Cinco autos que enamoraron a los fanáticos de la serie Cobra Kai

El espacio publicitario que representan las diferentes pantallas (cines, web, YouTube o las plataformas de series y películas) para las marcas de autos son de un alcance incalculable. El menos apasionado por los autos puede llegar a conocer un modelo solo porque apareció en un film que vio en reiteradas ocasiones.

Por ahí el más representativo de este ejemplo es el famoso DeLorean DMC-12, un vehículo que se fabricó entre 1981 y 1982 que no tuvo tanto éxito comercial pero que pasó al estrellato cuando hizo su aparición en la trilogía de Volver al Futuro. Este ejemplar, que se caracterizaba por sus puertas de ala de gaviota y su carrocería metálica de acero inoxidable, se fabricó en Dunmurry (Irlanda del Norte) y después de dos años producción cuando había alcanzado las 8500 unidades.

Otro que también saltó a la fama de la mano de la pantalla es el Aston Martín DB5 que manejó el famosísimo James Bond en 1964 en Goldfinger. Aunque Ian Fleming había pensado en un Mark III en la novela, la automotriz decidió cambiarlo para mostrar el último modelo que habían lanzado al mercado.

Más cerca en el tiempo, Chevrolet develó la nueva generación del Camaro en la primera película de Transformers. Esta posibilidad que encontró General Motors, le dio la oportunidad de mostrar el emblemático modelo de la década del 60 que terminó transformándose en el modelo que salía a la venta. Una jugada excepcional.

Decididamente en Cobra Kai aparecieron varios vehículos que llamaron la atención pero, según un informe que realizó Mercado Libre, hay cinco modelos que se destacaron por sobre el resto de los automóviles.

Cabe destacar que esta tira se convirtió en una de las más exitosas de los últimos años porque cautivó a los fanáticos de las películas de Karate Kid y despertó el interés de nuevas generaciones por esta icónica saga de los años 80. Cobra Kai tiene una fórmula que atrapa al instante: karate, glam rock, nostalgia ochentosa y la pasión por los autos, los cuales juegan un papel importante para entender la personalidad y evolución de los protagonistas a lo largo de la trama.

Ordenados alfabéticamente, y después de esta introducción, llegó el momento de meternos en el Top Five de de los autos que enamoraron a los todos los fanáticos de la serie.

Audi S7

Años después de ganar el campeonato de All Valley, “Daniel-San” se convierte en el dueño de su propia concesionaria de autos, lo que permitió hacerse sus modelos favoritos a lo largo de la serie. Más allá de manejar varios modelos de Audi, es evidente su gusto por el S7, un ejemplar que refleja perfectamente su nuevo rol como padre y hombre de negocios exitoso.

Este modelo, junto al S6, estrenó a principios de 2019 el motor V6 TDI que ofrece una potencia de más de 300 caballos. También entre sus últimas novedades incorporó la suspensión deportiva S con control automático que regula la dureza de la amortiguación y la dirección a las cuatro ruedas.

Por su parte, el diseño exterior incorpora los últimos lineamientos de la marca como la tradicional parrilla Singleframe y unas novedosas entradas de aire más grandes que están preparadas para mejorar el rendimiento del motor.

BMW Serie 4 Convertible

Aunque comparte muchas cosas con su padre, como su personalidad y el gusto por los autos y el karate, Samantha LaRusso se encuentra buscando su propia identidad a lo largo de la serie, algo que refleja muy bien cuando se la ve manejando su BMW Serie 4 convertible por las calles de “El Valle”.

La última versión de esta unidad fue presentada a nivel mundial a fines del año pasado. El descapotable de cuatro plazas sigue el ejemplo de la versión convencional con un perfil extremadamente deportivo que es notablemente más afilado que el de su predecesor. Además, su diseño, su distintivo concepto de vehículo y su superior dinamismo lo diferencian más que nunca del Serie 3.

Por el lado de su mecánica, esta sexta generación incorpora muchas variantes con potencias que alcanzan hasta los 374 CV. La gran novedad es la incorporación del Mild Hybrid, un motor eléctrico de arranque-generador de 48V y una segunda batería que permite regenerar y almacenar mucha más energía de frenado. Esta se utiliza para alimentar el sistema eléctrico, aligerando la carga de trabajo del motor de combustión y aumentando su potencia.

Este BMW Serie 4 Cabrio se fabrica en la planta de BMW en Dingolfing.

Dodge Challenger

Quizás el automóvil más icónico de la serie es el Dodge Challenger, el cual fue un regalo de Daniel LaRusso a Johnny como símbolo de paz entre los dos principales dojos de la ciudad. El modelo fue transformado por completo con los colores de Cobra Kai para darle un aspecto agresivo y totalmente deportivo, que refleja la personalidad aguerrida del sensei Lawrence.

Más allá que se muestra la última generación del modelo, el Challenger marcó su historia en la década del 70 cuando se presentó para competir contra el Ford Mustang y Chevrolet Camaro. Esta versión dejó una huella en la industria automotriz y en el segmento de los “muscle cars”.

Después de años de no haberse producido, su regreso fue en 2008 cuando se presentó en el Salón de Chicago. Su producción comenzó enseguida y empezó a ganar nuevos seguidores, dada la historia que traía de décadas pasadas.

El más potente de la gama era el SRT, un modelo que fue adaptado por otros preparadores para “sacarle” unos 807 caballos de potencia al motor HEMI V8 de 6.2 litros sobrealimentado.

Jeep Wrangler Rubicon

La nueva generación del modelo más icónico del offroad se lanzó el año pasado. Dispone un diseño renovado que mantiene la esencia del clásico todo terreno con más de 75 años de historia ininterrumpida e incluye nuevos equipamientos de confort y seguridad.

Su estilo mantiene la tradicional parrilla de siete barras y suma un porte más amplio con una línea de cintura rebajada y unas ventanas que aumentaron su tamaño para mejorar la visibilidad. La versión Rubicon está disponible tanto en dos puertas como en cuatro.

Por el lado de su mecánica, está disponible con el conocido motor Pentastar V6 de 3.6 litros con sistema Stop-Start y una potencia máxima de 282 CV. Esta única variante está asociado a una nueva transmisión automática de ocho velocidades.

Pontiac Firebird

Los Pontiac se convirtieron en un ícono automotriz en los 80 gracias a series de la época como los Dukes de Hazzard o el Auto Fantástico No por nada, es el primero en aparecer y es el que acompaña al protagonista para traer de vuelta los años gloriosos de Cobra Kai.

Desde su nacimiento, este modelo marcó el camino de Pontiac. Desarrollado por General Motors, este vehículo tenía como objetivo cautivar al público estadounidense con un deportivo que salía de lo convencional.

El Firebird lo presentaron solo seis meses después de su hermano de plataforma, el Chevrolet Camaro y tuvo que trabajar a las sombras del icónico modelo de GM. A pesar de ello, se transformó en un vehículo de culto que llamaba la atención por sus incesantes apariciones en las pantallas y por el poderoso motor V8.

Cada automotriz tiene sus planes cuando lanzan un vehículo totalmente nuevo. Una de ellas es su aparición en diferentes películas para acompañar el éxito que puede llegar a tener el film en cuestión. A veces esa jugadas no salen tan bien, pero otras, casi sin quererlo, hacen mucho más importante un modelo que no tuvo un gran éxito comercial.