
La congresista ultraconservadora Elise Stefanik ha anunciado este sábado que no se presentará a la reelección para revalidar su escaño, así como la suspensión de su candidatura a la Gobernación de Nueva York, para dedicar tiempo a su familia, en el final de una aventura política que comenzó a principios del mes pasado en un intento de contrarrestar el efecto de la victoria del socialdemócrata Mamdani en las elecciones a la Alcaldía de la ciudad.
"Mientras pasaba un tiempo precioso con mi familia esta navidad, he decidido suspender mi campaña para gobernadora y no buscaré la reelección al Congreso. No he tomado esta decisión a la ligera", ha manifestado Stefanik.
La congresista, que comenzó su carrera política como republicana moderada, se ha aproximado tanto al presidente Donald Trump que el mandatario llegó a nominarla a la Embajada de EEUU ante Naciones Unidas aunque luego tuvo que rectificar al tener en cuenta el impacto que representaría su baja en la escasa minoría de la que disfruta el Partido Republicano en el Congreso de EEUU.
Stefanik, curtida de unos meses a esta parte denunciando la presunta "ola de antisemitismo" que, según el movimiento MAGA, domina las universidades norteamericanas, se apea de las elecciones después de que Bruce Blakeman, también republicano y aliado de Trump, anunciara su intención de presentarse a las elecciones a la Gobernación.
Vista la situación, Stefanik ha decidido que "no sería un uso eficaz de nuestro tiempo ni de los generosos recursos dedicar la primera mitad del próximo año a unas primarias republicanas innecesarias y prolongadas, especialmente en un estado tan complejo como Nueva York", ha hecho saber en su comunicado de despedida, publicado en X.
"Creo que ser madre es el mayor regalo y la mayor responsabilidad de la vida. He reflexionado profundamente sobre esto y sé que, como madre, me arrepentiré profundamente si no me concentro más en la seguridad, el crecimiento y la felicidad de mi hijo pequeño, especialmente a su tierna edad", ha añadido.
Entre las primeras reacciones de la Casa Blanca ha destacado la de la secretaria de Prensa Karoline Leavitt, quien ha aplaudido la decisión de quien fuera en su día su superior. "Elise Stefanik ha sido una increíble defensora de la gente de su distrito en el norte del estado de Nueva York y siempre será una verdadera amiga del presidente Trump", ha manifestado Leavitt. "Es mi exjefa. Es una gran líder y aún mejor persona", ha concluido en un mensaje publicado en X.
A pesar del tradicional dominio del Partido Demócrata en un estado sin gobernador republicano desde 2002, la actual ocupante del cargo, Kathy Hochul, exhibió cierta debilidad en las elecciones de hace tres años cuando derrotó solo por seis puntos de ventaja al republicano Lee Zeldin en las elecciones estatales más ajustadas de los últimos 20 años.
Además, Hochul, considerada un bastión del ala moderada del Partido Demócrata, deberá ganar antes unas elecciones primarias precisamente contra su adjunto, Antonio Delgado, en medio de un enorme deterioro de sus relaciones durante los últimos años.


