La Armada de la Guardia Revolucionaria lanza misiles balísticos y de crucero durante sus maniobras cerca de Ormuz

La flota militar iraní llevó a cabo una demostración de armamento avanzado con lanzamientos de misiles y uso de tecnología de guerra electrónica, como parte de operaciones destinadas a enviar advertencias ante la intensificación de la presencia extranjera en la zona

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La segunda jornada de ejercicios militares en el golfo Pérsico, coordinada por la Armada de la Guardia Revolucionaria de Irán, se caracterizó por la integración de drones avanzados y simulaciones de ataques sobre infraestructuras consideradas hostiles, según informó Press TV. La operación tuvo como eje central no solo la movilización de unidades navales, sino también el despliegue de tecnología de guerra electrónica diseñada para responder a potenciales agresiones de tipo electrónico. Este despliegue se produjo en un contexto de creciente vigilancia internacional sobre la zona y como parte de una estrategia oficial orientada a enviar señales de advertencia ante la presencia de fuerzas extranjeras, particularmente estadounidenses, en el estrecho de Ormuz, un corredor marítimo de alto impacto en el comercio global.

De acuerdo con Press TV, durante estas maniobras la fuerza militar iraní realizó lanzamientos programados de misiles balísticos y de crucero, entre ellos los modelos ‘Qadr 110’ y ‘Qadr 380’, dirigidos hacia objetivos situados en el mar de Omán. Press TV detalló que los misiles alcanzaron sus objetivos con precisión, lo cual fue presentado como muestra de la capacidad de respuesta y de disuasión que busca mantener Irán frente al incremento de la actividad militar internacional cerca de sus fronteras marítimas. El medio destacó la ejecución de estos ejercicios como parte de una política permanente de exhibición de poderío y tecnología militar moderna, en un momento geopolítico en que la región ha visto un incremento de enfrentamientos armados y operativos de distinta índole.

Según consignó Press TV, la estrategia detrás de estas prácticas militares responde al incremento de tensiones motivadas por incidentes violentos ocurridos más de cinco meses atrás. En ese momento, sostuvo el medio, ataques imputados a Israel dentro de Irán y bombardeos posteriores de Estados Unidos sobre instalaciones nucleares iraníes propiciaron un aumento de la hostilidad regional y llevaron a una fase de mayor enfrentamiento e incertidumbre en la zona. La Armada de la Guardia Revolucionaria, a través de mensajes oficiales citados por Press TV, enfatizó que las operaciones no constituyen solo una señal de advertencia ante la actividad de la Marina estadounidense, sino que también intentan fijar a Irán como un actor central en la seguridad marítima del corredor estratégico.

El comunicado de la Guardia Revolucionaria, publicado por Press TV, afirmó que “las maniobras militares no solo cumplen una función disuasoria ante actores externos, sino que también buscan consolidar la percepción de Irán como un garante de la seguridad dentro de sus fronteras y como un factor estabilizador ante amenazas”. La televisión estatal detalló, además, que la preparación de la flota y la calibración simultánea de sistemas tecnológicos durante los ejercicios obedece a la necesidad de estar listos para responder ante una gama de posibles escenarios: desde incursiones por parte de potencias extranjeras, hasta ataques electrónicos y operaciones militares prolongadas.

Según lo publicado por Press TV, estas prácticas navales incluyen tecnología de guerra electrónica de desarrollo local, desplegada específicamente para neutralizar intentos de sabotaje digital o intervención remota. El uso de vehículos aéreos no tripulados, junto con los sistemas de misiles presentados, consolida la capacidad del ejército iraní para diversificar sus respuestas ante amenazas convencionales e híbridas, especialmente en un entorno de confrontación creciente con actores externos. El medio reportó que la flota militar buscó, la vez, demostrar tanto la eficacia como la adaptabilidad del equipamiento, en línea con una doctrina de defensa proactiva.

El medio iraní indicó que analistas internacionales y observadores independientes han dirigido su atención hacia estas maniobras, debido a que el estrecho de Ormuz constituye una vía esencial para el tránsito de petróleo y mercancías estratégicas. La seguridad en este punto, destacó Press TV, se mantiene como foco tanto para el gobierno de Irán como para naciones cuyas economías dependen del flujo constante del comercio energético. La interrupción de esta ruta marítima podría impactar directamente en los precios y el abastecimiento internacional de combustibles, e introduce una variable de inestabilidad en la economía global.

Press TV aclaró que la Secretaría de la Armada subrayó el carácter dual del mensaje que acompaña los ejercicios navales. Por un lado, apuntan a disuadir intervenciones extranjeras y acciones hostiles, al advertir sobre la capacidad de reacción ante cualquier provocación. Por otro, comunican una “disposición pacífica hacia los países vecinos”, enfatizando la intención de sostener vías de convivencia regional y evitar una escalada que derive en enfrentamientos directos. La dualidad reflejada en este enfoque responde, según el medio, al interés iraní en mantener la estabilidad en el golfo Pérsico mientras se refuerza la percepción de fortaleza nacional.

El seguimiento de los ejercicios incluyó una vigilancia reforzada, tanto a nivel regional como internacional. Press TV enfatizó que distintos actores monitorearon las maniobras con la expectativa de identificar cualquier movimiento que pudiese implicar un aumento de las hostilidades o alterar el normal desarrollo de las rutas comerciales globales. El análisis internacional consideró la posibilidad de que una intensificación en los ejercicios o una reacción desproporcionada de alguna de las partes contribuya a modificar el equilibrio de seguridad vigente en la región.

La política iraní en materia de defensa, referida por Press TV, combina actos de disuasión basados en “demostraciones visibles de fuerza y operatividad” con la propuesta de cooperación hacia quienes mantengan posturas de no intervención en los asuntos de Oriente Próximo. Esto incorpora el empleo de tecnología moderna, grandes despliegues coordinados entre distintas ramas de las fuerzas armadas y una comunicación explícita de advertencias junto a mensajes diplomáticos dirigidos a países vecinos y adversarios.

Press TV reseñó que, desde el punto de vista militar, la inclusión de sistemas de guerra electrónica y pruebas con drones tiene como objetivo ampliar el espectro de recursos ante posibles enfrentamientos de tipo híbrido. La capacidad para detectar y neutralizar ataques no convencionales se reconoce como un elemento central de la doctrina de defensa, en la medida que amenazas tanto convencionales como asimétricas se vuelven más frecuentes en el escenario geopolítico de la región.

El desarrollo de los ejercicios contó con etapas destinadas a perfeccionar la logística operativa, la coordinación entre diferentes ramas de las fuerzas armadas y el uso combinado de misiles, drones y sistemas electrónicos. Tal como subraya Press TV, la Armada de la Guardia Revolucionaria ha enfatizado el carácter de sacrificio nacional de estas prácticas y la intención de mantener la vigilancia sobre el entorno marítimo, reforzando así una cultura de respuesta ante eventos imprevistos.

El mensaje final divulgado por la organización militar y recogido por Press TV remarca la disposición de Irán para adaptarse a fluctuaciones en el contexto del golfo Pérsico y el estrecho de Ormuz, argumento que sostiene la política nacional de defensa activa y de comunicación estratégica orientada a fortalecer la reputación del país como garante de la seguridad para sí y para la región en su conjunto.