Israel y Hamás están 'más cerca que nunca' de un acuerdo de alto al fuego, según Blinken

Reportajes Especiales - News

Guardar

Israel-Gaza War (2023- )PalestiniansGaza StripIsraelHamasPeace Process

Las negociaciones, con la mediación de Catar, Egipto y Estados Unidos, al parecer están cerca de concluir tras meses de intentos fallidos de lograr avances importantes.

Israel y Hamás están "a punto" de lograr un alto al fuego en Gaza y la liberación de los rehenes allí retenidos, según dijo el martes el secretario de Estado, Antony J. Blinken, lo que aumentó las esperanzas de un respiro a la violencia tras más de 15 meses de guerra.

"Están al borde, más cerca que nunca", dijo Blinken en un acto del Atlantic Council en Washington. "Pero ahora mismo, mientras estamos aquí sentados, esperamos la palabra final de Hamás sobre su aceptación. Y hasta que no tengamos esa palabra, seguiremos al borde".

Una persona familiarizada con las negociaciones dijo el martes por la noche que Israel y Hamás habían llegado a un acuerdo y que ambos parecían dispuestos a aceptarlo públicamente en un futuro muy próximo. La persona, que pidió mantener su anonimato porque no se había anunciado el acuerdo, dijo que el ambiente era tenso, pero esperanzador.

Ni los funcionarios israelíes ni los de Hamás han confirmado públicamente su postura sobre la propuesta de alto al fuego, aunque Blinken sugirió que Israel estaba de acuerdo y que la suerte del mismo ahora dependía de Hamás.

Los negociadores dijeron que Hamás parecía dispuesto a aceptar las condiciones, lo que incluye las exigencias sobre el intercambio de prisioneros palestinos por rehenes y los movimientos específicos de las tropas israelíes a medida que se retiran de sus posiciones en Gaza, según la persona familiarizada con las conversaciones.

Pero esa persona advirtió que el acuerdo tiene más de 100 apartados y que ningún acuerdo diplomático de esa complejidad puede considerarse completamente cerrado hasta que ambas partes lo anuncien públicamente.

Funcionarios estadounidenses han hecho comentarios optimistas sobre las conversaciones de alto al fuego en el pasado, pero las negociaciones se han interrumpido en repetidas oportunidades en medio de recriminaciones mutuas. Y representantes de otros países mediadores, como Catar y Egipto, han advertido que incluso los avances sustanciales podrían frustrarse en el último minuto.

"Creemos que estamos en la fase final, pero hasta que no haya un anuncio, no habrá anuncio", declaró el martes a la prensa Majed al Ansari, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Catar.

Sin embargo, en las últimas semanas algunos funcionarios familiarizados con las conversaciones han expresado mayores esperanzas de llegar a un pacto. Los mediadores habían "logrado minimizar muchos de los desacuerdos entre ambas partes", dijo Al Ansari, añadiendo que estaban centrados en "los detalles finales para lograr un acuerdo".

Funcionarios tanto del gobierno israelí como de Hamás han sugerido que están dispuestos a avanzar si la otra parte da su visto bueno. El lunes, un funcionario de Hamás dijo que era posible llegar a un acuerdo en los próximos días siempre que Israel no cambiara repentinamente de postura. El martes, un funcionario israelí dijo que su país estaba dispuesto a cerrar el acuerdo y que estaba esperando a que Hamás tomara una decisión.

Algunos funcionarios también han sugerido que un plazo inminente había ayudado a cerrar la brecha: el final del mandato del presidente Joe Biden y la toma de posesión del presidente electo Donald Trump, el 20 de enero. Ese plazo ayudó a los negociadores a presionar, tanto a Israel como a Hamás, para que aceleraran su toma de decisiones tras meses de retrasos.

Trump ha advertido que "se desencadenará un infierno" si no se libera a los rehenes antes de que él sea presidente. Steve Witkoff, su candidato a enviado para Medio Oriente, también ha viajado a Catar e Israel, donde se ha reunido con altos cargos, entre ellos el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

Funcionarios estadounidenses han dicho que Witkoff ha sido un actor importante y de apoyo en las conversaciones sobre el alto al fuego. Pero no ha participado en los intrincados detalles del acuerdo, según la persona familiarizada con las negociaciones. Sin embargo, ha dejado claro a todas las partes que Trump quiere que se llegue a un acuerdo inmediatamente.

También han dicho que el impulso para un acuerdo con Hamás se aceleró después de que Israel y el grupo armado libanés Hizbulá alcanzaran su propio acuerdo de alto al fuego a finales de noviembre. Ese pacto contribuyó a aislar a Hamás, según la persona familiarizada con las negociaciones, quien dijo que las conversaciones se volvieron más productivas en ese momento.

Si Hamás e Israel llegan a un acuerdo, eso supondría cierto alivio para los palestinos de Gaza, que han soportadocondiciones miserables encampos de desplazados e incesantes bombardeos por parte de Israel, y para las familias delos rehenes secuestrados en Israel, que llevan más de un año preocupadas por la suerte de sus seres queridos.

"Rezo para que esta vez el regreso sea real", dijo Manar Silmi, psicóloga de 34 años, quien espera poder regresar a su casa de Gaza, de donde huyó al principio de la guerra. "Hemos sufrido más que suficiente".

En un comunicado, Hamás dijo que las negociaciones "habían llegado a su fase final". La dirección del grupo armado palestino "esperaba que esta ronda de conversaciones concluyera con un acuerdo completo y claro", dijo Hamás.

Para lograr el acuerdo, los funcionarios de Hamás que negocian en Doha deben obtener el consentimiento de los mandos militares restantes del grupo que están en Gaza. Pero comunicarse con ellos puede ser difícil porque se cree que en su mayoría están escondidos, lo que a menudo provoca retrasos. Entre ellos se encuentra Mohammad Sinwar, cuyo hermano Yahya dirigió el grupo antes de ser asesinado por Israel.

Aún no se sabe si Sinwar había transmitido su postura respecto a la propuesta de alto al fuego a los dirigentes de Hamás en Doha.

El marco del acuerdo se inspiraba en gran medida en propuestas anteriores debatidas en mayo y julio, dijo un diplomático familiarizado con las conversaciones, que habló bajo condición de anonimato para poder hablar de las volátiles negociaciones. Esas propuestas detallaban un alto al fuego en tres fases en el que las tropas israelíes se retirarían gradualmente de Gaza, mientras Hamás liberaba rehenes a cambio de palestinos encarcelados por Israel.

Durante más de un año, los esfuerzos internacionales no han logrado poner fin a la guerra desencadenada por el ataque dirigido por Hamás que mató a unas 1200 personas en octubre de 2023. Otras 250 personas fueron tomadas como rehenes en Gaza, según las autoridades israelíes.

En respuesta, Israel lanzó una campaña militar contra Hamás que ha destruido gran parte del enclave, lo que ha ocasionado la muerte de al menos 45.000 personas, según las autoridades de salud de Gaza, que no distinguen entre civiles y combatientes.

En noviembre de 2023, unos 105 rehenes fueron liberados durante un alto al fuego de una semana. Los cadáveres de otros fueron recuperados por soldados israelíes y un grupo fue rescatado con vida. Se cree que permanecen en Gaza unos 98 rehenes, de los cuales las autoridades israelíes dan por muertos a unos 36.

Durante la primera fase del alto al fuego propuesto --que duraría unas seis semanas-- Hamás liberaría a 33 rehenes nombrados, la mayoría de los cuales Israel cree que están vivos, según dijo un funcionario israelí, que pidió mantener su anonimato para poder hablar de las conversaciones. Israel está dispuesto a liberar a cientos de prisioneros palestinos a cambio, dijo el funcionario, pero el número depende de cuántos rehenes sigan vivos.

Eli Albag, cuya hija Liri, de 19 años, fue secuestrada en la base militar donde esta servía durante el ataque dirigido por Hamás, se reunió con Netanyahu el martes por la noche junto con otros familiares de rehenes.

Netanyahu proyectó optimismo, dijo Albag. Pero afirmó que aún le costaba pensar en cómo sería recibir a su hija en casa.

"Primero queremos que se firme el acuerdo", dijo. "Después de eso, podremos tener otros pensamientos".

Aunque existe una importante presión pública en Israel para alcanzar un acuerdo que libere a los rehenes, muchos israelíes también temen que un alto al fuego deje a Hamás en el poder en Gaza, lo que le permitiría reagruparse y planear más ataques.

Dos de los aliados de coalición de línea dura de Netanyahu --Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich-- ya han denunciado el acuerdo propuesto como una rendición efectiva ante Hamás. Sus dos partidos de extrema derecha podrían amenazar al gobierno de Netanyahu si se retiraran de su coalición gobernante en señal de protesta.

Es probable que el acuerdo siga adelante porque la oposición parlamentaria israelí se ha comprometido mayoritariamente a proporcionarle a Netanyahu una red de seguridad para garantizar un alto al fuego y un acuerdo sobre los rehenes. Eso significa que esos partidos no permitirían que una moción de censura derrocara a su gobierno, aunque la retirada de sus aliados de extrema derecha podría despojar a su coalición de la mayoría en el Parlamento.

Pero no está claro cuánto duraría esto, ya que dejaría el futuro político de Netanyahu en manos de rivales que han jurado derrocarlo.

En Gaza, Montaser Bahja, profesor de inglés desplazado refugiado en la ciudad de Gaza, dijo que los palestinos empezaban a albergar esperanzas de llegar a un acuerdo tras más de un año de hambre y privaciones.

Pero, aunque ambas partes llegaran a declarar un alto al fuego, muchos gazatíes estaban asustados por su incierto futuro de posguerra, dijo Bahja. Incluso si el acuerdo de Hamás garantizara la liberación de cientos de presos palestinos, pocos lo considerarían un logro debido a la magnitud de las muertes y la devastación en Gaza, añadió.

"Todo está en el aire", dijo. "En este momento, la gente solo quiere que esto se termine".

Ismaeel Naar y Edward Wong colaboraron con la reportería.

Adam Rasgon es reportero del Times en Jerusalén y cubre asuntos israelíes y palestinos. Más de Adam Rasgon

Aaron Boxerman es reportero del Times que cubre Israel y Gaza. Está radicado en Jerusalén. Más de Aaron Boxerman

Isabel Kershner, corresponsal en Jerusalén, ha estado informando sobre la política israelí y palestina desde 1990. Más de Isabel Kershner

Michael D. Shear es corresponsal en la Casa Blanca del Times y cubre al presidente Biden y su gobierno. Ha reportado sobre política durante más de 30 años. Más de Michael D. Shear

Ismaeel Naar y Edward Wong colaboraron con la reportería.

Guardar