
Según reportó Radio Biobío, la presidenta del Servicio Electoral de Chile (SERVEL), Pamela Figueroa Rubio, elogió el compromiso demostrado por los vocales de mesa, cuya activa participación voluntaria fue determinante para el buen funcionamiento del balotaje presidencial. Esta valoración del trabajo desplegado por quienes colaboran directamente en los centros de votación ilustró el clima democrático que caracterizó la elección, donde los incidentes e irregularidades quedaron ausentes según la información oficial.
Los centros de votación en Chile cerraron sus puertas a las 18:00 horas de este domingo, horario local, cumpliendo con el calendario electoral marcado para la segunda vuelta presidencial. Según detalló Radio Biobío, la jornada concluyó sin reportes de alteraciones del orden ni de situaciones anómalas en los recintos, mientras se esperaba la publicación de los resultados oficiales que definen al próximo presidente del país.
El proceso electoral se desarrolló en un contexto de polarización política: José Antonio Kast, representante de la extrema derecha, y Jeannette Jara, figura del oficialismo, se disputaron la presidencia en una contienda marcada por propuestas y respaldos ideológicamente opuestos. De acuerdo con los datos de la primera vuelta celebrada el 16 de noviembre, Radio Biobío consignó que Jara, con 51 años y candidata de las fuerzas de izquierda, emergió como la aspirante más votada con el 26,9 por ciento de las preferencias. Por su parte, Kast alcanzó el 23,93 por ciento de los votos y recibió el respaldo explícito de los otros tres candidatos de derecha, lo que planteó un nuevo escenario competitivo de cara al balotaje.
La organización logística de la jornada fue destacada por las autoridades. Según informó Radio Biobío, Figueroa Rubio precisó que antes de las 10:00 horas de la mañana ya se había instalado el 99 por ciento de las mesas de votación a nivel nacional, y poco después se completó el 100 por ciento. El desarrollo ágil y el acceso expedito de los electores a las urnas representaron una diferencia apreciable respecto de la primera vuelta, en la que se observaron retrasos y menor eficiencia.
Las declaraciones de la presidenta del SERVEL transmitidas por Radio Biobío dieron cuenta de una votación caracterizada por la fluidez del flujo de votantes y la rapidez en la emisión del sufragio, contrastando con anteriores jornadas. Figueroa Rubio agradeció tanto la labor de los vocales de mesa como el compromiso cívico mostrado por los ciudadanos, insistiendo en el carácter democrático e institucional del evento electoral.
De acuerdo con lo difundido por Radio Biobío, el proceso se mantuvo libre de incidentes de seguridad relevantes, y la jornada electoral fue descrita por fuentes oficiales como tranquila y ordenada. Este desempeño fue interpretado como una reafirmación de la capacidad del país para organizar elecciones sin mayores complicaciones, especialmente en términos de operatividad y participación en las labores logísticas.
Los datos oficiales sobre resultados aún no se conocen. Según publicó Radio Biobío, las autoridades no han divulgado hasta el momento los cómputos de la votación y tampoco han circulado datos de encuestas a pie de urna, por lo que la expectativa en torno al desenlace presidencial se mantiene viva en Chile hasta que el SERVEL emita el primer parte definitivo.
Durante la cobertura, medios como Radio Biobío recogieron el ambiente de calma dentro y fuera de los recintos electorales y transmitieron las palabras de los responsables institucionales sobre la importancia de la preparación anticipada y la coordinación de los equipos de trabajo. Estos elementos, según las declaraciones de Figueroa Rubio, fueron evidentes tanto en la apertura casi universal y anticipada de las mesas como en el desarrollo de toda la jornada.
Mientras el escrutinio sigue pendiente, persiste la incertidumbre sobre quién será proclamado como próximo jefe del ejecutivo chileno, a la espera de los resultados oficiales de este balotaje cuya ejecución, según Radio Biobío y las autoridades del SERVEL, cumplió con los estándares previstos de transparencia y normalidad en el proceso democrático del país.

