
El papa Francisco, hospitalizado por problemas respiratorios, ha creado la nueva diócesis de Caazapá en Paraguay, desmembrada de la de Villarrica del Espíritu Santo, y nombró a monseñor Marcelo Benítez Martínez su primer obispo, confirmó este domingo la Santa Sede.
“El papa Francisco tiene previsto saludar e impartir una bendición desde el hospital Agostino Gemelli de Roma al final (de la oración semanal) del Angelus, que como en las últimas semanas será publicada de forma escrita”, indicó la oficina de prensa de la Santa Sede.
La nueva diócesis creada por el papa desde el hospital Gemelli de Roma, donde lleva 37 días ingresado, se ha desmembrado de la de Villarrica del Espíritu Santo y su nuevo obispo era hasta ahora vicario para Paraguay de la Provincia de la Asunción de la Santísima Virgen, indicó el Vaticano en un comunicado.
Benítez, nacido en Caazapá en 1956, se licenció en Teología en el Instituto Humanístico y Filosófico Jesuita de la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción.
El nuevo obispo de Caazapá hizo sus votos en la Orden de los Hermanos Menores en 1993 y fue ordenado sacerdote en 1994.

Como religioso de la Orden Franciscana, ofreció diversos servicios en la Casa de Formación de la Custodia Fray Luis Bolaño desde (1991-1996 y 2001-2003), fue Asistente de la Orden Franciscana Seglar (2015-2018) y, desde 2019 y era vicario de la Provincia de la Santísima Virgen del Río de la Plata, incluyendo Argentina y Paraguay.
Tras ocupar los cargos de vicepárroco y párroco, desde 2023 era vicario cooperador de Nuestra Señora de la Asunción de Villarrica del Río de la Plata.
La nueva diócesis, según precisó la Santa Sede, comprende un territorio de 9.496 kilómetros cuadrados y 194.512 habitantes, de los que la gran mayoría son católicos, un total de 171.170, con 23.342 parroquias.
Entretanto, el papa Francisco se asomará este domingo desde la ventana de su apartamento en el hospital Gemelli de Roma, según confirmó este sábado el Vaticano, en la que será su primera aparición pública desde su ingreso, hace 37 días, por una neumonía bilateral.
El pontífice, de 88 años, “tiene la intención de asomarse en el Hospital Agostino Gemelli de Roma para saludar y bendecir al final del Ángelus de mañana, que se pronunciará por escrito como en semanas anteriores”, anunció la sala de prensa del Vaticano.

Se trata de la primera aparición pública del papa desde que el pasado 14 de febrero ingresara en el Gemelli, donde se recupera lenta y gradualmente de sus problemas respiratorios que le provocaron varias crisis de gravedad, aunque su situación se ha estabilizado y ha mejorado en las últimas semanas.
El pasado 6 de marzo el papa envió un mensaje de audio, en español y con una voz muy fatigada, durante el Rosario por su restablecimiento que se reza cada noche en la plaza de San Pedro y el pasado domingo el Vaticano publicó la primera foto del pontífice en el Gemelli.
Las especulaciones sobre la aparición mañana del papa surgieron en las últimas horas, después de que este viernes se viera a algunos técnicos tomar medidas de la ventana del apartamento del décimo piso del hospital en el que se encuentra ingresado el papa.
Este sábado, Francisco agradeció “el apoyo” de la “cercanía” de los fieles con sus “oraciones”.
“En estos días he sentido tanto el apoyo de esta cercanía vuestra, especialmente a través de las oraciones con las que me habéis acompañado”, señala el pontífice en un mensaje fechado en el día de hoy desde el hospital con motivo de la peregrinación jubilar de la archidiócesis de Nápoles (sur de Italia).
“Por eso, aunque no pueda estar físicamente presente entre vosotros, os expreso mi gran alegría al saberos unidos a mí y entre vosotros en el Señor Jesús, como Iglesia”, añade en el texto pronunciado por el cardenal Domenico Battaglia, arzobispo de Nápoles, en la misa celebrada en la Plaza de San Pedro bajo una fuerte lluvia.

El papa, que alaba la “unidad” que suponen las peregrinaciones jubilares diocesanas, termina con una frase habitual en sus intervenciones: “Rezo por vosotros. Y os encomiendo: también vosotros seguid rezando por mí”.
Las condiciones de Francisco, hospitalizado desde el pasado 14 de febrero, “siguen estables” y con “algunas pequeñas mejorías”, indicaron este viernes fuentes vaticanas, que explicaron que sigue con su tratamiento farmacológico, además de la fisioterapia respiratoria y motora.
También confirmaron que se ha suspendido la ventilación mecánica no invasiva, la máscara de oxígeno que utilizaba por las noches, mientras que el oxígeno de alto flujo con cánulas nasales durante el día también se está reduciendo de forma gradual.
(Con información de EFE)