Entre los aspectos destacados del reciente preacuerdo entre las autoridades sanitarias y los sindicatos del sector se encuentra la introducción de la jornada laboral ordinaria de 35 horas semanales, una medida que dependerá de lo que se acuerde en cada ámbito de negociación según las necesidades de los servicios de salud. Esta resolución forma parte de un conjunto de modificaciones que buscan responder a demandas históricas de los profesionales sanitarios, al tiempo que marca el inicio de un proceso más amplio de reforma, según informó el Ministerio de Sanidad.
El preacuerdo, alcanzado entre el Ministerio de Sanidad y las organizaciones sindicales del Ámbito de Negociación, incorpora la posibilidad de jubilación parcial para el personal estatutario del sistema sanitario y prevé la opción de jubilación anticipada para determinadas categorías profesionales, siempre que se cumplan los requisitos legales y se analicen las condiciones laborales en el conjunto del Sistema Nacional de Salud, tal como comunicó el Ministerio de Sanidad. Esta decisión, de acuerdo con Sanidad, derivó también en la suspensión de las huelgas que los sindicatos tenían programadas para enero. Según detalló el Ministerio, la interrupción de los paros permite que avance de manera estable la tramitación del nuevo marco laboral para el personal del Sistema Nacional de Salud.
El respaldo al borrador del nuevo Estatuto Marco por parte de los sindicatos SATSE-FSES, FSS-CCOO, UGT, CSIF y CIG-Saúde se materializó incluso después de que comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular solicitaran su retirada durante el último Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, publicó el Ministerio de Sanidad. La suspensión de las movilizaciones representa, según el organismo, un factor que facilita el proceso legislativo en marcha y beneficia la continuidad de los servicios asistenciales para la población.
Respecto a la jubilación parcial y anticipada, el acuerdo establece que todo el personal estatutario sanitario podrá acogerse a la primera modalidad si cumple con los criterios vigentes de la Seguridad Social. Además, algunas categorías tendrán acceso a una jubilación anticipada, aunque esta posibilidad dependerá del resultado de un análisis específico sobre las condiciones laborales dentro del sistema sanitario, consignó el Ministerio de Sanidad.
Las cuestiones que exceden la competencia directa del Ministerio de Sanidad y, por este motivo, no se incluyen de inmediato en la reforma del Estatuto Marco, se abordarán en un acuerdo específico entre las partes. Dicha vía servirá de punto de partida para futuras negociaciones que apunten a la creación de un modelo retributivo unificado para todo el personal del Sistema Nacional de Salud, informó el Ministerio. Con ello, se busca orientar la actualización tanto de los salarios como de las condiciones laborales de los trabajadores del sector público de salud.
El Ministerio de Sanidad ha subrayado cómo valora el preacuerdo resultado del diálogo social con las organizaciones sindicales, al calificar este entendimiento como un paso esencial hacia el fortalecimiento del sistema de salud público y la mejora de las condiciones laborales del personal. Fuentes del Ministerio expresaron la predisposición de la administración para continuar colaborando tanto con los sindicatos como con los gobiernos regionales hasta completar una reforma que consideran crucial para el futuro del sistema sanitario.
Organizaciones sindicales participantes en el proceso negociador han confirmado, en declaraciones recogidas por el Ministerio, los términos del preacuerdo y su voluntad de continuar las conversaciones para lograr un acuerdo final antes del 23 de diciembre, fecha contenida en el cronograma de los trabajos conjuntos. De acuerdo con Sanidad, este esquema de negociación permite que la adaptación de las condiciones laborales avance gradualmente y abre la puerta a reformas estructurales dentro del sector asistencial público.
El contexto de este preacuerdo ha estado marcado por crecientes demandas de profesionales del sistema público para mejorar sus condiciones y adaptar la normativa laboral a las realidades asistenciales y demográficas actuales. Tal como ha reflejado el Ministerio, el consenso con los sindicatos posibilita que la elaboración normativa transcurra sin la tensión asociada a movilizaciones y huelgas, lo que contribuye a mantener la normalidad en la prestación de los servicios a los ciudadanos.
Este marco de entendimiento entre autoridades y sindicatos se plasma en una hoja de ruta compartida para culminar la reforma del Estatuto Marco y renovar el conjunto de los marcos laborales y retributivos del personal sanitario, según reportó el Ministerio de Sanidad. El acuerdo alcanzado persigue la consolidación de principios de flexibilidad, equidad y actualización en las condiciones laborales de uno de los sectores clave del sistema público español.
