Familiares de militares, impulsados por senador uribista, trataron de tomarse plenaria de la Cámara, presidente de la corporación advirtió de conseuencias “administrativas y penales”

Luego de que ciudadanos, gran parte de ellos procedentes del departamento de Arauca, irrumpiera en el Congreso de la República en el momento en el que se desarrollaba el debate de moción de censura al canciller Álvaro Leyva, el presidente de la Cámara de Representantes, David Racero, mencionó que la conducta tendría consecuencias penales.

Este pronunciamiento se hizo en horas de la mañana el 13 de abril de 2013 en conversación con el medio W Radio, donde además se refirió a que por los hechos, una mujer sufrió un ataque de pánico y debió ingresar personal médico para atenderla, además de la preocupación que se vivió en el lugar donde permanecían los demás funcionarios.

Cabe recordar que el día anterior, 12 de abril, se desarrollaba en el lugar un debate de moción de censura en contra del canciller debido al asesinato de los miembros de la fuerza pública que serían asesinados por integrantes del ELN.

Frente a la situación, mencionó que: “Esto tiene consecuencias administrativas y penales”. Incluso, aseguró que cuenta con información sobre agresiones que se presentaron en lugar que le permitirían dirigirse ante las instancias de la Fiscalía General de la Nación y la Procuraduría para realizar una querella.

Además, también se pronunció en su cuenta de Twitter donde calificó como “acto violento” los sucesos que, según Racero, había propiciado el representante José Jaime Uscátegui del Centro Democrático. Fue así que el presidente de la Cámara responsabilizó a Uscátegui por la presencia de los manifestantes, de los que se conoció serían al menos 35, que intentaron ingresar por la fuerza en el interior de la Plenaria de la Cámara de Representantes.

En su publicación mencionó que:

“El acto violento propiciado por el Representante Uscátegui del Centro Democrático y su hermano edil de Usaquén, que está en campaña, es un claro delito penal de asonada. El representante que se ufana de ser la voz del orden y la legalidad tendrá que responder ante la justicia”.

Allí también se refirió al Artículo 449 que se refiere a: “Los que en forma tumultuaria exigieren violentamente de la autoridad la ejecución y omisión de algún acto propio de sus funciones, incurrirán en prisión de dieciséis (16) a treinta y seis (36) meses”.

Previamente, Racero había hecho un llamado exigiendo respeto a la Cámara de Representantes y al país luego de que se registraran las acciones que “... atentaron contra el orden y la seguridad del recinto”.

Insistió también en que se iniciará la tarea de recopilación de todo tipo de material audiovisual y versiones por los hechos que tuvieron lugar el 12 de abril, donde además, “Se puso en riesgo integridad de Congresistas, trabajadores de la Cámara de Representantes y dos ministros”.

Por su parte, en conversación con este mismo medio, el representante por el Centro Democrático señaló que las personas que quisieron ingresar, según él, para escuchar el debate que se desarrollaba con Leyva y la moción de censura, se les negó el paso.

En palabras del representante:

“... estábamos en un evento de víctimas de la fuerza pública, lo terminamos en el salón Luis Carlos Galán y esas personas quisieron entrar para escuchar el debate de moción de censura, se les negó el ingreso a las gradas y una de ellas tomó el megáfono y, con fotografías de nuestros soldados y policías asesinados, empezamos a hacer un llamado de justicia”.

Sin embargo, Racero aseguró que nunca se les fue solicitado un permiso de ingreso a la reunión que tenía lugar en el recinto. De hecho, confirmó que el representante Uscátegui no pasó una proposición o solicitud de palabra como había afirmado en otros momentos, y reiteró que: “... lo que hizo él fue sabotear el debate de censura que había impulsado su propio partido”.