
La presencia de psicólogos de guardia del 112 en el lugar puso de manifiesto la gravedad del accidente que involucró a una niña de siete años, su madre y su abuela en Coll d'en Rabassa, Palma. Según informó la Policía Local de Palma a varios medios, el domingo a las 12:09 horas, un vehículo perdió el control e impactó contra la acera en la calle Bailén, en la intersección con la calle de Can Caimari, frente a una carnicería y el campo de fútbol de la zona. El impacto provocó la muerte de la menor, mientras la madre sufrió heridas graves y la abuela heridas menores.
El conductor del automóvil implicado, un hombre de unos 50 años, viajaba acompañado de su esposa y sus dos hijos en el momento del accidente. Ninguno de ellos resultó lesionado, según detalló la Policía Local, que se hizo cargo de la investigación del suceso. De acuerdo con la información proporcionada por las autoridades y consignada por diversos medios, el automóvil terminó sobre la acera tras perder el control por causas que se investigan, embistiendo a la niña y a sus familiares, quienes transitaban por ese sector.
Los servicios de emergencia, incluyendo unidades del SAMU 061, se desplazaron rápidamente al lugar. Los sanitarios atendieron a las tres víctimas: la menor falleció a consecuencia del atropello, mientras que la madre debió ser trasladada en estado grave, y la abuela recibió atención médica por lesiones de menor entidad. Además, las dos adultas requirieron apoyo psicológico inmediato debido al shock emocional sufrido por el fatal desenlace, como reportó la Policía Local de Palma en su comunicación a la prensa.
El suceso movilizó también a efectivos de la Policía Nacional, quienes colaboraron con el aseguramiento de la zona y la asistencia a los servicios sanitarios y especialistas en atención psicológica. La investigación abierta busca determinar las circunstancias exactas por las que el vehículo terminó subido en la acera y arrolló a la niña y sus familiares, sin que se hayan comunicado por el momento posibles causas específicas como el exceso de velocidad, fallos mecánicos o distracción del conductor.
Según lo publicado por distintas fuentes y ratificado por la Policía Local, los cuatro ocupantes del vehículo involucrado, a pesar del fuerte impacto y las consecuencias mortales, salieron ilesos y no requirieron atención médica. Los investigadores recabaron testimonios de testigos que se encontraban en la zona próxima a la carnicería y el campo de fútbol en Coll d'en Rabassa, lugares habituales de afluencia vecinal.
El accidente generó conmoción entre los residentes del barrio, quienes vieron interrumpida la normalidad dominical por el despliegue de vehículos policiales y ambulancias, así como la labor de los equipos sanitarios y los psicólogos de guardia. Tal como comunicó la Policía Local, se continúan reuniendo datos para esclarecer la dinámica del accidente y establecer las responsabilidades pertinentes.
Hasta el momento, las autoridades no han difundido información sobre la posible imputación de cargos al conductor, ni sobre resultados preliminares de la investigación técnica del vehículo. Las fuentes consultadas insisten en que todas las hipótesis siguen abiertas mientras se llevan a cabo las diligencias correspondientes.
La noticia, difundida por distintos medios y confirmada por la Policía Local de Palma, mantiene la atención sobre la seguridad en las vías urbanas y el impacto que un accidente de estas características causa en el entorno inmediato y entre los familiares de las víctimas. El despliegue rápido de servicios médicos y psicológicos remarca la gravedad del incidente y las consecuencias traumáticas que enfrentan quienes sobreviven a este tipo de atropellos.


