El ex presidente de Ghana, John Dramani Mahama, fue proclamado oficialmente ganador de las elecciones presidenciales celebradas el pasado sábado, luego de que la Comisión Electoral anunciara los resultados este lunes por la noche. Con un respaldo del 56,5% de los votos emitidos, Mahama, de 65 años, se impuso sobre su principal oponente, el vicepresidente Mahamudu Bawumia, quien alcanzó el 41% de los sufragios.
Según informó Jean Mensa, presidenta de la Comisión Electoral, los resultados corresponden a los votos de 267 de las 276 circunscripciones del país, lo que establece una victoria absoluta para Mahama, incluso si Bawumia lograra todos los votos en las nueve circunscripciones restantes.
La participación electoral alcanzó el 60,9%, un dato relevante considerando el contexto de crisis económica que atraviesa el país. La Comisión Electoral destacó que las elecciones se desarrollaron de manera “justa, creíble, transparente y pacífica”, en línea con las tendencias democráticas de Ghana, a pesar de algunos incidentes aislados.
El vicepresidente Bawumia, de 61 años, admitió la derrota el domingo y felicitó a Mahama por su victoria, comprometiéndose a apoyar el proceso de transición. Bawumia también reconoció que el Congreso Nacional Demócrata (NDC), el partido de Mahama, también había ganado las elecciones parlamentarias.
“Hago este discurso de concesión antes del anuncio oficial de la Comisión Electoral para evitar más tensiones y preservar la paz de nuestro país. Es importante que la comunidad inversora mundial siga creyendo en el carácter pacífico y democrático de Ghana”, subrayó el vicepresidente.
Crisis económica y las promesas de cambio
Por su parte, Mahama celebró su victoria como “enfática” y prometió liderar un gobierno que represente las “esperanzas y sueños” del pueblo ghanés. En un emotivo discurso ante sus seguidores en Accra, el presidente electo expresó su agradecimiento a los votantes, especialmente a los jóvenes que vieron en esta elección una oportunidad para superar las condiciones económicas que afecta al país.
Las elecciones de este año se desarrollaron en un contexto de una profunda crisis económica, marcada por una alta deuda pública y la peor crisis del costo de vida en una generación en el país. Ghana, un importante productor de oro y cacao en África, enfrenta su peor recesión en décadas, lo que llevó al gobierno a solicitar un préstamo de 3.000 millones de dólares al Fondo Monetario Internacional (FMI).
Durante la campaña electoral, Bawumia, economista de profesión, destacó que la desaceleración de la economía nacional, que según él “iba bien” antes de 2020, se debió a la pandemia de la COVID-19 y a los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania.
El ex presidente Mahama, quien lideró el país entre 2012 y 2017, había centrado su campaña en la necesidad de un “reinicio” de la economía, señalando que los altos índices de desempleo, particularmente entre los jóvenes, demostraban que Ghana “está en una encrucijada”.
En cuanto a la seguridad, las elecciones transcurrieron sin mayores incidentes, salvo un tiroteo aislado en el norte del país que dejó un muerto y un herido. A pesar de ello, la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) y la Unión Africana (UA) coincidieron en calificar el proceso como pacífico y conforme a los estándares democráticos internacionales.
Con esta victoria, Mahama se prepara para asumir un nuevo mandato de cuatro años, marcando el regreso al poder de su partido, el NDC, después de haber perdido las elecciones presidenciales de 2016 y 2020 ante el expresidente Nana Akufo-Addo, quien no pudo postularse en esta ocasión debido a los límites constitucionales sobre el número de mandatos consecutivos.
Bawumia buscaba hacer historia al convertirse en el primer presidente musulmán de Ghana y lograr una victoria que habría permitido al NPP alcanzar un inédito tercer mandato consecutivo en el Gobierno.
(Con información de EFE /AP)