El 62,6% de los españoles padece sequedad ocular moderada o grave

Casi siete de cada diez jóvenes presentan síntomas como irritación o visión borrosa por uso intensivo de pantallas, según Visión y Vida, que alerta sobre la normalización de estas molestias y la falta de diagnóstico adecuado

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El porcentaje de jóvenes que reporta sequedad ocular en España se acerca al 69,4 por ciento, una proporción prácticamente igual a la presentada en la población mayor de 65 años, según el análisis de la Asociación Visión y Vida difundido este miércoles. El informe, realizado en colaboración con el Fórum de Contactología y Correos Express, destaca que la sequedad ocular, cuyos síntomas incluyen irritación y visión borrosa, afecta en general al 62,6 por ciento de la población española, como señaló el medio Visión y Vida.

El estudio, detallado por la coordinadora de la asociación, Elisenda Ibáñez, durante una rueda de prensa virtual y recogido por Visión y Vida, relaciona el incremento de los síntomas de sequedad ocular con la intensificación del uso de dispositivos digitales. Ibáñez subrayó que el grupo joven muestra cifras iguales o superiores a las de los rangos de mayor edad, lo que asoció al uso intensivo de pantallas y a los hábitos digitales actuales. Los resultados se obtuvieron a partir de respuestas de 1.437 personas al cuestionario OSDI, una herramienta empleada para el diagnóstico y seguimiento de síntomas asociados a la sequedad ocular, y muestran que solo el 37,3 por ciento de los encuestados no presenta molestias significativas atribuibles a esta condición.

La media nacional de síntomas de sequedad ocular se sitúa en 30,1 puntos de acuerdo con el OSDI, mientras que la media entre los jóvenes alcanza 35,1 y supera los 34,9 observados en mayores de 65 años. El 44 por ciento de los participantes indicó presentar sensibilidad frecuente a la luz; de este grupo, un 7,1 por ciento la experimenta constantemente, un 10,8 por ciento casi todo el tiempo y un 26,1 por ciento en aproximadamente la mitad de las ocasiones. Otros signos habituales informados incluyen sensación de arenilla en los ojos para el 34 por ciento, visión borrosa para el 33,7 por ciento y dolor ocular en el 24,3 por ciento de los casos analizados.

De acuerdo con el medio Visión y Vida, estas molestias se asocian principalmente a factores ambientales como la exposición al viento, señalada en el 42,2 por ciento de los casos; el aire acondicionado, mencionado por el 41,3 por ciento; y la baja humedad en el 37 por ciento de los participantes. Ibáñez explicó que la sequedad ocular ambiental o adquirida adquiere mayor relevancia frente a la patológica y que aparece a edades cada vez más tempranas, en un contexto de vida cotidiana marcado por el entorno digital.

Tanto Ibáñez como Salvador Alsina, presidente de Visión y Vida, advirtieron durante la conferencia que existe una tendencia a normalizar síntomas como irritación, escozor, sensación de arenilla, visión borrosa y fotofobia. Según Alsina, estos signos frecuentemente se atribuyen al cansancio o al estrés y no a una condición médica, lo que dificulta el diagnóstico y retrasa el tratamiento. Alsina también señaló que la prevalencia de este problema se relaciona directamente con la reducción del parpadeo –de hasta un 50 por ciento– durante el uso de pantallas, junto con una mayor exposición de la superficie ocular al dirigir la mirada ligeramente hacia arriba en este tipo de dispositivos.

El informe añade que los espacios cerrados, la baja humedad ambiental y los sistemas de climatización o calefacción incrementan el riesgo de sequedad ocular. Según lo reportado por Visión y Vida, se calcula que la población pasa hasta el 80 por ciento de su tiempo en entornos interiores, lo que contribuye a una fatiga visual acumulada que afecta la renovación de la película lagrimal, imprescindible para la protección y lubricación del ojo. Entre quienes usan lentes de contacto, los síntomas de sequedad constituyen la principal causa de abandono de este tipo de corrección visual, por lo que la asociación recomienda acudir a revisión óptica ante la aparición de síntomas y realizar un cribaje previo en casa mediante cuestionarios como el OSDI.

Según consignó Visión y Vida, el documento resalta la utilidad de lágrimas artificiales y la educación visual relacionada con el uso de pantallas para mitigar los efectos de la sequedad ocular. Entre las recomendaciones, se encuentra aplicar la regla de descanso "20-20-20", que consiste en pausar cada 20 minutos de actividad frente a una pantalla para enfocar la vista durante al menos 20 segundos en un objeto ubicado a 6 metros de distancia (equivalente a 20 pies), así como mejorar las condiciones de humedad ambiental y mantener una correcta ergonomía visual.

La investigación también detalla variaciones regionales y demográficas. Andalucía registra la mayor prevalencia de sequedad ocular moderada o grave con un 69,3 por ciento, seguida por la Comunidad Valenciana (68 por ciento) y la Comunidad de Madrid (67,8 por ciento), mientras que Cataluña presenta la cifra más baja con un 54,4 por ciento. Por sexo, las mujeres reportan una prevalencia de molestias derivadas por sequedad ocular 5,7 puntos porcentuales superior a la de los hombres: 66,4 por ciento frente al 53,3 por ciento, respectivamente.

Visión y Vida, en conjunto con el Fórum de Contactología y Correos Express, recalca la importancia de no trivializar los síntomas asociados a la sequedad ocular y de promover prácticas de prevención y revisión periódica para evitar la evolución de complicaciones visuales relacionadas con esta afección.