La Misión de la República Islámica de Irán ante las Naciones Unidas afirmó este domingo que Teherán podría considerar negociaciones acerca de la potencial militarización de su programa nuclear, pero no su total desmantelamiento.
“Si el objetivo de las negociaciones es abordar las preocupaciones relativas a una posible militarización del programa nuclear iraní, se pueden considerar esas conversaciones”, indicó la legación diplomática iraní en la red social X.
“Sin embargo, si el objetivo es el desmantelamiento del programa nuclear pacífico de Irán para afirmar que lo que Obama no logró ya se logró, esas negociaciones nunca se llevarán a cabo”, añadió.
El mensaje se produce en medio del intercambio de mensajes entre Teherán y Washington acerca de posibles negociaciones sobre el controvertido programa nuclear iraní, su programa de misiles y el apoyo iraní a grupos terroristas regionales como Hamas y Hezbollah.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el viernes que había enviado una carta a Irán en la que instaba al país persa a negociar e hizo una referencia velada a una posible acción militar.
Tras su regreso al poder, Trump retomó la llamada política de “máxima presión” contra Irán y ha aprobado nuevas sanciones para cortar la venta de petróleo iraní.
El republicano abandonó en 2018 el pacto nuclear de 2015, firmado entre Irán y seis potencias, y que limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones. Esto se produjo durante la presidencia de Barack Obama.
El líder supremo de Irán, Alí Khamenei, rechazó negociar con los países “prepotentes” que insisten en ello, en una aparente referencia a Trump.
Khamenei afirmó que “los gobiernos prepotentes” exigen a Irán que “actúe de tal modo, no vean a tal persona, no fabriquen tal cosa, que sus misiles no tengan un alcance superior a tal”.
La máxima autoridad política iraní ya había rechazado la posibilidad de negociar al considerar que hablar con Washington “no es sabio, no es inteligente y no es honorable”.

Tras la salida estadounidense del acuerdo nuclear, Irán enriquece uranio muy por encima de lo permitido y ya posee 274 kilos enriquecidos al 60 % de pureza, cercano al uso militar del 90 %, según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Irán mantiene que su programa nuclear tiene un fin pacífico y que un edicto religioso de Khamenei prohíbe la producción de armas atómicas.
La producción acelerada de uranio casi apto para armas por parte de Irán aumenta la presión sobre Trump. El presidente de EEUU afirmó en repetidas ocasiones que está abierto a negociar con la República Islámica, al tiempo que ha incrementado las sanciones contra las ventas de petróleo iraní como parte de su política de “máxima presión” reimpuesta.
Bomba nuclear
Por otra parte, una nueva evaluación de los servicios de inteligencia de Estados Unidos indica que Irán podría estar explorando un método más rápido, aunque menos sofisticado, para desarrollar un arma nuclear si su liderazgo decide avanzar en esa dirección.
La información fue recopilada en los últimos meses de la administración de Joe Biden y luego transmitida al equipo de seguridad nacional de Donald Trump durante la transición de poder. De acuerdo con estos reportes, los científicos iraníes estarían investigando un procedimiento que permitiría convertir su creciente reserva de combustible nuclear en un arma funcional en cuestión de meses, en lugar del año o más que se estimaba anteriormente.
Funcionarios estadounidenses afirmaron a The New York Times que Alí Khamenei aún no ha tomado la decisión de desarrollar un arma nuclear. Sin embargo, la nueva inteligencia sugiere que, ante el debilitamiento de sus fuerzas aliadas y el fracaso de sus misiles contra defensas estadounidenses e israelíes, el gobierno iraní está evaluando opciones para fortalecer su capacidad de disuasión.
Esta información fue un punto clave en la reunión del martes entre Trump y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, la primera visita de un líder extranjero a la Casa Blanca desde la toma de posesión del republicano hace dos semanas. Netanyahu ha considerado en varias ocasiones un ataque militar contra las instalaciones nucleares iraníes, aunque en el pasado se ha abstenido por la presión de sus propios asesores y de EEUU.
(Con información de EFE)