
La implementación de un calendario cuatrienal en la Copa Africana de Naciones busca, según la Confederación Africana de Fútbol (CAF), equiparar las grandes competencias del continente con los estándares internacionales y a la vez responder a las necesidades de las ligas nacionales y de los clubes europeos. Tal como informó la CAF en sus canales oficiales, este cambio entrará en vigor a partir de 2028, y representa una modificación trascendental en el desarrollo del fútbol africano, históricamente ligado a un modelo de torneo bienal desde hace décadas.
De acuerdo con la información institucional publicada por la CAF, la Copa Africana de Naciones, cuya edición de 2027 tendrá lugar en Kenia, Uganda y Tanzania, celebrará ese año su última versión bajo la periodicidad de dos años. A partir de la siguiente edición, el certamen de selecciones africanas adoptará el formato que emplean competencias como la Copa Mundial y la Eurocopa, en una medida presentada como parte de una serie de reformas estructurales que buscan fortalecer el papel del continente en la escena futbolística global.
La CAF enfatizó en sus comunicados oficiales que la reprogramación ha estado fuertemente influenciada por peticiones reiteradas de clubes europeos, quienes han manifestado preocupación por las ausencias de futbolistas africanos durante momentos clave de sus propias ligas. Según detalló el organismo, la coincidencia temporal entre la Copa Africana de Naciones y fases determinantes de los torneos domésticos de Europa complicaba los planes de los equipos y afectaba su rendimiento, además de generar un impacto en la planificación y seguimiento del calendario internacional.
El organismo rector del fútbol africano también sostuvo que esta reforma busca solucionar dificultades tradicionales asociadas a las particulares condiciones climáticas que presenta el continente. Tal como consignó la CAF en sus informes, la opción de disputar la Copa Africana de Naciones durante el verano boreal fue descartada debido a que la diversidad meteorológica en África puede afectar la salud y el desempeño de los jugadores, según la región donde se celebre el torneo. Las consideraciones climáticas jugaron un papel determinante en la resolución final, junto con la armonización del calendario internacional.
Durante el anuncio del paquete de reformas, Patrice Motsepe, presidente de la CAF, indicó que un sistema de competencia cuatrienal permitirá a las ligas nacionales disponer de sus principales jugadores durante más tiempo, reducir el número de convocatorias internacionales y facilitar la planificación estratégica de los clubes. De acuerdo con declaraciones oficiales recogidas por la CAF, esta reestructuración se dirige a garantizar una mejor organización y anticipación en la programación de los campeonatos domésticos y continentales.
La modificación de la frecuencia del torneo no es la única medida incluida en el proyecto de la CAF. Según publicó el medio institucional del organismo, el lanzamiento de la Liga Africana de Naciones en 2029 marcará el inicio de una nueva era para las selecciones africanas. Esta competición, que involucrará a las 54 federaciones nacionales de África, se desarrollará entre septiembre y octubre, y concluirá con una final en noviembre. El formato y aspectos logísticos continúan en fase de evaluación, según adelantó la CAF, aunque la intención es rotar sedes entre diferentes países para fomentar la inclusión y ampliar la competitividad regional.
El diseño de la Liga Africana de Naciones busca ofrecer mayor visibilidad a selecciones que habitualmente no avanzan a fases decisivas de otros certámenes, e incentivar la integración regional por medio de la alternancia entre equipos participantes en cada edición. La CAF explicó que este enfoque permitirá fortalecer el tejido futbolístico del continente al tiempo que incrementa la exposición mediática y la capacidad organizativa de las federaciones nacionales.
En la opinión de la CAF, la adecuación de los torneos africanos a la agenda internacional mejorará la proyección global de las selecciones, impulsando oportunidades competitivas y estimulando el desarrollo del fútbol en África. El organismo recalcó que la previsibilidad aportada por el nuevo calendario facilitará la regulación de recursos y permitirá una mayor estabilidad y regularidad en la organización de eventos deportivos, lo que redundará en beneficios tangibles para clubes, jugadores, federaciones y demás actores involucrados.
La CAF remarcó que todo el proceso de reestructuración se mantendrá bajo observación hasta la entrada en vigor de las nuevas disposiciones en 2028, con el objetivo de preservar la adaptabilidad del sistema ante los retos propios de la diversidad africana. Según concluyó la cadena institucional de la Confederación Africana de Fútbol, el paquete de cambios refuerza la integración del continente en la dinámica global del fútbol, sin perder de vista las singularidades culturales, climáticas y organizativas de África, y marca un nuevo capítulo en la evolución del fútbol de selecciones y ligas nacionales del continente.


