Un hombre de 43 años mató a cuchillazos a su esposa y a su hija de 16 en el departamento de Durazno (a unos 200 kilómetros de Montevideo), hirió a otras dos hijas –de 9 y 12– y luego se suicidó. El doble crimen ocurrió sobre la hora 7 de la mañana de este lunes y generó conmoción en esa ciudad del centro del país.
La Policía supo del caso casi tres horas después y, cuando llegaron a la casa, se encontraron con las dos niñas heridas en la vereda. Ambas fueron trasladadas a un centro de salud de la zona. En el interior de la casa estaban los cuerpos de la esposa del femicida, una mujer de 42 años, y la hija adolescente de ambos.
Los agentes policiales llegaron al lugar alertados por un posible incendio. Cuando llegaron, se encontraron con un mechero que estaba cerca de la cocinilla a gas. Los policías creen que la intención del hombre era prender fuego la escena del crimen, relató el subjefe de Policía de Durazno, Alexis Duarte.
Dentro de la casa había un “gran desorden”, narró Duarte al noticiero Subrayado de Canal 10.
La adolescente de 16 años que fue asesinada tenía una discapacidad. De acuerdo a los registros policiales, entre 2016 y 2017 hubo dos denuncias que alertaban de una posible “mala atención” hacia ella, sostuvo el jerarca policial.
En ese año hubo “actuaciones” por parte de las autoridades y se le avisó a la Justicia, pero no hubo ninguna medida ni procesamiento sobre este hecho, contó Duarte. De acuerdo con las primeras investigaciones, no había elementos que indicaran que podía ocurrir esto. “No hay ningún tipo de denuncia entre la pareja”, detalló Duarte.
En la escena del crimen había dos cuchillos, uno de mesa y otro más grande. Los dos estaban manchados con sangre. Ahora las pericias deberán determinar cuál de los dos fue el que causó las lesiones.
La información que tenía la policía en la tarde del lunes era que la niña de nueve años está internada en estado grave, en cuidados intensivos, pero estable. La menor de 12 años está en un sanatorio de Durazno. El padre le dio a ella 10 cuchillazos.
El fiscal del caso, Diego Chávez, informó al noticiero Telemundo de Canal 12 que se está investigando este hecho como cuatro delitos de femicidio; dos, en grado de tentativa.
Los agentes que intervinieron en la escena en primer lugar vieron que de la casa salía humo y escucharon gritos. “Al llegar, vemos una escena muy violenta. No se pudo ingresar porque era muy chica y había mucha sangre. Pudimos observar que había un mechero, una garrafa, que en teoría se había utilizado para intentar incendiar la finca. Es una hipótesis inicial”, sostuvo el fiscal.
Un familiar vive en una casa cercana a donde ocurrieron los crímenes. Aunque hasta la tarde del lunes no se le había podido tomar declaración porque estaba afectado por el impacto de la noticia, mencionó que en primer término que a las cinco de la mañana había escuchado “inconvenientes” dentro de la vivienda. Hubo “ruidos y gritos”, detalló el fiscal.
Una abuela y un hermano vivían en la casa de al lado y la Fiscalía buscará su testimonio para reconstruir estos crímenes.
Una vecina y comerciante del barrio donde sucedió la tragedia contó a Canal 10 que conoce a la familia desde hace muchos años y que quedó impactada por el crimen. “Una de las nenas es compañera de mi nietita en la escuela. Era un matrimonio muy unido, siempre juntos. Ellos eran bien. No sé qué puede haber pasado”, comentó.
