
El Consejo Nacional de la Resistencia de Irán (CNRI), uno de los grupos más antiguos en oposición al régimen de Teherán, denunció que algunos medios de comunicación franceses orquestaron una campaña de “difamación” en su contra, dirigida por el régimen persa.
Según el CNRI, varias publicaciones respondieron a un pago indirecto por la reciente liberación de Olivier Grondeau, un ciudadano francés que estuvo detenido en Irán desde octubre de 2022, acusado de espionaje.
El CNRI se queja de las “fianzas” que, según su análisis, el régimen iraní ha estado recibiendo desde que llegó al poder hace 46 años y ha permitido que la toma de rehenes extranjeros se haya vuelto “rentable”.
En un comunicado emitido este viernes, el CNRI critica lo que considera una “sumisión y capitulación frente al régimen iraní”, acusando a ciertos medios de colaborar con Teherán al publicar artículos que desinforman sobre su organización y su líder, Maryam Radjavi, y al hacerlo, defienden intereses del régimen.
El grupo sostiene que la liberación de Grondeau, sin explicación alguna por parte de las autoridades iraníes, es vista como una maniobra política destinada a obtener favores en medios de comunicación internacionales.

Le Canard Enchaîné destapa el lujo de Radjavi
Una de las piezas clave que ha provocado esta reacción es un artículo publicado el martes por el semanario satírico Le Canard Enchaîné, que detalló el supuesto estilo de vida lujoso de Radjavi, quien, según la publicación, gastó cientos de miles de euros en hoteles y servicios de lujo.
El medio mencionó que, junto a un séquito de once personas, Radjavi pasó las pasadas navidades en una estación termal cerca de Vichy, donde se pagó en efectivo una factura de 28.950 euros.
El artículo también incluye críticas a la Organización de los Muyahidines del Pueblo de Irán (OMPI), parte fundamental del CNRI, señalando que sus fuentes de financiación provienen de “contribuciones obligatorias” de los militantes y de una operación anual de recaudación, que en su última edición recaudó cerca de 7 millones de euros.
Le Canard Enchaîné, además de subrayar que Radjavi es la jefa de “un movimiento islamo-marxista en lucha contra el régimen iraní”, hace hincapié en que esa “organización paramilitar” tiene un “tesoro de guerra de orígenes opacos”.

Además, se menciona que Radjavi utiliza esos fondos no solo para mantener su lujoso tren de vida, sino también para financiar “operaciones de comunicación” que intentan desmentir su pasado como parte de organizaciones incluidas en listas de grupos terroristas internacionales.
El miércoles, la emisora francesa Europe 1 indicaba en su web que entre diciembre y febrero se comunicaron a dos fiscalías de Francia sospechas de blanqueo en las que estaban presuntamente implicadas empresas vinculadas a la OMPI.
El CNRI rechaza las acusaciones
El CNRI respondió a estos informes, acusándolos de ser “informaciones sesgadas” que demuestran un apoyo al sistema judicial del régimen iraní, que desde hace más de un año está juzgando a Radjavi por cargos de “rebelión y guerra contra Dios, con una condena a muerte dictada por adelantado".
En solidaridad con Radjavi, varias personalidades francesas se han pronunciado en su defensa. Entre ellas, destaca la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt, quien en una declaración publicada este viernes instó a cesar la manipulación de la prensa y del sistema judicial con el fin de apaciguar al régimen iraní. Betancourt, quien fue rehén de las FARC, subrayó la necesidad de frenar esta campaña en contra del CNRI.
(Con información de EFE)