
Estados Unidos advirtió el jueves contra un paso en falso por parte de Irán después de que un alto asesor del líder supremo del país amenazara con expulsar a los inspectores nucleares de la ONU antes de las conversaciones del fin de semana con Estados Unidos.
“La amenaza de ese tipo de acción, por supuesto, es incompatible con las afirmaciones de Irán de tener un programa nuclear pacífico”, declaró a la prensa Tammy Bruce, portavoz del Departamento de Estado. “Además, expulsar a los inspectores del OIEA de Irán constituiría una escalada y un error de cálculo por parte de Irán”.
Este jueves, un asesor del líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, advirtió que Teherán podría expulsar a los inspectores de la ONU que supervisan el programa nuclear, si continúan las “amenazas” contra el país, en vísperas de las conversaciones con Estados Unidos.
Estas declaraciones del almirante Ali Shamjani, asesor político de Jamenei, son la primera reacción de Irán después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, dijera el miércoles que una acción militar contra Irán es posible, si no hay un acuerdo sobre el programa nuclear.
“Las persistentes amenazas externas y el hecho de que Irán esté en alerta de un ataque militar pueden llevar a medidas disuasorias, como la expulsión de los inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y al cese de la cooperación”, declaró el funcionario en la red social X.
Shamjani señaló que Irán también puede considerar “el traslado de material enriquecido a lugares seguros”.
El ministro de Relaciones Exteriores iraní Abás Araghchi tiene previsto participar el sábado en Omán en negociaciones con el emisario estadounidense para Medio Oriente Steve Witkoff.
Trump envió en marzo una carta a Jamenei, que es la máxima autoridad en Irán y tiene la última palabra en asuntos de Estado, para pedir una negociación directa, pero advirtió que si la diplomacia fracasa, puede haber una acción militar.

El presidente estadounidense reiteró su postura el miércoles al ser preguntado por periodistas si una acción militar todavía era una opción y respondió: “Si se requiere intervención militar, la tendremos. Israel, obviamente, estará muy involucrado en ello y será el líder”.
Este jueves, Estados Unidos sostuvo que las negociaciones que mantendrá con Irán en Omán serán “directas”.
“El sábado se llevará a cabo una reunión muy importante. Por primera vez en mucho tiempo habrá conversaciones directas (...) Esperamos que conduzcan a la paz”, expresó el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, en una reunión de gabinete en la Casa Blanca presidida por Donald Trump.
El jefe de la diplomacia estadounidense subrayó que Trump “ha sido muy claro en cuanto a que Irán nunca tendrá un arma nuclear” y sugirió que esa determinación ha empujado a Teherán a aceptar una negociación.
El régimen de Irán declara estar contra una negociación directa con Estados Unidos, pero dejó la puerta abierta a un diálogo indirecto.

Teherán alcanzó en 2015 un histórico acuerdo con las principales potencias mundiales en el que se comprometió a limitar su programa nuclear a fines civiles, bajo supervisión de los inspectores del OIEA, a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales.
Estados Unidos anunció en 2018 su retirada del acuerdo internacional, de forma unilateral, durante el primer gobierno de Trump y volvió a imponer duras sanciones contra Irán.
En respuesta, Teherán comenzó a desligarse de sus compromisos de restringir su programa nuclear.
Las potencias occidentales, lideradas por Estados Unidos, acusan desde hace décadas a Irán de querer dotarse de armas nucleares, algo que Teherán desmiente, ya que afirma que su programa nuclear se limita a fines civiles.
(Con información de AFP)