
La Comisión Europea (CE) anunció este lunes durante una conferencia de donantes sobre Siria el aumento del compromiso de ayuda de la Unión Europea (UE) a ese país hasta los “cerca de 2.500 millones” de euros, dijo la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen.
La ayuda servirá para abordar las necesidades humanitarias urgentes, tanto en Siria como en las comunidades de acogida de Jordania, Líbano, Irak y Turquía.
En su intervención durante la novena conferencia de donantes para los sirios, Von der Leyen indicó que ese aumento de la promesa de ayuda de la Unión Europea se produce en un momento “crítico en que la población siria nos necesita más que nunca” y pidió a todos los participantes en el evento “hacer lo mismo en lo posible”.
“Conforme afrontamos las necesidades inmediatas de los sirios, hay que empezar a preparar el futuro. Hay ciudades enteras que reconstruir y toda una economía que reiniciar”, subrayó la presidenta de la CE.
Por ese motivo, añadió, la UE ha “suspendido las sanciones en sectores como la energía, el transporte o las transacciones financieras vinculadas con ellos y estamos listos para hacer más para atraer las inversiones para la reconstrucción” conforme se avanza en la transición política.
Añadió que está lista para incrementar su apoyo a la recuperación y reconstrucción, junto con otros socios, “mientras los progresos continúen”.
“Siria era una de las potencias económicas de Medio Oriente. Y queremos ser socios para la recuperación y el crecimiento de una nueva Siria”, subrayó Von der Leyen.
En la conferencia de 2024, la comunidad de donantes prometió un total de 7.500 millones de euros, de los que 2.120 millones procedían de la UE y sus Estados miembros para 2024 y 2025.
Para 2025, la UE aumentó su compromiso (con respecto a la anterior conferencia) de 560 millones de euros a 720,5 millones con el objetivo de apoyar a la población de Siria, así como a los refugiados sirios y las comunidades de acogida vulnerables de Líbano, Jordania e Irak.

Además, comprometió 600 millones de euros para 2026 para esos países y 1.100 millones de euros para apoyar a los refugiados sirios y las comunidades de acogida vulnerables de Turquía en 2025 y 2026.
El evento ministerial contó con una sesión política presidida por la alta representante de la UE para la Política Exterior, Kaja Kallas, y dos sesiones presididas por las comisarias de Exteriores, Hadja Lahbib y del Mediterráneo, Dubravka Šuica.
La conferencia también sirvió como plataforma para reafirmar el compromiso de la UE de salvaguardar un papel destacado e inclusivo para la sociedad civil en la Siria tras el derrocamiento del régimen del dictador Bashar al Assad, dijo Bruselas en un comunicado.
Por otro lado, los donantes internacionales prometieron 5.800 millones de euros (6.300 millones de dólares). “Juntos hemos prometido un total de 5.800 millones de euros en subvenciones y préstamos”, dijo la comisaria europea para el Mediterráneo, Dubravka Suica, añadiendo que las subvenciones ascendieron a 4.200 millones de euros y los préstamos a 1.600 millones.
La comisaria europea de Preparación y Gestión de Crisis e Igualdad, Hadja Lahbib, ya adelantó este lunes que la UE quería aportar más fondos durante la conferencia de donantes para los sirios, aunque dejó claro que no podrá cubrir “el hueco dejado por Estados Unidos”.
“Es seguro que mejoraremos nuestro compromiso, daremos más, pero no podemos llenar el vacío dejado por Estados Unidos”, aseguró Lahbib ante los periodistas.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Siria, Asad al Shaibani, reclamó este lunes a la Unión Europea un “plan real” que vaya más allá de la ayuda humanitaria y continúe el planteamiento del levantamiento de sanciones para reconstruir el país.
“En el día de hoy estamos aquí no para hablar de la ayuda humanitaria, sino que queremos hablar de un plan real que nos permita lograr los objetivos que tenemos”, indicó el ministro de Exteriores sirio en el marco de la conferencia de donantes organizada en Bruselas.
Así, puso el foco en que los 27 sigan levantando sanciones a Siria, asegurando que se necesitan “medidas adicionales” para “permitir garantizar la recuperación” del país. “Estas sanciones se impusieron con el régimen anterior y ahora nos vemos sometidos a medidas que son consecuencia de algo que no hemos hecho nosotros”, afirmó, insistiendo en que es una cuestión “moral” y “humanitaria”.
“No podremos lograr una recuperación económica en Siria si se mantienen las restricciones y las sanciones impuestas sobre nuestro país y que suponen obstáculos incluso para la provisión de servicios sanitarios básicos y otros servicios básicos”, recalcó.

Cruz Roja lanza alerta sobre Siria
Por otra parte, la presidenta del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Mirjana Spoljaric, alertó este lunes de que el “camino para la paz es frágil” en Siria, por lo que instó a la comunidad internacional a “no abandonar” al país ahora que se encuentra inmerso en una “encrucijada histórica”.
“La paz es posible. Tenemos el interés y la responsabilidad de ayuda a Siria para que resurja de su abismo de ruinas y guerra. Esto se puede lograr, pero requiere un gran compromiso por parte de sus líderes, que deben adherirse al Derecho Internacional, y de la comunidad internacional”, explicó, según un comunicado.
Para Spoljarci, el país se encuentra en un momento “clave”, por lo que instó a aumentar la ayuda a la recuperación y reconstrucción de Siria". “Los catorce años de conflicto han tenido consecuencias devastadoras para los civiles. Muchos sirios viven ahora bajo el umbral de la pobreza y dependen de la ayuda humanitaria”, dijo, antes de afirmar que es “de vital importante” la infraestructura que permite suministrar electricidad y agua potable.
“Existe el riesgo de que se produzca un colapso total. Miles de familias están aún buscando a sus seres queridos. Las familias de los desaparecidos tienen que vivir con el trauma a menos que trabajemos juntos para darles respuestas”, dijo. “La tarea que hay por delante es colosal, pero debemos mantener nuestra revolución y compromiso con las familias”, agregó.
Actualmente, el CICR cuenta con unos 30.000 casos abiertos de desaparecidos en Siria. Más de 2.000 eran niños menores de 16 años cuando se supo por última vez de su paradero, si bien se desconoce el número real, que podría ser mucho mayor. No obstante, se han registrado progresos a la hora de identificar a los fallecidos, incluidos aquellos que perecieron en la cárcel de Sednaya.
(Con información de EFE y Europa Press)