La cuarta ronda de conversaciones nucleares entre EEUU e Irán concluyó con un acuerdo para continuar el diálogo

Las partes mantienen posiciones divergentes tras más de tres horas de negociaciones en Mascate. Washington se mostró “alentado” por los resultados, mientras Teherán las describió como “difíciles pero útiles”

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 Un técnico en una
Un técnico en una instalación iraní de conversión de uranio en Isfahan (REUTERS/Caren Firouz (IRAN)/archivo)

Estados Unidos e Irán concluyeron el domingo en Omán su cuarta ronda de negociaciones sobre el programa nuclear de Teherán, con evaluaciones distintas sobre el progreso alcanzado, mientras el ministro de Relaciones Exteriores iraní declaró que el derecho de su país a enriquecer uranio no es negociable.

La delegación iraní, encabezada por el canciller Abás Araqchi, negoció en Mascate con el emisario estadounidense para Oriente Medio, Steve Witkoff, en un contexto marcado por la exigencia de Washington de acabar con cualquier tipo de enriquecimiento de uranio en ese país.

Tras más de tres horas de encuentro, ambas partes ofrecieron valoraciones diferentes sobre los resultados. Un alto funcionario estadounidense calificó las conversaciones de “positivas” y anunció que “pronto se celebraría otra ronda”.

“Se llegó a un acuerdo para seguir adelante con las conversaciones y continuar trabajando en los elementos técnicos. Nos sentimos alentados por el resultado de hoy y esperamos con interés nuestra próxima reunión, que tendrá lugar en un futuro próximo”, añadió el funcionario estadounidense, que habló bajo condición de anonimato.

Por su parte, Irán describió las negociaciones como “difíciles pero útiles”. “Concluyó la cuarta ronda de negociaciones indirectas Irán-EEUU; conversaciones difíciles pero útiles para entender mejor las posiciones de cada uno y encontrar formas razonables y realistas de abordar las diferencias”, dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Esmaeil Baqaei, en la red social X.

Antes del inicio de las conversaciones, el canciller iraní había enfatizado que la “capacidad de enriquecimiento es uno de los honores y logros de la nación iraní” y agregó que ese es un tema “no negociable”. Sin embargo, expresó esperanzas de que esta ronda alcanzara un “momento decisivo”.

El ministro de Asuntos Exteriores
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, es recibido por un funcionario omaní no identificado a su llegada a Mascate este domingo (Iranian Foreign Ministry/WANA/Reuters)

Sin relaciones diplomáticas desde 1980, Irán y Estados Unidos han celebrado desde el 12 de abril cuatro sesiones de conversaciones bajo la mediación de Omán sobre la espinosa cuestión del programa nuclear iraní.

El objetivo de los encuentros es concluir un nuevo acuerdo para evitar que Irán se dote del arma atómica a cambio del levantamiento de las numerosas sanciones que paralizan su economía.

Teherán defiende que sus fines son exclusivamente civiles, aunque Estados Unidos y otros países occidentales temen que busque desarrollar un arma atómica y alertan de que se acerca al nivel de enriquecimiento de uranio necesario para ello.

En una entrevista difundida el viernes, Witkoff declaró que la administración Trump se opone a todo enriquecimiento de uranio en Irán. “Esto significa desmantelamiento, prohibición de la militarización y que Natanz, Fordo e Ispahan (las tres instalaciones de enriquecimiento) tienen que ser desmanteladas”, dijo al medio conservador Breitbart News.

Vista del reactor de la
Vista del reactor de la central nuclear iraní de Bushehr (REUTERS/Caren Firouz (IRAN)/archivo)

En 2015, Irán y seis grandes potencias (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania) ya cerraron un acuerdo en este sentido, pero quedó en papel mojado cuando Trump, en su primer mandato, se retiró de él en 2018.

Desde entonces, Irán se desentendió del compromiso de limitar el enriquecimiento de uranio al 3,67%. Actualmente lo hace al 60%, acercándose al 90% necesario para fines militares. Sus reservas de material fisible son motivo de inquietud para las potencias occidentales.

Las negociaciones se desarrollan mientras los gobiernos europeos se plantean si es idóneo activar un mecanismo previsto por el acuerdo de 2015 que permite restablecer las sanciones de la ONU si Irán no respeta sus compromisos. Esta opción expira en octubre.

Esta ronda de negociaciones en Omán precede a una gira regional de Trump que lo llevará a Arabia Saudita, Catar y Emiratos Árabes Unidos.

(Con información de AFP)