Colombia solicitó eliminar la hoja de coca de la lista de sustancias controladas en la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas

La representante del país solicitó el apoyo de los demás miembros durante la 66º periodo de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas en Viena

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Viceministra Laura Gil en el
Viceministra Laura Gil en el debate general del 66º periodo de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas en Viena.

El Gobierno de Colombia expuso una vez más al mundo que busca darle un vuelco a la política de drogas de la que, según dijo la viceministra de asuntos multilaterales Laura Gil en la primera reunión de la Comisión de Estupefacientes en Viena, el país está cansado. Allí, además, solicitó que se ponga sobre la mesa reconocer como un error haber incluido la hoja de coca en la lista de sustancias prohibidas.

“Colombia está cansada. Cansada de poner los muertos y cansada de perseguir a sus campesinos en esta guerra contra las drogas que fracasó. Este fracaso de la guerra contra las drogas no representa una deuda pendiente de Colombia, encarna una deuda del régimen internacional de las drogas con el mundo”, señaló Gil.

La viceministra señaló que el país ha seguido de forma estricta el modelo prohibicionista contra las drogas con más de dos millones de hectáreas fumigadas en lo corrido del milenio y un millón erradicadas manualmente, 70.000 laboratorios destruidos y seis mil toneladas incautadas. “Aun así, vemos aumentos históricos de flujos de cocaína, que dejan a mi país sumido en la violencia”, afirmó Gil.

Colombia preside este periodo de sesiones e invitó a un cóctel a todos los embajadores para inaugurar los cuatro días en que estará reunido el órgano rector de la política de drogas en el mundo. Una oportunidad que utilizarán para exponer el nuevo enfoque en el abordaje de la problemática que inició con una petición que liderará junto a Bolivia.

Miguel Camilo Ruíz Blanco, Embajador
Miguel Camilo Ruíz Blanco, Embajador de Carrera Diplomática y Representante Permanente ante las Naciones Unidas en Viena, preside en nombre de Colombia, este periodo de sesiones.

“Señor Presidente, ubicar la hoja de coca en la lista de sustancias controladas de la Convención Única de 1961 constituyó un error histórico contra los pueblos autóctonos de Los Andes. La planta no es el problema; la planta es parte de nuestra historia y nuestras tradiciones”, sostuvo la viceministra de asuntos multilaterales.

Gil hizo un llamado a los miembros para formular una revisión a la clasificación de la hoja de coca. “En preparación de la Revisión de Término Medio de la Declaración Ministerial de 2019, le pedimos a la Comisión entender el momento, toda crisis representa también una oportunidad”, dijo la diplomática colombiana.

La petición es liderada por el vicepresidente de Bolivia David Choquehuanca y el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, quienes se han propuesto durante su administración lograr la desclasificación de la hoja de coca para que se pueda comerciar libremente la planta, más no sus derivados.

Ese país organizará un panel el 14 de marzo llamado “La hoja de coca y el control de drogas de la ONU: reparando un error histórico”, en el que está invitado el ministro de Justicia de Colombia, Néstor Osuna. Antes de este, habrá un encuentro entre el vicepresidente boliviano y la viceministra Gil.

La diplomática señaló que la política de Paz Total del Gobierno de Gustavo Petro busca superar el conflicto armado en el país yel fin final no es convivir con el narcotráfico sino acabarlo”. Pero el enfoque de lucha y los enormes recursos invertidos no ha mostrado resultados en reducción del consumo o prevención.

Gil expuso que “la nueva política de drogas de Colombia propenderá por el bienestar de las comunidades más vulnerables que han sufrido el impacto desproporcionado de la represión y la criminalización y muy especialmente propenderá por las mujeres cabezas de familia con sentencias bajas, para quienes aplicaremos medidas de justicia restaurativa”.

Así mismo, pedirá un enfoque de género en la política internacional de drogas desde la política exterior feminista que lleva su cartera. En cuanto al componente punitivo, este estará enfocado en los grandes eslabones del narcotráfico con alternatividad penal.

“Queremos resignificar el principio de responsabilidad común y compartida; rechazamos las cargas desproporcionadas que se nos han puesto a las poblaciones de América Latina y el Caribe. ¿En qué nos pueden ayudar? Necesitamos menos dinero para rifles y más para el desarrollo agrícola, con acceso a los mercados del Norte para nuestros campesinos”, dijo la viceministra Gil.