En conversaciones con W Radio, Cepeda reconoció el esfuerzo de Cristo como jefe de cartera, calificándolo como un hombre experimentado que maneja bien las relaciones dentro del Congreso y que trata de avanzar en la concertación.
Sin embargo, al referirse a la falta de éxito en la reforma, Cepeda señaló que las dificultades no son responsabilidad del ministro: “¿Qué culpa tiene el ministro Cristo si la bancada de Gobierno no le para bolas?”, dijo, sugiriendo que la falta de sincronización y el desinterés de algunos miembros de la bancada de Gobierno fueron claves para el fracaso de la reforma política.
En cuanto a la falta de cuórum durante la discusión de la reforma política el jueves 12 de diciembre, Cepeda apuntó que fue la misma bancada del Pacto Histórico la que prolongó las discusiones y las intervenciones de manera innecesaria.
“Se dieron discusiones interminables, principalmente de la bancada del Pacto Histórico, que metió proposiciones que alargaron el proceso hasta que la plenaria del Senado se quedó sin cuórum”, explicó.
Cepeda criticó que la bancada de gobierno, lejos de colaborar para agilizar la aprobación de la reforma, contribuyó al retraso de otros proyectos, lo que afectó el debate sobre la reforma política. Según Cepeda, la falta de sincronización entre el Gobierno Nacional y la bancada del Pacto Histórico fue determinante para que la reforma se hundiera.
Sobre el transfuguismo, Cepeda también expresó su rechazo, asegurando que la bancada conservadora se ha mantenido en contra de la práctica, considerando inapropiado cambiar de partido de forma tan flexible. “Me parece de mal recibo cambiar de partido como se cambia de pantalones”, concluyó.
Mientras Cepeda critica las reformas de Gustavo Petro, Cristo busca un salvavidas
El ministro del Interior de Colombia, Juan Fernando Cristo, anunció la convocatoria de una cumbre con los partidos políticos para enero de 2025, con el objetivo de rescatar la reforma política que no logró avanzar en el Congreso.
En una entrevista concedida a La FM, Cristo expresó su preocupación por la falta de discusión en el Senado, lo que impidió un debate adecuado sobre temas cruciales como las listas cerradas, la paridad de género y la financiación transparente de campañas políticas.
Cristo destacó que la estructura actual del Congreso representa un desafío significativo, ya que los debates se ven constantemente obstaculizados por el trámite de impedimentos debido a conflictos de interés. Esta situación, según explicó, ralentiza las discusiones de fondo y afecta la aprobación de reformas estructurales.
“La falta de discusión y el constante bloqueo en el Senado han dificultado el avance de reformas esenciales”, afirmó el ministro.
Durante la entrevista, Cristo también hizo referencia a la frustración del presidente Gustavo Petro ante el fracaso de la reforma política. Aunque evitó calificar directamente las declaraciones del mandatario, expresó su comprensión por la falta de avance en el Congreso y la decepción en torno al tema.
“Es claro que el país necesita cambios en su estructura política, de lo contrario seguiremos enfrentando escándalos de corrupción y una pérdida de legitimidad en nuestras instituciones”, comentó Cristo.
A pesar de los obstáculos presentados por la reforma política, el ministro del Interior defendió los logros del Gobierno en otras áreas, como la aprobación del Sistema General de Participaciones y la reforma a la jurisdicción agraria. También destacó los avances en la reforma laboral y de salud, aunque reconoció que las negociaciones con las comisiones económicas han sido complicadas.
Finalmente, Cristo subrayó que el fracaso de la reforma política representa una oportunidad perdida para modernizar el sistema electoral y político en Colombia.
Reafirmó su compromiso de seguir insistiendo en la necesidad de mejorar la transparencia y fortalecer la credibilidad de las instituciones del país, insistiendo en que sin estos cambios, el futuro de la democracia colombiana estará en riesgo.