Rediseñaron una calle con líneas onduladas para reducir la velocidad, pero el resultado desconcertó a los vecinos

Su estética inusual confundió tanto a los habitantes del condado Montgomery que las autoridades tuvieron que explicar su funcionalidad y aclarar que no se trataba de una broma

Guardar
Vecinos califican las líneas curvas
Vecinos califican las líneas curvas en Grays Lane como una solución confusa y poco efectiva. Crédito: NBC News Philadelphia

El condado de Montgomery, situado en las afueras de Filadelfia, introdujo un método inusual para reducir la velocidad vehicular en una calle residencial: líneas onduladas pintadas sobre el asfalto. La medida se aplicó sobre Grays Lane, una avenida que, según autoridades locales, se había transformado en una zona de circulación excesivamente rápida.

En un comunicado publicado en Facebook, los funcionarios explicaron que “estas medidas para calmar el tráfico se están instalando debido a las numerosas quejas/inquietudes que recibimos de los residentes sobre la ‘pista de carreras’ en la que se ha convertido Grays Lane”.

Además del trazado curvo, se incorporaron extensiones de aceras, lo que sugiere una intervención más amplia en términos de diseño urbano y seguridad vial. La técnica de las líneas onduladas se inscribe en una tendencia de urbanismo táctico que busca inducir cambios de comportamiento en los conductores a través de la percepción visual. Sin embargo, el municipio no brindó detalles técnicos sobre estudios previos ni criterios utilizados para definir esta estrategia específica en lugar de otras más comunes como los lomos de burro.

Las reacciones de los habitantes

La respuesta ante las nuevas líneas onduladas fue inmediata y mayoritariamente crítica. En declaraciones a NBC News Philadelphia, Mike DiLorenzo, uno de los vecinos, expresó su desacuerdo al afirmar: “Este no es el diseño adecuado. Hay otras opciones, y creo que deberían haber optado por eso”. Otro consideró que “los reductores de velocidad habrían contribuido mucho más a frenar a la gente en esta carretera, en particular”.

Entre los testimonios recogidos por medios como CBS News y 6ABC, se repitieron comentarios que cuestionaban tanto la estética como la lógica del diseño. Algunas personas señalaron que conducir por la calle respetando las líneas les daba la sensación de estar en una “montaña rusa”, mientras que otros se mostraron preocupados por la posibilidad de ser confundidos con conductores ebrios.

“Si condujeras así por la calle, la policía pensaría que estás bebiendo y conduciendo y te detendría”, escribió un usuario en redes sociales. Otro resumió la sensación general con ironía: “Parece que le diste licencia creativa a una clase de konder”.

Algunos en contra, otros a favor

Aunque la mayoría de las reacciones vecinales fueron de desconcierto o rechazo, hubo quienes defendieron la decisión municipal. Joe Albanese, residente de Montgomeryville, ofreció una mirada distinta al declarar a 6ABC Action News: “Pensé que parecía un poco loco cuando vi a los chicos hacerlo esta mañana, pero tiene sentido para mí porque la gente siempre va demasiado rápido por Grays Lane”.

Este testimonio pone de relieve un punto central que motivó la intervención: el carácter residencial de la zona con tránsito peatonal frecuente, proximidad de escuelas y presencia de animales. Según Albanese, la medida adquiere lógica dentro de un contexto en el que los riesgos por velocidad excesiva no son menores.

Opiniones divididas entre vecinos: algunos
Opiniones divididas entre vecinos: algunos ven lógica en las medidas, otros expresan rechazo. Crédito: NBC News Philadelphia

La aclaración sobre el proyecto

La reacción pública fue tan desconcertada que muchos habitantes del municipio creyeron que se trataba de una broma del Día de los Inocentes, que se celebra cada 1° de abril, dada la naturaleza poco convencional de las líneas onduladas. Frente a esta percepción generalizada, el gobierno local se vio obligado a emitir una aclaración enfática a través de sus redes sociales. En su comunicado, las autoridades confirmaron que “sí, es una precaución legítima que se ha puesto en marcha”.

Este mensaje oficial buscó reafirmar que las modificaciones realizadas sobre Grays Lane no respondían a una acción simbólica ni a una provocación humorística, sino que formaban parte de un plan de seguridad vial en respuesta a múltiples quejas de la comunidad. No obstante, en el texto difundido por el municipio no se detallaron antecedentes técnicos ni criterios de eficacia asociados a este tipo de intervenciones, lo que contribuyó a mantener un ambiente de confusión y desconfianza entre los residentes.