
La policía surcoreana informó este domingo de la detención de un hombre de 56 años, presuntamente vinculado con el origen de los incendios forestales masivos que desde el pasado 22 de marzo han devastado el sureste del país, provocando la muerte de al menos 30 personas, dejando más de 40 heridos y afectando a más de 48.000 hectáreas de bosque, según datos del Ministerio del Interior.
Se trata del mayor desastre forestal registrado en la historia reciente de Corea del Sur, superando los incendios del año 2000 en la costa este.
De acuerdo con la información policial y la agencia local Yonhap, el incendio se habría iniciado cuando el sospechoso realizaba un rito ancestral junto a la tumba de sus abuelos, en una colina del condado de Uiseong, en la provincia de Gyeongsang del Norte, a las 11:25 horas (hora local) del viernes 22.
Su hija habría declarado a las autoridades que el hombre intentó quemar tres ramas que colgaban sobre las sepulturas familiares, pero el fuego se salió de control y fue arrastrado por el viento, lo que habría desatado el primer foco del incendio.
Las llamas se propagaron rápidamente debido a la sequedad del terreno y a las condiciones climáticas extremas, tras un invierno inusualmente cálido que convirtió a 2024 en el año más caluroso registrado en Corea del Sur.

Desde su origen, el incendio se extendió hacia los municipios de Andong, Cheongsong, Yeongyang y Yeongdeok, destruyendo zonas boscosas y obligando a la evacuación de 6.885 personas, muchas de las cuales siguen desplazadas ante el elevado riesgo de reactivación de los focos.
Las autoridades mantienen el estado de catástrofe nacional, mientras los bomberos continúan enfrentando “serias dificultades” para extinguir las llamas, según señalaron en un informe reciente.
La superficie calcinada hasta la fecha equivale aproximadamente al 80% del tamaño de Seúl y supera por casi 20.000 hectáreas el alcance de los incendios del año 2000, considerados hasta ahora los más graves del país.
El hombre fue fichado sin detención formal el sábado, según confirmó un oficial de la policía provincial de Gyeongsang del Norte a la agencia AFP, bajo condición de anonimato.
El detenido ha negado su responsabilidad, y la policía no ha confirmado oficialmente la versión ofrecida por la hija del sospechoso. Las investigaciones siguen en curso para esclarecer las circunstancias exactas del suceso y determinar si hubo negligencia en el manejo del fuego. La localidad de Uiseong, donde se habría originado el fuego, es una de las más afectadas, con 12.800 hectáreas de bosque calcinadas.

Más de una docena de focos se han registrado en la región desde el inicio del desastre, alimentados por un clima seco y vientos intensos. Las autoridades meteorológicas han advertido que las condiciones seguirán siendo propicias para la expansión del fuego en los próximos días.
Mientras tanto, se intensifican los operativos de emergencia en las provincias más golpeadas, con apoyo aéreo y terrestre, en un esfuerzo por contener una de las crisis ambientales más graves del país en décadas.
(Con información de AFP y Europa Press)