
Philippe Lazzarini, comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), alertó que las familias desplazadas en la Franja de Gaza enfrentan un riesgo extremo por el frío y las lluvias, agravado por la falta de refugio. Las recientes tormentas han causado el colapso de viviendas improvisadas, exponiendo a la población a temperaturas bajas y poniendo en peligro la vida de más de un millón de personas que requieren albergue urgente. Según detalló la agencia EFE, Lazzarini hizo pública esta advertencia a través de su perfil oficial en la red social X, precisando que muchas personas "se están muriendo de frío" por efecto del temporal Byron.
El representante de Naciones Unidas subrayó que la severidad del temporal, unido a las precarias condiciones en que se encuentra la población desplazada a causa de la ofensiva israelí, ha hecho que las ruinas donde encuentran refugio provisional ya no sean seguras ni impermeables. Lazzarini afirmó que las estructuras inundadas no pueden proteger de las inclemencias, lo que incrementa la exposición de los habitantes al frío. El comisionado hizo un llamamiento directo para que se permita la entrada inmediata y sin restricciones de ayuda humanitaria a gran escala, alertando sobre el grave peligro que enfrentan las familias que han perdido sus hogares y que dependen de la asistencia internacional para sobrevivir.
Según informó la agencia EFE, los trabajadores humanitarios se encuentran limitados por las restricciones que afectan el ingreso de tiendas de campaña y otros materiales necesarios para la protección de los desplazados. La UNRWA mantiene cargamentos humanitarios retenidos en espera de autorización para acceder a Gaza desde hace meses, lo que retrasa la distribución oportuna de suministros vitales, incluidos refugios provisionales.
Por otro lado, Olga Cherevko, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) en Gaza, admitió que la demanda de ayuda sobrepasa ampliamente la capacidad de respuesta y entrega de suministros en la zona. Cherevko detalló, según consignó la agencia EFE, que los materiales de construcción y de reparación de sistemas de infraestructura están lejos de cubrir las necesidades, ya que la destrucción masiva ha dejado a la población sin la protección básica frente a las adversidades del clima.
La portavoz manifestó que, a pesar de los esfuerzos, las rutas de entrada de ayuda siguen siendo limitadas, con pocos cruces abiertos que permitan la llegada regular de suministros. Cherevko señaló la importancia de que se habiliten más pasos fronterizos y que funcionen de forma constante para acelerar el proceso de asistencia, ya que "hemos solicitado constantemente que se abran cruces adicionales y que operen de forma sistemática y fiable".
De acuerdo con la información ofrecida por la agencia EFE, la situación humanitaria en la Franja de Gaza se ha vuelto más compleja a raíz de las continuas tormentas. Cherevko indicó que alrededor de 1,3 millones de personas necesitan refugio, muchas de ellas totalmente desprovistas tras los daños provocados por las lluvias. La OCHA ha concentrado sus esfuerzos en el apoyo invernal y, en solo tres o cuatro días, la oficina distribuyó unas 3.800 tiendas de campaña y más de 4.500 lonas, así como miles de artículos de cama, asistencia que logró alcanzar a unas 4.800 familias durante ese periodo.
A pesar de la entrega diaria de ayuda, la representante advirtió que la situación sigue siendo sumamente difícil, con un aumento de los riesgos de hipotermia entre la población más vulnerable. Según la agencia EFE, Cherevko reiteró que los obstáculos existentes impiden una respuesta más ágil y eficaz, aunque “tenemos la capacidad”, recalcando que el ritmo de llegada de la ayuda queda por debajo del ritmo al que aumentan las necesidades sobre el terreno.
Las organizaciones internacionales, según reportó la agencia EFE, han solicitado insistentemente la eliminación de los obstáculos logísticos y administrativos que dificultan la respuesta humanitaria. Tanto la UNRWA como la OCHA insisten en que solo la apertura y funcionamiento sostenido de los cruces fronterizos permitirá que la ayuda alcance a la totalidad de las familias afectadas por el intenso frío y las inundaciones. Lazzarini concluyó su intervención apelando a que se priorice el acceso de suministros esenciales para mitigar el riesgo extremo al que se enfrentan millones de personas en la Franja de Gaza.


