Sofía, 12 dic (EFE).- El Parlamento de Bulgaria aprobó este viernes de forma unánime la dimisión del Gobierno del conservador Rosen Zhelyazkov, presentada un día antes tras una ola de protestas contra la corrupción, lo que abre la puerta a las octavas elecciones generales desde 2021.
Los 227 diputados presentes votaron a favor de la salida del Ejecutivo tripartito —formado por el conservador GERB, el Partido Socialista Búlgaro y el populista ITN—, que llevaba 11 meses en el poder y gobernaba en minoría gracias al apoyo de DPS-Nuevo Comienzo, una formación liderada por el oligarca Delyan Peevski, sancionado por Estados Unidos y el Reino Unido por corrupción.
La caída del Gobierno se produjo después de que cientos de miles de manifestantes exigieran su dimisión en una serie de protestas que empezaron a finales de noviembre.
La protesta, inicialmente centrada en el proyecto de presupuesto para 2026 -que contemplaba subidas fiscales y ajustes en el gasto social-, derivó en un rechazo a Peevski, a quien parte de la ciudadanía acusa de influir en el Ejecutivo, el sistema judicial y los servicios de seguridad.
También afloró el descontento hacia el líder de GERB y ex primer ministro Boyko Borisov, que gobernó en tres ocasiones entre 2009 y 2020, así como el malestar por la inflación, la pérdida de poder adquisitivo y el temor a que la introducción del euro en enero agrave aún más ese problema.
Con la dimisión ya formalizada, la Constitución obliga al presidente, Rumen Radev, a iniciar consultas con los partidos y ofrecer tres mandatos para intentar formar Gobierno, comenzando por GERB, la fuerza más votada.
Sin embargo, Borisov anunció que no intentará buscar ningún apoyo y, en un Parlamento altamente fragmentado, ninguno de los otros seis partidos parece en condiciones de encontrar una mayoría.
Si los tres intentos fracasan, el presidente deberá nombrar un Ejecutivo interino y convocar elecciones anticipadas, que serían las octavas desde 2021.
Borisov, ausente en el hemiciclo durante la votación -al igual que Peevski-, adelantó además que GERB no impulsará el proyecto de presupuesto para 2026.
Esto supone que Bulgaria entraría en la eurozona el próximo 1 de enero sin un nuevo presupuesto, lo que obliga a prorrogar el de 2025 hasta que se apruebe uno.
El presidente puede elegir entre una lista de diez altos cargos para designar al próximo primer ministro interino y, según la prensa búlgara, la jefa del Parlamento, Raya Nazaryan, una figura destacada de GERB, es la favorita para asumir el cargo.
La fecha más probable para unas elecciones es marzo, según los plazos legales. EFE
