El primer ministro israelí, Benjamín Netanyayu, celebró este jueves la liberación de tres rehenes, incluidos dos civiles y una soldado, en un intercambio por presos palestinos, y criticó las escenas de caos producidas en la entrega.
En un comunicado, Netanyahu dio la bienvenida a territorio israelí en su nombre y en el de su familia y el resto del país a la soldado Argam Berger y a los civiles Arbel Yehud (mujer de 29 años) y Gadi Moses (hombre de 80 años).
“Esta liberación se consiguió, antes de todo, gracias a nuestros heroicos soldados y también gracias a la posición firme y decidida que tomamos durante las negociaciones”, manifestó Netanyahu.
El primer ministro reiteró sus críticas ante el caos que se produjo en la liberación de Yehud y Moses, que fueron increpados por algunos de los miles de personas que se congregaron con banderas del grupo terrorista Hamas y la Yihad Islámica Palestina en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza.
“Durante la liberación de nuestros rehenes hoy, vimos imágenes sobrecogedoras. Dejamos claro a los mediadores que no pensamos aceptar ningún riesgo para nuestros rehenes. Y añadiré: Quien se atreva a dañar a nuestros rehenes pagará el precio”, dijo Netanhayu.
La liberación, horas antes, de la soldado israelí Agam Berger, de 20 años, que fue entregada por Hamas a la Cruz Roja en la localidad de Yabalia, en el norte de Gaza, se realizó sin incidentes.
Presos palestinos liberados llegan a Ramala
Por otra parte, casi un centenar de presos palestinos liberados por Israel llegaron en la tarde de este jueves en dos autobuses a la localidad cisjordana de Ramala, donde les esperan sus familias, equipos médicos y también cientos de personas para darles la bienvenida provistos de banderas palestinas y del movimiento nacionalista palestino Fatah.
Los reclusos salieron de las dependencias de la Cruz Roja a las 17.00, hora local (15.00 GMT), de la prisión israelí de Ofer rumbo al Centro Recreativo de Ramala (el mismo punto donde fueron liberados otros presos el pasado sábado) en un convoy que pasó por la localidad de Beitunia y tardó más de una hora y media en cubrir alrededor de 20 kilómetros.
Israel liberó este jueves, en la tercera ronda de intercambio de rehenes por presos, a 110 prisioneros de cárceles israelíes —unos 95 de ellos en Ramala—.
Los equipos médicos esperaban a los prisioneros con sillas de ruedas para un primer examen físico en el centro de recepción de Ramala, donde se escuchaban cánticos de “La gente quiere a las brigadas de Al Qasam” (brazo armado del grupo islamista palestino Hamas) y “Alá es grande”.
En el camino de los dos autobuses desde la prisión de Ofer hasta Ramala, retransmitido en directo por la cadena Al Jazeera, se produjeron enfrentamientos entre jóvenes palestinos y las fuerzas de seguridad israelíes, que dispararon contra ellos y les lanzaron gases.
Luego, los autobuses continuaron lentamente rodeados de coches y motocicletas que pitaban para recibir a los presos, así como de periodistas y viandantes que les filmaban dentro de los vehículos, entre vítores de palestinos congregados en las calles de Ramala.
Antes de la salida de los autobuses, al menos 14 palestinos resultaron heridos a poco más de un kilómetro de distancia de la cárcel de Ofer cuando soldados israelíes abrieron fuego contra decenas de personas allí congregadas, entre ellas periodistas, para ver la salida de los presos.
Entre los prisioneros liberados figuran 32 condenados a cadenas perpetuas, 48 presos con otros tipos de sentencias y 30 menores de edad. Todos, menos una presa, son hombres, informaron a EFE fuentes de la Comisión de Presos y Expresos Palestinos.
El canje de rehenes de este jueves no estaba previsto en el acuerdo original de alto el fuego, pero se incluyó ante las presiones de Israel a Hamas por no haber liberado el pasado sábado a la civil Arbel Yehud.
(Con información de EFE)