Mientras más de la mitad de quienes se sumaron como voluntarios tras la emergencia provocada por la dana en Valencia lo hicieron en las dos primeras semanas posteriores al suceso, la investigación más reciente del Observatorio del Voluntariado resalta la respuesta organizada frente a crisis y perfila a la ciudadanía española comprometida con causas solidarias en 2025.
Según publicó el Observatorio del Voluntariado, el 10,5% de la población en España mayor de 14 años ha participado en acciones de voluntariado durante el presente año. Este dato corresponde a más de 4.400.000 personas voluntarias en todo el país y representa una estabilización en la tendencia al alza que la Plataforma del Voluntariado de España (PVE) viene registrando durante la última década. El estudio recopila datos obtenidos mediante 1.203 entrevistas a personas mayores de 14 años residentes en España, con la mitad de los cuestionarios realizados vía online a través de un panel y la otra mitad por teléfono asistido por ordenador. El trabajo de campo se llevó a cabo durante junio de 2025 y la publicación coincide con el Día Internacional del Voluntariado, celebrado cada 5 de noviembre.
El análisis del perfil sociodemográfico exhibe una predominancia femenina en las labores solidarias: el 58,4% de quienes ejercen voluntariado son mujeres. Tal como reportó la PVE, la mayoría de estas voluntarias reside en grandes ciudades con más de 200.000 habitantes, cuentan con empleo, presentan ingresos elevados y ostentan entre cinco y diez años de experiencia en el voluntariado. El Observatorio del Voluntariado subraya que la feminización de la actividad es especialmente notoria en sectores relacionados con los cuidados, como el voluntariado social, ambiental y socio-sanitario.
La distribución por ámbitos revela que el 56,7% de los voluntarios se orientan hacia actividades solidarias de tipo social. El voluntariado socio-sanitario representa el 12,2%, mientras que el cultural asciende al 11,5%. Según detalló el informe de la PVE, los hombres tienden a integrar en mayor proporción iniciativas asociadas a cooperación internacional, proyectos de desarrollo, así como actividades culturales y deportivas, lo que diferencia su patrón de implicación respecto a la presencia femenina en tareas de atención y apoyo directo.
Uno de los capítulos destacados del informe corresponde al voluntariado ante situaciones de emergencia. El estudio pone de manifiesto el impacto de la dana que afectó Valencia en 2024, mostrando que el 7,4% de la población nacional participó activamente en tareas solidarias vinculadas a esta emergencia, tales como limpieza de calles, distribución de alimentos y retirada de enseres. El Observatorio del Voluntariado indica además que el 51,8% de las personas en España realizó alguna acción solidaria durante el episodio, lo que incluyó tanto donaciones de bienes (30,9%) como contribuciones económicas (21%).
La mayor parte de la ayuda durante este tipo de crisis se canalizó a través de entidades sociales, reflejo de una preferencia por la coordinación institucional antes que la acción aislada. Según consignó el Observatorio, quienes ya estaban integrados en tareas de voluntariado previamente mantuvieron mayor constancia y compromiso tras la emergencia, mientras que los incorporados en respuesta al evento se integraron principalmente de forma temporal. Posteriormente, un 35,2% de quienes participaron en acciones solidarias motivadas por la emergencia en Valencia prolongaron su colaboración con alguna entidad, lo que, según el reporte de la PVE, sugiere que participar en voluntariado ante crisis puede contribuir a consolidar un vínculo duradero con iniciativas de apoyo social.
En el panorama general, el informe de la Plataforma del Voluntariado de España ofrece una radiografía de la composición y evolución del voluntariado en el país, resaltando las diferencias de implicación por género, contexto y áreas de actividad. Los resultados del estudio reflejan un componente sostenido de compromiso ciudadano y un patrón sociodemográfico que conserva su tendencia de feminización y concentración en ámbitos urbanos y profesionales con estabilidad económica. Además, la publicación del Observatorio del Voluntariado señala cómo la actuación solidaria ante emergencias puede convertirse en una puerta de entrada hacia un voluntariado más estable y prolongado, al tiempo que apuntala la relevancia de las organizaciones como cauce principal para canalizar la ayuda.
