
La reciente sucesión de acciones armadas en Siria ha mantenido en alerta a las fuerzas de seguridad, luego de que la semana anterior cuatro agentes perdieran la vida durante un ataque de milicianos yihadistas en la provincia de Idlib, según publicó el Ministerio del Interior sirio a través de un comunicado. En respuesta, los organismos de seguridad intensificaron sus operativos en distintas regiones del país, lo que desembocó en la localización y desbaratamiento de un escondite del autodenominado Estado Islámico en la capital, Damasco, donde se logró la detención de varios sospechosos. Así lo informó el medio Europa Press.
Tal como detalló Europa Press, la incursión de este jueves se dio en el barrio de Dumar. El director de Seguridad Interna de la provincia de Damasco, Osama Muhamad Jair Atika, indicó que el objetivo central de esta acción fue un refugio empleado por miembros de Estado Islámico. La operación, calificada como “precisa” por fuentes oficiales, concluyó con la captura de varios individuos señalados como integrantes de la organización, además de la incautación de artefactos explosivos listos para ser usados, armamento diverso, municiones, drones de ataque y materiales explosivos.
El Ministerio del Interior de Siria difundió el balance y los pormenores de la operación en su canal oficial de Telegram, especificando que los detenidos ya se encuentran bajo custodia y han sido puestos a disposición de la autoridad judicial correspondiente. Según consignó Europa Press, los funcionarios insisten en que estas intervenciones forman parte de medidas orientadas a combatir y frustrar posibles ataques de grupos radicales en suelo sirio.
Las declaraciones oficiales enfatizaron la cooperación internacional que respalda estos procedimientos. Según el comunicado reproducido por Europa Press, el funcionario Atika aseguró que la misión refuerza la capacidad de los servicios de seguridad sirios para contener amenazas vinculadas al terrorismo y garantizar la protección de la ciudadanía. En sus palabras: “Esta operación confirma la capacidad de los servicios de seguridad a la hora de hacer frente a las amenazas terroristas y proteger la seguridad y estabilidad de la patria y sus ciudadanos”.
Desde la instauración del nuevo gobierno en Siria tras la caída del régimen de Bashar al Assad en diciembre de 2024, las autoridades interinas adoptaron una postura más activa en la lucha contra facciones extremistas. El medio Europa Press señaló que Ahmed al Shara, líder de la transición y antiguo dirigente de Hayat Tahrir al Sham (HTS), formalizó la adhesión del país a la coalición internacional liderada por Estados Unidos contra Estado Islámico. Esta decisión se concretó en noviembre, después de un encuentro entre el presidente de transición sirio y el mandatario estadounidense Donald Trump.
Las redadas en Damasco se suman a otra operación ejecutada el martes pasado, también anunciada por las autoridades, en la que se “desmanteló” una célula de Estado Islámico en el noroeste del país. Europa Press resaltó que estas acciones se suceden en el marco de múltiples ofensivas para desarticular estructuras del grupo extremista y anticiparse a sus ataques.
De acuerdo con los reportes oficiales recogidos por Europa Press, no se han comunicado bajas entre las fuerzas de seguridad en la intervención del barrio de Dumar. Por el momento, los agentes mantienen un despliegue especial en diversos puntos de la capital y otras zonas consideradas vulnerables, como parte del refuerzo de seguridad dictado tras las agresiones recientes.
La nueva dinámica de cooperación internacional permite un intercambio más fluido de información de inteligencia y recursos logísticos, aspectos en los que han insistido los portavoces sirios en cada uno de sus comunicados tras los últimos operativos. Estas medidas buscan proyectar estabilidad interna y reducir la amenaza de futuras incursiones terroristas en Siria.


