
La junta militar que gobierna Myanmar desde el golpe de Estado de febrero de 2021 ha decretado este lunes siete días de luto por las más de 1.700 víctimas mortales por el fuerte terremoto de magnitud 7,7 en la escala Richter registrado la semana pasada y que también sacudió Tailandia y China.
Así, ha declarado que desde este lunes hasta el próximo 6 de abril, las banderas ondearán a media asta en todo el país en recuerdo de los afectados por un seísmo que ha dejado, además, 3.400 heridos y 300 desaparecidos, según informaciones del portal de noticias Eleven.
El jefe de la junta, Min Aung Hlaing, ha realizado este mismo lunes una visita a varios heridos en un hospital militar en la capital, Naipyidó, desde donde ha pedido a los servicios sanitarios que den toda la ayuda necesaria a las víctimas.

Por su parte, la Federación Internacional de Cruz Roja ha hecho un llamamiento para recabar unos 115 millones de dólares (106 millones de euros) en ayudas a los afectados por el seísmo y las réplicas que han ido teniendo lugar durante los últimos días.
Así, ha lamentado la “destrucción” provocada por el desastre natural y ha alertado de las crecientes necesidades de la población local. “Para poder aumentar la asistencia, hemos lanzado un programa cuyo objetivo es entregar ayuda a unas 100.000 personas durante las próximas 24 horas”, ha explicado la organización.
“Esto no es solo un desastre, es una crisis humanitaria completa que se está exacerbando debido a las vulnerabilidades existentes”, ha apuntado Alexander Matheou, director regional del Comité Internacional de Cruz Roja para la región de Asia-Pacífico, que ha advertido de la llegada de los monzones y las altas temperaturas de cara a las próximas semanas.

En este sentido, ha recalcado que Myanmar sigue haciendo frente al desplazamiento de gran parte de su población debido al conflicto y a una situación “frágil”, además de una significativa “inseguridad alimentaria”. “Este terremoto empeora todo esto, y la comunidad internacional debe dar un paso al frente para dar una respuesta sostenida”, ha añadido.
Nuevos rescates
Al menos tres personas, entre ellas una mujer embarazada y un niño de cinco años, han sido rescatadas durante las últimas horas por los equipos de emergencias enviados por China a la ciudad birmana de Mandalay (centro), situada apenas a 20 kilómetros del epicentro del terremoto.
La Embajada china en Myanmar ha indicado que los rescates han sido llevados a cabo “tras una noche en vela de lucha continua” entre los restos del Sky Apartment y el Great Wall Hotel, antes de especificar que en el primer lugar han sido rescatados una embarazada, una mujer de 29 años y un niño de cinco. “Todos han sido enviados al hospital para recibir tratamiento”, ha subrayado.

Asimismo, ha indicado que horas antes había sido rescatada con vida una mujer entre los escombros del Great Wall Hotel y ha recalcado que el equipo de rescate chino, que llegó el domingo al lugar, “continúa llevando a cabo operaciones de rescate en la zona”, sin que por ahora haya informaciones sobre más supervivientes.
(con información de EP)