
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, pidió este jueves “que se haga justicia” en el proceso penal abierto por la Corte Suprema contra el ex mandatario Jair Bolsonaro por presuntamente intentar dar un golpe de Estado tras perder las elecciones de 2022.
En una rueda de prensa celebrada en Tokio al término de su visita de Estado a Japón, el líder brasileño aplaudió la decisión de la máxima instancia judicial del país de procesar al ex mandatario conservador por una trama golpista para presuntamente intentar mantenerse en el poder, y que incluía planes para supuestamente asesinar al propio Lula.
“No tiene sentido que ahora haga tanto ruido diciendo que lo están persiguiendo”, dijo Lula en alusión a las declaraciones de Bolsonaro que cuestionaban la imparcialidad de los jueces y los acusaba de tener motivaciones “personales” contra él.
“Todo el mundo sabe lo que pasó en Brasil. Y él también sabe lo que hizo”, señaló el líder progresista, quien también afirmó que Bolsonaro debería limitarse a “demostrar su inocencia” en lugar de a reclamar la amnistía o apuntar a una persecución judicial.

“Ahora, como no tiene forma de demostrar que es inocente, como no tiene forma de demostrar que no intentó cometer un golpe de Estado, está tratando de provocar algún tipo de proceso”, dijo el mandatario.
Lula, no obstante, defendió la presunción de inocencia de Bolsonaro que él mismo “no tenía”, ya que le prohibieron presentarse a los comicios de 2018, según dijo.
“Así que solo espero que se haga justicia. Los brasileños también necesitan saber que la Corte Suprema está cumpliendo su papel”, recalcó el presidente brasileño.
La Primera Sala de la Corte Suprema brasileña aceptó este miércoles, por unanimidad, la denuncia de la Fiscalía y decidió procesar a Bolsonaro por “liderar” una trama golpista con el objetivo de anular el resultado de las elecciones de 2022, que perdió ante Lula, y mantenerse en el poder.

Además del ex mandatario, serán procesados siete de sus colaboradores, entre ellos ex ministros y militares de alto rango, todos ellos acusados de encabezar la conspiración supuestamente urdida entre 2021 y 2022, y de incitar los ataques contra las sedes de los tres Poderes perpetrados en enero de 2023.
Los ocho imputados serán juzgados por cinco delitos, en una fecha aún por determinar: abolición violenta del Estado democrático de derecho, intento de golpe de Estado, implicación en organización criminal armada, daño calificado y deterioro de patrimonio protegido.
Lula llegó el pasado lunes a Japón para una visita de Estado de cuatro días que concluye hoy para poner rumbo a Vietnam, donde tiene previsto reunirse a partir del viernes con el primer ministro de ese país, Pham Minh Chinh, y con el presidente, Luong Cuong.
(Con información de EFE)