Aunque durante la campaña electoral las diferencias entre los partidos políticos se acentúan, a la hora de la confirmación de los cargos parecen reducirse. Al menos esas son las señales que está dando en Uruguay la administración electa de Yamandú Orsi, que por estos días confirma los funcionarios que integrarán cada uno de los ministerios. En Economía y en Interior –la cartera a cargo de la seguridad–, el gobierno entrante ha dado señales de continuidad.
Este martes el futuro ministro de Economía, Gabriel Oddone, presentó a quienes lo acompañarán en el ministerio y hay algunos funcionarios clave que se mantienen de la gestión de Luis Lacalle Pou. Uno de ellos es el responsable de la Unidad de Gestión de Deuda –a cargo de las emisiones de los bonos uruguayos–, Herman Kamill, y otro es el director de la Asesoría de Política Comercial, Juan Labraga.
En una rueda de prensa este martes, Oddone también confirmó que el gobierno electo continuará utilizando la regla fiscal, el instrumento de control de gasto creado durante la gestión de Luis Lacalle Pou y que fue una medida cuestionada por la izquierda.
Se trata de un instrumento “que tiene por finalidad contribuir a la sostenibilidad de las finanzas públicas”, dice la definición oficial. Está compuesta por tres pilares que deben ser cumplidos, aunque la gestión actual no logró dos de los tres objetivos trazados. “La regla debe ser clara, transparente y debe presentar cierta flexibilidad para responder ante eventos extraordinarios”, agrega la definición.
“Va a ser mejorada”, dijo Oddone al ser consultado por la regla fiscal en una conferencia de prensa este martes. “Tiene problemas”, cuestionó, y habló de las “enormes oportunidades de ser mejorada” que tiene.
Oddone ha cuestionado el déficit fiscal que heredará de parte de este gobierno y, señaló, la regla fiscal no supo evitar ese “desvío”. “No fue suficiente para contener algunas de las patologías que existen en Uruguay en el manejo presupuestal. Esto quiere decir que la regla es buena pero que tiene que ser mejorada y eso es lo que vamos a hacer, tanto en materia legislativa como en materia de gestión”, declaró ante los medios.
Esta definición del gobierno electo pueden resultar sorpresivas en parte de la izquierda uruguaya. El instrumento se creó en la Ley de Urgente Consideración (LUC), uno de los buques insignias del presidente Lacalle Pou en el primer año de gestión. Sin embargo, se trató de una norma que el Frente Amplio y el movimiento sindical pretendió que sea derogada. La izquierda promovió en 2021 una juntada de firmas para hacer caer parte de la ley y, entre los artículos que estaban incluidos para eliminar, estaba el que crea la regla fiscal.
En la conferencia de este martes, el futuro ministro dijo que la “estabilidad fiscal” del país es clave para su “estabilidad macroeconómica”. El gobierno “tiene que tener una enorme responsabilidad en materia fiscal”, declaró Oddone, y aseguró que lograrlo “es una prioridad” de su gestión para transmitirle a los mercados y a los agentes económicos.
Oddone dijo que el futuro gobierno apostará “al crecimiento” para “fortalecer los espacios de recaudación”. Y, consultado por el presupuesto que reclaman los ministerios, aseguró que se requerirá “imaginación y responsabilidad” en su armado. La clave, insistió, es que la situación fiscal sea “sostenible a largo plazo”.
El próximo gobierno deberá llevar adelante una “consolidación fiscal”. “Es parte del desafío que tiene la política macroeconómica. No tenemos una urgencia extraordinaria en hacerlo porque los mercados hoy no están presionando sobre Uruguay pero tenemos que hacer una consolidación fiscal durante este período de gobierno”, aseguró.
Después de la primera reunión de transición, el equipo económico de Oddone también se comprometió a “mantener la baja inflación” que se logró durante la gestión de Luis Lacalle Pou.