El incendio provocado por la colisión entre un carguero y un petrolero el lunes en el Mar del Norte, frente a las costas de Inglaterra, continuaba el martes por la mañana, mientras el incidente generaba temores de un gran desastre ecológico.
“El incendio duró toda la noche y todavía continúa el martes por la mañana”, declaró a la AFP Martyn Boyers, director del puerto de Grimsby, no lejos del lugar del siniestro en el que uno de los tripulantes del carguero desapareció.
El petrolero “Stena Immaculate”, fletado por el ejército estadounidense, estaba anclado a unas 10 millas (16 kilómetros) de la ciudad de Hull en Yorkshire, en la costa este de Reino Unido, cuando fue embestido por el buque portacontenedores “Solong”, en circunstancias que aún se desconocen.
El carguero, con bandera portuguesa, transportaba una cantidad indeterminada de alcohol y quince contenedores de cianuro de sodio, un gas inflamable y altamente tóxico, según el sitio web especializado Lloyd’s List Intelligence, especializado en el transporte marítimo.
La colisión provocó un gran incendio. Uno de los tanques del “Stena Immaculate”, que contenía queroseno, se rompió, lo que provocó una fuga y generó temores de importantes daños ambientales. El queroseno era combustible para aviación Jet-A1 para el ejército de EEUU.

La búsqueda de un miembro de la tripulación del carguero desaparecido fue suspendida durante la noche y no se confirmó si se reanudaría.
El desaparecido era uno de los catorce miembros de la tripulación del carguero.
Un totaL de 36 miembros de la ambas tripulaciones fueron llevados a la costa sanos y salvos.
“Incendios del infierno”
La colisión fue la noticia principal en todos los periódicos británicos del martes.
“Catástrofe”, titulaba The Mirror, mientras The Sun hablaba de “Incendios del infierno”. El Daily Mail se preguntaba “¿Cómo pudo un barco que transportaba cianuro de sodio chocar contra un petrolero lleno de queroseno para el ejército estadounidense a plena luz del día?”.

El Daily Telegraph citaba a una fuente gubernamental que dijo que no hay evidencia en este momento de que el incidente fuera de naturaleza criminal, aunque no puede descartarlo.
Un portavoz de Downing Street señaló que la situación medioambiental era “extremadamente preocupante” y los guardacostas iniciaron “una evaluación” para decidir “las medidas contra la contaminación probablemente necesarias”.

Tom Webb, profesor de ecología marina en la Universidad de Sheffield, dijo que el área donde ocurrió la colisión es conocida por su rica vida silvestre y marina.
“La contaminación química resultante de incidentes de este tipo puede tener un impacto directo en las aves y también puede tener efectos a largo plazo en la cadena alimentaria marina”, explicó.
“Peligros tóxicos”

La oenegé Greenpeace alertó también de los “múltiples peligros tóxicos” del accidente “para la vida marina”.
“El queroseno que penetró en el agua cerca de una zona de reproducción de marsopas es tóxico para los peces y otras criaturas marinas”, apuntó Paul Johnston, científico principal de los Laboratorios de Investigación de Greenpeace en la Universidad de Exeter.
El ministro del gobierno británico, Matthew Pennycook, afirmó que se trataba de una “situación dinámica y en rápida evolución”.
Dijo que las lecturas de calidad del aire eran normales y que los guardacostas “están bien equipados para contener y dispersar cualquier derrame de petróleo”, con equipos que incluyen barreras desplegadas desde embarcaciones para detener la propagación del petróleo, y aeronaves que pueden rociar dispersantes sobre un derrame.

El “Stena Immaculate” pertenecía a la sociedad sueca Stena Bulk. Con 183 metros de eslora, fue puesto en servicio en 2017 y, según el sitio web Lloyd’s List Intelligence, transportaba 220.00 barriles de queroseno.
El petrolero había zarpado el 27 de febrero del puerto griego de Agioi Teodori, con destino a Killinghome, en el norte de Inglaterra.
Un portavoz militar estadounidense informó que el petrolero estaba fletado “temporalmente por el Military Sealift Command”, un servicio de las fuerzas armadas que opera buques con tripulación civil para el Departamento de Defensa.

Los investigadores de accidentes marítimos del Reino Unido han comenzado a recopilar pruebas sobre lo que causó que el Solong, que se dirigía de Grangemouth en Escocia a Róterdam en los Países Bajos, chocara contra el petrolero parado.
La investigación será liderada por Estados Unidos y Portugal, los países donde están registrados los buques.
En un pub de la localidad costera de Grimsby, el ex marinero Paul Lancaster aseguraba el lunes por la noche no entender “cómo dos barcos tan grandes pudieron chocar”. “Debe haber habido un problema de ingeniería importante”, afirmó a la AFP.
(Con información de AFP y AP)