Se reabre la discusión sobre el derecho a sufragio de los extranjeros residentes en el Chile. Ello, puesto que el Gobierno de Gabriel Boric presentó indicaciones que buscan restringir su voto solo a los mayores de 18 años que vivan en el país al menos desde hace cinco años, sin haber sido condenados a pena aflictiva alguna y específicamente para las elecciones municipales y plebiscitos comunales, sin posibilidad de votar en las presidenciales que se vienen en noviembre próximo.
Además, deberán acreditarse ante el Servicio Electoral (Servel) con su respectivo certificado de antecedentes emitido en su país de origen.
La iniciativa promete un debate intenso, pues según el diputado Rubén Oyarzo (independiente), “la democracia y el voto deben ser siempre cuidados y protegidos. Por esta razón es que, como coautor del proyecto de ley que establece límites y condiciones para el ejercicio del voto a extranjeros, es que al regreso del receso legislativo (marzo) pondré en tabla como prioritario en la Comisión de Gobierno Interior”, consignó Emol.
El también presidente de la comisión de Gobierno Interior de la Cámara sostuvo que, al igual que países como Japón, Nueva Zelanda y varios europeos, “debemos terminar con cualquier distorsión a nuestro sistema electoral, y en particular a esta extraña política que permite a millones de personas, sin mayor arraigo e incluso muchas veces sin mayor contribución al país, a participar de procesos electorales e incluso definir autoridades”.
En esa misma línea, la diputada Camila Musante (Independiente/Partido por la Democracia) apuntó que “en Chile, el derecho al voto tiene que ir de la mano con el arraigo y con el compromiso que existe con nuestro país. A mí me parece absolutamente razonable que extranjeros que han vivido más de cinco años en Chile puedan participar y puedan votar en las elecciones municipales y comunales, porque finalmente son parte de una comunidad y contribuyen a su desarrollo” dijo al medio citado.
Sin embargo, “cuando hablamos de las elecciones nacionales, esta es una decisión soberana que corresponde exclusivamente a los ciudadanos chilenos. Solo ellos debiesen poder ejercer el derecho al voto”, razonó.
“No hay que caer acá en discursos ni extremos, ni populistas, ni una permisividad total, ni una exclusión arbitraria. Este es el equilibrio que va a poder fortalecer nuestra democracia y va a poder permitir ejercer correctamente el derecho al voto a nuestros ciudadanos chilenos, así también como a los extranjeros”, cerró.
Cálculo electoral
Distinta opinión tuvo el diputado Juan Manuel Fuenzalida (Unión Democrática Independiente), quien retrucó que “está claro que este Gobierno, que en su programa establecía una migración abierta, hoy día está operando con la calculadora electoral en la mano, porque sabe que la gran mayoría de quienes llegan a Chile son proclives a lo que son las ideas de centro derecha y derecha (...) Ahora, si van a hacer una reforma, yo también les pediría, y nosotros vamos a presentar alguna indicación que haya relación con aquellos chilenos que viven en el extranjero y que nunca han pisado territorio chileno, porque yo creo que aquí hay que ser justo para ambos lados”.
Palabras que fueron refrendados por su par republicano, José Carlos Meza, quien indicó que “nuevamente improvisan en materia electoral, y presenta cambios a la ley de última hora, probablemente con la calculadora en la mano. Desde Republicanos vamos a defender siempre el voto universal, secreto, libre e informado, y así como los chilenos avencindados en el extranjero pueden votar, creemos que los extranjeros que entraron por la puerta, de manera legal, llevan un tiempo razonable en el país y son un verdadero aporte a la sociedad, también deben tener el derecho de votar”.