
Los choferes de la ciudad de El Alto, en Bolivia, iniciaron este miércoles un paro de transporte en reclamo por el irregular abastecimiento de combustible, el mal estado de algunas carreteras y el incremento en el precio de los repuestos y otros accesorios para sus vehículos. En una reunión nacional realizada el lunes en la ciudad de Sucre, los dirigentes exigieron la destitución de tres funcionarios y dieron al Gobierno un plazo de 72 horas para atender sus demandas.
Los primeros puntos de bloqueo iniciaron a las cuatro de la mañana en zonas transitadas de la ciudad y en carreteras que conectan con otras poblaciones. Los dirigentes anunciaron que instalarán 40 piquetes.
Según los afiliados al sector del transporte, el desabastecimiento de combustible les genera pérdidas económicas porque se ven obligados a frenar sus operaciones por esperar varias horas en las estaciones de servicio. Lucio Gómez, ejecutivo de la Confederación de Choferes de Bolivia, indicó en conferencia de prensa que solo el 25% de las unidades de transporte está operando y que el resto está haciendo fila en los distribuidores.
La medida de presión en El Alto se había previsto inicialmente para el lunes pero fue postergada hasta este miércoles. Entre tanto, el Gobierno intentó frenar la movilización con el compromiso de aumentar la dotación de combustible al 100% para el departamento de La Paz.

“Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos informa a la opinión pública que, a partir de ahora iniciará el 100% de despacho de combustible destinado a La Paz, El Alto y provincias desde la planta de Senkata, en este sentido el personal se encuentra trabajando a doble turno las 24 horas para abastecer la demanda de combustible”, señala un comunicado.
De igual forma, el Ministerio de Obras Públicas convocó a los dirigentes a una mesa de diálogo pero la invitación aún no fue considerada. La medida se declaró “indefinida” hasta que se resuelva la dotación de carburantes y se atiendan sus demandas.
Bolivia atraviesa desde hace más de un año periodos de desabastecimiento de combustible debido a la baja producción local y la dependencia de las importaciones. En las últimas semanas se agudizó la escasez y el Gobierno admitió que no se puede cubrir la demanda por una iliquidez “transitoria” de dólares. Según fuentes oficiales la dotación llegó a cubrir solo el 50% de la demanda pero se aceleraron los despachos para llegar esta semana al 80% a nivel nacional.
Los transportistas responsabilizan al presidente de la estatal petrolera, Armin Dorgathen, por la mala gestión en la importación de carburantes y al viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, y el presidente de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Marcel Claure, por el mal estado de las carreteras y el incremento en el costo de los repuestos, por lo que exigen al Gobierno su relevo.

Crece el malestar y surgen más protestas
Los dirigentes del transporte de Santa Cruz también anunciaron un paro de transporte si no se atiende el listado de demandas sindicales en esta semana.
De igual forma, el Comité Cívico de Santa Cruz de la Sierra anunció una marcha el 24 de marzo para exigir soluciones ante la crisis económica y la escasez de combustible. “El país colapsó y necesitamos respuestas inmediatas, necesitamos soluciones inmediatas”, manifestó en el canal Unitel, el presidente cívico Stello Cochamanidis. “Si el Gobierno no tiene la capacidad para resolver el problema, que deje que lo resuelva quienes saben hacerlo”, agregó.