Crisis energética en Cuba: la mitad de la isla sufrirá apagones en el horario de mayor consumo este sábado

Expertos independientes explican que la situación se debe a una infrafinanciación crónica de este sector, completamente en manos del régimen cubano

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Personas caminando por un sector
Personas caminando por un sector sin servicio eléctrico en La Habana, Cuba (EFE/ Ernesto Mastrascusa)

La afectación por apagones durante el horario de mayor consumo en la tarde-noche alcanzará el 50% de Cuba, según las previsiones emitidas este sábado por la empresa estatal Unión Eléctrica (UNE).

Cuba registró la semana pasada la mayor tasa de déficit en lo que va de 2025 y en al menos los últimos dos años con el 57% del país a oscuras a la misma vez, por lo que el régimen de Miguel Díaz-Canel ordenó suspender las clases y las actividades laborales por dos días.

El año pasado se registraron cortes en más de la mitad del territorio cubano acompañado por tres apagones nacionales de varios días consecutivos.

La UNE, adscrita al Ministerio de Energía y Minas, calcula para esta jornada una capacidad máxima de generación eléctrica de 1.603 megavatios (MW) en el horario “pico”, en la tarde-noche, para una demanda que prevé que alcance los 3.090 MW.

El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 1.487 MW y la afectación real -los circuitos que se desconectarán preventivamente para evitar un apagón desordenado- alcanzará los 1.557 MW en el momento de mayor consumo.

La UNE informó sobre averías y mantenimientos en nueve de las 20 unidades de producción termoeléctrica (distribuidas en siete centrales). Además, 72 centrales de generación distribuida y una central flotante (patana) están fuera de servicio por falta de combustible (fueloil y diésel).

Un hombre cocina una sopa
Un hombre cocina una sopa en un fuego en la acera, durante un apagón en La Habana, Cuba. (AP Foto/Ramón Espinosa)

Las principales causas de los frecuentes apagones son las averías habituales en las obsoletas centrales termoeléctricas terrestres y la falta de combustible, según el régimen cubano.

Expertos independientes explican que la crisis energética se debe a una infrafinanciación crónica de este sector, completamente en manos del Estado cubano desde el triunfo de la revolución en 1959.

Las centrales termoeléctricas están obsoletas, tras décadas de explotación y déficit de inversiones; y la paralización de otras infraestructuras está ligada a la falta de fueloil y diésel, porque el Estado no tiene divisa para importarlos.

Según diversos cálculos independientes, el régimen cubano precisaría entre 8.000 y 10.000 millones de dólares para reflotar el Sistema Eléctrico Nacional, una inversión fuera de su alcance. Y cualquier solución sería posible tan sólo a largo plazo.

Los frecuentes apagones lastran la economía cubana, que se contrajo un 1,9 % en 2023 y no creció el año pasado, según estimaciones del propio régimen. De acuerdo a esas cifras, el PIB de la isla sigue por debajo de los niveles de 2019 y no lo superará este 2025, para el que el Ejecutivo prevé un avance del 1 %.

(Con información de EFE)

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