La decisión de Gloria Camila de no trasladar a José Ortega Cano las polémicas surgidas en los medios ni los comentarios que circulan sobre su familia subrayó su interés por mantener al exmatador de toros alejado de los conflictos y preservar su estabilidad personal. Tal como indicó Europa Press, este planteamiento cobró mayor visibilidad tras conocerse el fallo judicial que reconoció la vulneración de la privacidad de Rocío Flores por parte de los productores de la docuserie “Rocío, contar la verdad para seguir viva”, al publicar detalles privados ocurridos durante su infancia.
De acuerdo con Europa Press, la sentencia brindó protección a Rocío Flores frente a la divulgación de información sensible, destacando la importancia de los límites legales ante el interés mediático. Gloria Camila, hija de Ortega Cano, compartió públicamente su satisfacción por el resultado judicial, que consideró un acto de justicia ante situaciones en que los productores anteriormente quedaban “limpios y sin importar el daño que se hiciese por el camino”, según sus palabras recogidas por Europa Press. El medio detalló que Gloria Camila respaldó abiertamente la victoria de su sobrina y valoró la protección de datos personales en casos que involucran a menores.
El entorno familiar, lejos de calmarse, volvió a ubicarse en el centro de la atención pública, como contó Europa Press, cuando Gloria Camila y Rocío Flores celebraron el fallo judicial en Jerez durante las tradicionales zambombas. Este gesto público contrastó con las prolongadas tensiones familiares, visibles en los medios a raíz de las declaraciones de Gloria Camila y de la reacción de Rocío Carrasco, quien fue directamente aludida en las respuestas de la hija de Ortega Cano. Gloria Camila expresó que no considera necesario participar en la controversia que, a su juicio, han alimentado algunas figuras de la familia buscando notoriedad, al afirmar: “Para mi hermana y para la audiencia que hicieron en su momento a base de hacer daño al resto. Entonces bueno, creo que esa es una cosa que existe y además el otro día vi un vídeo de mi hermana riéndose de mi padre, el semen de fuerza... pues mira, semen de fuerza”, según reportó Europa Press. Estas palabras reflejaron el tono directo asumido por Gloria Camila frente a las actitudes observadas en redes sociales.
Consultada por Europa Press respecto a la implicación de Ortega Cano en las polémicas, Gloria Camila remarcó que prefiere no compartirle estos asuntos por respeto y para salvaguardar su bienestar. La joven destacó que su padre ha escogido una postura de silencio desde hace tiempo, aun teniendo la posibilidad de hacer declaraciones públicas, gesto que considera clave para evitar que los conflictos familiares sigan creciendo en el espacio mediático. Este enfoque, según explicó, representa una forma de priorizar el equilibrio personal y la tranquilidad de los implicados ante el constante escrutinio que enfrentan.
Sobre las conexiones entre Ana María Aldón, exesposa de Ortega Cano, y Rocío Carrasco, Gloria Camila decidió no dar detalles directos. Europa Press relató que insinuó conocer aspectos de la relación pasada entre Carrasco y su padre, aunque subrayó que prefiere no compartir esa información, argumentando que “la memoria es muy corta según para qué y con qué. Creo que bastante favor les estoy haciendo en no entrar y en callarme. Sobre todo por respeto a los que quiero y para que no sea esto una guerra, porque nunca hemos participado de esto, no lo vamos a hacer ahora. Que a ellas les gusta, genial”. Esta declaración subrayó su elección de mantenerse al margen de una escalada de enfrentamientos, señalando la diferencia entre quienes deciden intervenir activamente y quienes optan por guardar silencio.
Europa Press remarcó el peso del apoyo de Gloria Camila hacia Rocío Flores dentro del contexto familiar, especialmente en torno a la cuestión de los límites en la publicación de información privada de menores de edad. El respaldo público adquirido tras la sentencia judicial estableció un punto de inflexión en la forma en que los miembros de la familia afrontan el escrutinio. El fallo favorable a Rocío Flores supuso un antecedente relevante respecto a la protección de la privacidad infantil ante el tratamiento mediático, y ayudó a redefinir los márgenes de lo que puede o no exponerse de la vida íntima de figuras mediáticas desde temprana edad.
El medio consignó que, pese a este cambio de escenario, las posturas dentro del clan Ortega-Mohedano permanecen distantes y marcadas por la divergencia entre quienes consideran legítimo intervenir en el debate público y quienes optan por la mesura. Las respuestas y actitudes que se han hecho públicas, ya sea a través de declaraciones o del silencio, continúan evidenciando la complejidad de las relaciones personales y el impacto del interés mediático en la gestión de la privacidad de la familia.
Según dio a conocer Europa Press, estas estrategias comunicativas revelan distintas visiones sobre cómo abordar la exposición pública y los enfrentamientos derivados, con repercusiones legales y emocionales. El caso, impulsado por la sentencia favorable a Rocío Flores, dejó al descubierto las fracturas internas de la familia y la relevancia de las decisiones individuales sobre qué aspectos comunicar y cómo enfrentar la presión mediática derivada de la notoriedad. La situación sigue generando expectativa y atención en la opinión pública, mientras los protagonistas continúan definiendo su papel dentro de la disputa mediática y jurídica.
