
Jair Bolsonaro, ex presidente de Brasil (2019-2022), presentó una mejoría en su estado de salud tras ingresar al hospital el pasado viernes debido a “fuertes dolores abdominales”. El ex mandatario, de 70 años, fue trasladado en helicóptero a un hospital en Natal, capital del estado de Rio Grande do Norte, donde permanece bajo observación.
El director médico del hospital, Luiz Roberto Fonseca, informó que, aunque no hay previsión de alta, Bolsonaro se encuentra en una “mejoría” clínica, con una “disminución de dolor”, y no presenta señales de gravedad mayor en su condición. “El paciente permanece en observación y va a pasar la noche en el hospital”, afirmó Fonseca, y añadió que no está prevista ninguna operación en este momento.
Bolsonaro sufre de una “suboclusión intestinal” derivada de las múltiples cirugías a las que se sometió tras un atentado en 2018, cuando fue apuñalado en un acto de campaña. Desde entonces, ha enfrentado complicaciones médicas recurrentes en la región abdominal.
El ex mandatario, quien se disponía a iniciar una gira política por Rio Grande do Norte el viernes, tuvo que interrumpir su agenda tras experimentar “dolores insoportables” en su abdomen durante su paso por la ciudad de Tangará, según el senador Rogério Marinho, quien acompaña a Bolsonaro.

A pesar del malestar, el ex presidente llegó al hospital de Natal consciente y calmado, y en imágenes difundidas por la prensa se le vio vestido con la camiseta de la selección de fútbol de Brasil y con una sonda nasal en su cama de hospital.
Bolsonaro también aprovechó sus redes sociales para tranquilizar a sus seguidores, asegurando que su estado de salud es “estable” y que está “recuperándose”, sin fiebre, y que la “evolución clínica es buena”.
Complicaciones judiciales y políticas
Además de sus problemas de salud, Bolsonaro enfrenta un complicado panorama judicial. Actualmente, está inhabilitado para presentarse a las elecciones presidenciales hasta 2030, tras haber cuestionado públicamente la fiabilidad del sistema electoral brasileño.

Asimismo, se encuentra bajo investigación por un presunto intento de golpe de Estado tras las elecciones de octubre de 2022, en las que fue derrotado por el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva. En este proceso judicial, Bolsonaro podría enfrentarse a una condena de hasta 40 años de prisión si es hallado culpable.
A pesar de estos procesos legales, el ex presidente ha reiterado su deseo de presentarse nuevamente a las elecciones presidenciales de 2026, en las que también podría ser candidato Lula. En este sentido, el senador Marinho expresó confianza en la pronta recuperación de Bolsonaro, manifestando que “estamos confiados en que el presidente saldrá de esto”.
(Con información de AFP)