
En las zonas de Sibolga y Tapanuli Centro, donde la dificultad de acceso agrava la catástrofe, el Gobierno de Indonesia ha establecido como prioridad la llegada de asistencia humanitaria tras las devastadoras inundaciones provocadas por el ciclón 'Senyar'. El presidente Prabowo Subianto manifestó que se han enviado grandes buques y un avión Hércules para transportar recursos hacia las regiones más afectadas, dado que el tráfico por carretera permanece cortado en extensas áreas del norte de Sumatra. Según publicó la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres (BNPB) y recogió el medio que ha seguido el suceso, la emergencia ha generado 755 muertes y ha dejado 647 personas desaparecidas, cifras sujetas a revisión debido al continuo avance de las operaciones de rescate en condiciones adversas.
Las autoridades indonesias informaron que cerca de 3,3 millones de personas han resultado damnificadas por el paso del ciclón 'Senyar', mientras casi 1,1 millones han debido abandonar sus hogares para refugiarse en albergues temporales, de acuerdo con los últimos datos difundidos por la BNPB. Entre los desplazados, la provincia de Aceh representa una proporción cercana a la mitad del total nacional. El balance oficial también señala más de 2.600 personas lesionadas por causa de las inundaciones y los deslizamientos.
El impacto de las lluvias intensas y el desbordamiento de varios ríos ha afectado gravemente la infraestructura residencial y pública, en especial en el norte de Sumatra. En Sumatra Septentrional, el número de damnificados se eleva a al menos 538.000 personas, mientras en Sumatra Occidental se contabilizan cerca de 100.000, según consignó la BNPB y documentó el medio citado. Las provincias de Aceh, Sumatra Septentrional y Sumatra Occidental encabezan la lista de las regiones más golpeadas por la emergencia.
En términos de daños materiales, el organismo nacional reportó 3.600 viviendas completamente destruidas, otras 2.100 con daños intermedios y unas 3.700 afectadas de forma menor. Las brigadas de emergencia que operan en la zona, integradas por el Ejército indonesio, equipos de voluntarios y personal especializado, enfrentan obstáculos logísticos derivados del colapso de caminos y puentes esenciales para el traslado de ayuda y la ejecución de rescates.
El presidente Subianto afirmó que los buques ya pueden arribar al puerto de Sibolga y enfatizó la utilización de aviones Hércules para abastecer los puntos de mayor necesidad, destacando la relevancia estratégica de las ciudades portuarias y aeródromos regionales. En sus palabras: “Creo que los buques grandes pueden ya atracar en Sibolga. También vamos a desplegar un avión Hércules, con posibles aterrizajes en varios puntos cada día”, recogió el medio que sigue la situación de emergencia.
Tal como detalla la BNPB, la simultaneidad del ciclón 'Senyar' con el inicio de la temporada de lluvias mantiene en alerta a otras regiones ante la posibilidad de nuevos fenómenos meteorológicos de magnitud similar. El monitoreo de los ríos y sistemas de alerta temprana se ha intensificado en distintas provincias, mientras persiste el temor a nuevos desbordamientos y deslizamientos que puedan incrementar el saldo de afectados.
El acceso limitado a servicios esenciales constituye uno de los problemas más severos para las personas evacuadas y refugiadas en escuelas, edificios gubernamentales y carpas improvisadas. Según reportó la BNPB y reiteró el medio citado, miles de damnificados se encuentran en condiciones precarias a la espera de alimentos, medicamentos y el restablecimiento parcial de servicios sanitarios básicos. La incertidumbre sobre la localización de los desaparecidos y las dificultades logísticas para el despliegue de ayuda mantienen alta la presión sobre los equipos de emergencia.
Testimonios recogidos entre personal y rescatistas sobre el terreno revelan la urgencia en la distribución de artículos de primera necesidad y la preocupación ante el riesgo de que los recuentos de víctimas sigan en aumento, dadas las limitaciones de acceso y las condiciones meteorológicas desfavorables. En diversas áreas, las carreteras permanecen cerradas o apenas transitables, lo que ha llevado a las autoridades indonesias a coordinar el suministro a través de rutas marítimas y aéreas, consignó el medio que publicó la información.
Los trabajos de limpieza, despeje de escombros y restitución paulatina de infraestructuras involucradas, como el restablecimiento parcial de carreteras y servicios básicos, avanzan con la colaboración de efectivos militares, equipos de rescate y voluntarios, según detalló la BNPB. Los equipos se mantienen vigilantes ante la posibilidad de nuevas lluvias que compliquen las operaciones y agraven las condiciones en los campamentos provisorios.
El Gobierno indonesio realizó un llamado a la colaboración tanto local como internacional para enfrentar la vasta emergencia. La coordinación entre diversas instituciones y organismos humanitarios busca atender las necesidades más urgentes vinculadas a los desplazados, la búsqueda y rescate de personas y el reparto de ayuda, según la información difundida por la BNPB y recogida por el medio que documenta la crisis.
El informe oficial también señala la preocupación por la tensión generada en los servicios de emergencia y la urgencia de actuar ante las condiciones de vulnerabilidad de numerosas comunidades. Las autoridades reiteran la importancia de acatar los llamados de evacuación en zonas de riesgo, ya que las lluvias intensas persisten y pueden causar nuevos daños. La capacidad de respuesta del país y la cooperación institucional se han visto exigidas ante la escala del desastre causado por el ciclón 'Senyar', un hecho que ha captado la atención de la comunidad internacional y que mantiene en alerta a la población de Indonesia, según publicó la BNPB y difundió el medio que sigue de cerca la evolución de los acontecimientos.

