
El Ejército de Defensa de Israel (IDF) emitió una advertencia de evacuación dirigida a los puertos de Ras Isa, Hodeida y Salif, ubicados en la costa occidental de Yemen, en áreas bajo control de los rebeldes hutíes. Según un mensaje publicado en la red social X por el portavoz del IDF, el coronel Avichay Adraee, se trata de una medida de precaución ante posibles ataques aéreos.
La advertencia se produce tras una serie de lanzamientos de misiles balísticos y drones por parte de los hutíes hacia territorio israelí en los últimos días. Estos ataques se registraron después de que la Fuerza Aérea de Israel bombardeara el aeropuerto de Saná, controlado por los hutíes, así como otras instalaciones vinculadas al grupo rebelde la semana pasada.
El coronel Adraee justificó la advertencia al afirmar que “debido al uso de los puertos por parte del régimen terrorista hutí para sus actividades terroristas, instamos a todos los presentes a evacuar y mantenerse alejados de ellos por su propia seguridad hasta nuevo aviso”.
El viernes, el Ejército israelí interceptó viernes un misil disparado desde Yemen que hizo sonar las alarmas antiaéreas en Tel Aviv y en varias localidades del centro de Israel, dijeron las fuerzas armadas en un comunicado.
El ataque llega después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciase una tregua con los hutíes que, según la prensa israelí, pilló por sorpresa al Gobierno de Israel.
El acuerdo se refiere únicamente a los ataques del grupo yemení, aliado del régimen de Irán, a los buques en el Mar Rojo, y los propios hutíes han avisado de que no dejarán de atacar a Israel mientras no cese la guerra en Gaza.

Sin embargo, el pasado martes, los rebeldes hutíes prometieron una respuesta “fulgurante” a Israel, pero no mencionaron el acuerdo de alto al fuego con Estados Unidos anunciado por Omán.
El jefe político de los hutíes, Mahdi al Mashat, prometió una respuesta “fulgurante, dolorosa y más allá de lo que el enemigo israelí pueda soportar” y advirtió que los bombardeos “continuarán”, en un comunicado emitido después de que Israel bombardeara infraestructuras en manos de los rebeldes, en respuesta a un disparo de misil de los insurgentes contra el aeropuerto de Tel Aviv.
Estados Unidos y los rebeldes hutíes de Yemen llegaron a un acuerdo de alto al fuego, según indicó este martes Omán, país mediador, después de que el presidente Donald Trump anunciara el cese de los bombardeos contra los insurgentes.
Los hutíes, junto con los grupos terroristas Hamas y el Hezbollah, forman parte de lo que Irán presenta como el “eje de la resistencia” contra Israel. Sin embargo, Teherán niega proporcionar ayuda militar a los hutíes. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, acusó a Irán de ser “directamente responsable” de los ataques de los rebeldes contra su país.
Aunque casi todos los misiles hutíes fueron interceptados por las defensas aéreas israelíes durante más de un año, el pasado domingo un misil impactó directamente en el perímetro del Aeropuerto Ben Gurion, cerca de Tel Aviv.
Los rebeldes yemeníes se atribuyeron la responsabilidad del “disparo de un misil balístico hipersónico contra Ben Gurion”, que provocó una breve interrupción del tráfico aéreo y una suspensión temporal de los vuelos internacionales.
Irán negó haber ayudado a los hutíes en el ataque. Su ministro de Asuntos Exteriores, Abbas Araqchi, ha acusado a Israel de intentar arrastrar a Estados Unidos a una “catástrofe” en Medio Oriente.