Ascienden a 132 los muertos por las inundaciones y fuertes lluvias en Sri Lanka

Crecen los estragos provocados por el ciclón Ditwah, que deja al menos 176 personas sin localizar y más de 373.000 desplazados, mientras continúan las labores de rescate en medio de un panorama de devastación y estado de emergencia

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Un destacamento de emergencia logró evacuar a decenas de personas que pasaron la noche en el techo de un autobús, después de que la crecida de un río impidiera un rescate seguro durante varias horas en el distrito de Badulla. Esta operación ilustra las dificultades que enfrenta Sri Lanka tras el paso del ciclón Ditwah, cuyas consecuencias han dejado a 132 personas fallecidas y otras 176 sin localizar, según informó el portal de noticias Adaderana.

El impacto del ciclón Ditwah afecta a más de 373.000 habitantes y cerca de 100.000 familias, quienes han visto sus viviendas y actividades económicas seriamente alteradas por las lluvias intensas y los vientos asociados al fenómeno meteorológico, detalló el Centro de Gestión de Desastres y recogió Adaderana. Las condiciones meteorológicas adversas provocaron inundaciones, deslizamientos de tierra, cortes de carreteras y el colapso del tráfico ferroviario, dificultades que han complicado la llegada de auxilio y la localización de desaparecidos en múltiples zonas del país.

La distribución geográfica de los efectos provocados por el ciclón muestra que el distrito de Kandy figura entre los más afectados, con 51 víctimas fatales y 67 personas cuya localización no ha sido confirmada, reportó Adaderana. Badulla notificó un saldo de 35 fallecidos y 27 desaparecidos. Otras zonas como Kegalle, Matale, Nuwara Eliya y Ampara también han sumado víctimas mortales, con cifras que ascienden a nueve, ocho, seis y cinco respectivamente, según publicó el medio local.

Las lluvias y los deslizamientos, junto con la caída de árboles, han dejado inutilizadas carreteras y vías férreas clave, imposibilitando el servicio de trenes principales durante la jornada del sábado y cortando el contacto con poblados afectados, según consignó Adaderana. Estos obstáculos han demorado la llegada de ayuda, el traslado de insumos y la movilización del personal sanitario, consideraciones que las autoridades evalúan de forma prioritaria en las labores actuales.

El Ministerio de Salud de Sri Lanka declaró la emergencia hospitalaria durante una semana para asegurar la atención de las personas heridas y de aquellas que requieren servicios médicos, debido al incremento en la demanda y la saturación de los hospitales, informó Adaderana. La medida estará vigente al menos hasta el 4 de diciembre y supone la movilización de recursos médicos y logísticos adicionales, así como la clasificación de las actividades relacionadas con la salud y el abastecimiento de bienes básicos como servicios esenciales.

La presidencia de Anura Kumara Dissanayake concentra los operativos de emergencia en la capital y otros puntos estratégicos. El presidente visitó las instalaciones del centro de operaciones del Ejército del Aire con el fin de supervisar directamente la coordinación de los equipos de rescate y las tareas logísticas, añadió Adaderana. El mandatario promulgó el Estado de Emergencia Pública mediante la Gaceta oficial, justificando la decisión como necesaria para salvaguardar la seguridad, la continuidad de los servicios básicos y la distribución de alimentos, agua y material de higiene en las zonas más castigadas.

Mientras el ciclón Ditwah se aleja hacia India, persisten las alertas sobre nuevas precipitaciones fuertes durante el fin de semana, lo que mantiene en estado de alerta a los equipos de emergencia y las autoridades, según el pronóstico meteorológico citado por Adaderana. Los riesgos de nuevos desbordamientos e incidentes asociados a la saturación de los suelos siguen presentes, por lo que se mantiene la vigilancia y la movilización de unidades de rescate en las regiones ya afectadas.

Las cifras oficiales distribuidas por el Centro de Gestión de Desastres, recogidas por Adaderana, evidencian la extensión de la crisis: al menos 132 personas han perdido la vida, 176 permanecen desaparecidas y cientos de miles han resultado desplazadas o damnificadas. Deslizamientos y crecientes súbitas destruyeron viviendas y medios de vida, forzando la instalación de refugios temporales y la priorización de la atención a comunidades incomunicadas.

En cuanto a las labores de socorro, los equipos mantienen como foco principal la búsqueda de desaparecidos y el apoyo a quienes han perdido sus hogares. Autoridades locales relataron a Adaderana que en el caso del autobús varado en Badulla, solo tras el descenso del nivel del agua pudo acometerse un rescate seguro, tras horas en las que los ocupantes permanecieron expuestos sobre el techo del vehículo.

El restablecimiento de los servicios ferroviarios y del transporte por carretera continúa siendo una prioridad, aunque el acceso a diversas áreas permanece imposibilitado. El gobierno refuerza la distribución de ayuda humanitaria, la entrega de agua potable y artículos indispensables, así como la atención sanitaria en emergencias, reportó Adaderana. Los refugios temporales y centros médicos siguen recibiendo asistencia mientras se mantenga la emergencia.

Las autoridades actualizan de manera permanente los balances de víctimas y afectados, a la vez que insisten en la continuidad de todas las acciones de socorro, localización y restablecimiento de servicios esenciales hasta que la situación regrese a condiciones operativas y de seguridad para la población, informó el medio ceilandés.