Colombia es uno de los países donde los ciudadanos disfrutan más de la temporada navideña, no solo por los regalos que son entregados en esta época, sino por la importancia del fortalecimiento de vínculos que representa esta temporada. Por esta razón, aquellos que son creyentes aprovechan esta temporada para elevar sus oraciones al cielo.
Algunos prefieren agradecer a Jesús, la Virgen y otros santos por todas las cosas buenas que recibieron durante el año. Sin embargo, hay quienes consideran que es una fecha para pedir, por lo que elevan sus peticiones al cielo y lo hacen con la esperanza de recibir los favores durante el nuevo año.
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Aunque hay varias oraciones tradicionales que pueden realizarse durante este día, la recomendación del Vaticano es entregar en oración a aquellos que sufren, los menos favorecidos, como es tradicional en el mensaje que da el papa Francisco el día de Navidad.
“Que este periodo de preparación sea ocasión para convertir el corazón; para decir no a la guerra y sí a la paz; un tiempo para responder con alegría a la invitación del Señor que nos llama, como había profetizado Isaías: “a llevar la buena noticia a los pobres, a vendar los corazones heridos, a proclamar la liberación a los cautivos y la libertad a los prisioneros” (Is 61,1) Estas palabras se cumplieron en Jesús, nacido hoy en Belén. Acojámoslo, abrámosle el corazón a Él, el Salvador, abramos el corazón a Él, el Salvador, que es el Príncipe de la Paz”, declaró el Papa en uno de sus mensajes más icónicos de la temporada navideña.
Por su parte, la Conferencia Episcopal de Colombia reiteró que la celebración de la Navidad abre siempre a la esperanza y permite tomar conciencia de la presencia permanente del “Dios con nosotros”, lo que significa que: “No estamos nunca solos en medio de las vicisitudes y luchas de la historia. Si Jesús es el ‘Emmanuel’, si el Hijo de Dios se hizo hombre para siempre y por su espíritu encamina irrevocablemente nuestro mundo hacia su meta, entonces, podemos esperar. Ahora bien, este esperar no consiste en aguardar pasivamente que Dios lo haga todo y que, al final, como con un golpe de varita mágica, resuelva nuestros dramas. Se trata de una esperanza activa en la que la certeza de la fidelidad de Dios y del triunfo de su amor deben comprometernos generosamente en la construcción de un mundo más conforme con el querer divino, de tal manera que apresuremos la manifestación gloriosa de Cristo y la trasformación última de nuestro mundo”.
Oración para agradecer en Navidad
“Querido Dios, en esta Navidad te agradecemos por el amor y la alegría que compartimos en familia. Gracias por las bendiciones recibidas durante el año y por la oportunidad de reunirnos en paz y armonía. Te pedimos que nos guíes con tu luz en el nuevo año, llenando nuestros corazones de esperanza y bondad. Amén”.
Oración para pedir milagros en Navidad
“Niño Jesús, en este tiempo de Navidad, vengo ante ti con fe y esperanza en tu poder infinito. Abre nuestros corazones para recibir tus bendiciones y concédenos los milagros que necesitamos. Que tu luz nos guíe siempre y transforme nuestras dificultades en oportunidades de crecimiento y amor. Amén”.
Oración para recibir la Navidad
“Señor, mientras nos preparamos para recibir la Navidad, te pedimos que llenes nuestros corazones de paz y alegría. Ayúdanos a recordar el verdadero significado de esta festividad y a compartir amor y generosidad con los demás. Que la luz de tu amor brille en nuestros hogares y nos una en felicidad y gratitud. Amén”.
Oración para bendecir los alimentos en Navidad
“Señor, te damos gracias por estos alimentos que nos has dado y por la oportunidad de compartirlos en familia durante esta Navidad. Bendice nuestras mesas y a quienes las han preparado. Que este alimento nos fortalezca para seguir haciendo el bien y nos inspire a vivir con amor y gratitud. Amén”.
Oración para recibir la Navidad en Colombia
“Niño Jesús, en esta Navidad, te damos gracias por las bendiciones que hemos recibido y por la dicha de estar reunidos con nuestros seres queridos. Te pedimos que ilumines nuestros corazones con tu amor y nos llenes de paz y esperanza. Que podamos compartir con generosidad y vivir en armonía, reflejando el verdadero espíritu navideño. Amén”.