Un equipo de científicos del Instituto Max Planck de Comportamiento Animal ha iluminado uno de los misterios más intrigantes de la fauna nocturna: los patrones de migración de los murciélagos. Estas criaturas, que suman más de 1.400 especies en todo el mundo y se encuentran en casi todos los continentes excepto la Antártida, presentaban comportamientos migratorios indescifrables hasta ahora.
Gracias a un enfoque innovador que combina biología, meteorología y tecnología avanzada, los investigadores han revelado detalles fascinantes sobre cómo los murciélagos aprovechan los frentes cálidos y las tormentas para atravesar grandes distancias.
Viajes extraordinarios: el redescubrimiento de la migración
Los murciélagos nóctulos (Nyctalus noctula), una especie común en Europa central, han demostrado ser capaces de realizar migraciones mucho más extensas de lo que se pensaba. En un seguimiento realizado a o largo de tres años, los científicos rastrearon a 71 hembras marcadas en Suiza que se desplazaron hacia el noreste, llegando a Alemania, Polonia y la República Checa. Durante estas travesías nocturnas, los murciélagos recorrieron hasta 383 kilómetros en una sola noche, superando por casi 200 kilómetros las estimaciones anteriores. Este descubrimiento redefine la comprensión de las capacidades físicas de los murciélagos y su comportamiento migratorio.
Según el biólogo Edward Hurme, autor principal del estudio, estas migraciones no son aleatorias ni dependientes únicamente de las necesidades ecológicas. Los datos sugieren que los murciélagos coordinan sus movimientos estratégicamente para aprovechar las condiciones climáticas favorables, como los vientos asociados a frentes cálidos que preceden a las tormentas.
Surfistas nocturnos: el papel de los frentes cálidos
Un hallazgo particularmente llamativo del estudio fue la relación entre las rutas migratorias de los murciélagos y las tormentas. Incorporando datos meteorológicos a su análisis, los investigadores descubrieron que estas criaturas nocturnas “surfean” los fuertes vientos generados por los frentes cálidos, utilizando esta energía natural para desplazarse con mayor eficiencia. Este comportamiento les permite conservar energía durante sus vuelos, una ventaja crucial para sobrevivir y cumplir con las exigencias de la migración.
“Fue una gran sorpresa. Teníamos alguna pista de que los murciélagos estaban respondiendo a las buenas condiciones del viento, pero no pensábamos que existiera una conexión con las tormentas”, explicó Hurme en una entrevista con National Public Radio (NPR). A pesar de esta revelación, los científicos aún no comprenden completamente cómo los murciélagos detectan o predicen la llegada de estas condiciones meteorológicas.
Innovación tecnológica al servicio de la biología
El avance logrado en este estudio no habría sido posible sin las herramientas tecnológicas desarrolladas específicamente para rastrear los movimientos de los murciélagos. Los investigadores emplearon pequeñas etiquetas colocadas entre los omóplatos de las hembras nóctulas, diseñadas para aprovechar la Internet de las cosas (IoT). Esta red de dispositivos interconectados permitió triangular con precisión las posiciones de los murciélagos y recopilar datos detallados sobre sus desplazamientos nocturnos.
A diferencia de las tecnologías más tradicionales, estas etiquetas eran lo suficientemente pequeñas y ligeras para no interferir en el vuelo de los murciélagos, además de ser biodegradables, ya que se desprendían naturalmente después de unas semanas. Charlotte Roemer, bióloga conservacionista del Museo Nacional de Historia Natural de Francia, destacó en una entrevista con Science que esta innovación “revoluciona el seguimiento de los movimientos de los murciélagos y seguramente ayudará a los investigadores a responder muchas preguntas sobre la migración”.
Un puente hacia la conservación
Los hallazgos obtenidos en este estudio también tienen un impacto potencial significativo en la conservación de los murciélagos, cuya población está cada vez más amenazada por actividades humanas. Uno de los mayores peligros para estas especies es la colisión con turbinas eólicas, que causan millones de muertes de estos especímenes al año. Comprender los patrones de migración y las condiciones que favorecen sus desplazamientos permitiría a los operadores de parques eólicos mitigar este riesgo.
Hurme señala que, a largo plazo, estudios como éste podrían conducir a sistemas predictivos que permitan a los parques eólicos apagar sus turbinas durante las noches de alta actividad migratoria de murciélagos. Esto los protegería y preservaría su papel esencial en los ecosistemas, como controladores de plagas y polinizadores.
Un futuro de posibilidades
La tecnología empleada en este proyecto abre nuevas posibilidades para explorar preguntas sobre la migración y otros comportamientos de los murciélagos. No solo permite estudiar a estas criaturas con mayor detalle, sino que también sienta las bases para investigaciones futuras que podrían abordar cómo los cambios climáticos y ambientales están afectando a las especies migratorias en general.
“Más estudios como este allanarán el camino para un sistema que permita predecir la migración de los murciélagos”, concluyó Hurme en la entrevista con National Public Radio (NPR). En un momento en que la tecnología y la ecología convergen, las innovaciones desarrolladas por este equipo podrían ser una herramienta clave para garantizar un equilibrio sostenible entre el progreso humano y la protección de la biodiversidad.