El Senado de México confirma la salida del fiscal general rumbo a la embajada de "un país amigo"

Alejandro Gertz Manero presentó su dimisión tras desacuerdos con la administración de Claudia Sheinbaum, dejando vacante el máximo cargo del Ministerio Público antes de tiempo, mientras se perfila como próximo representante diplomático en Europa, según fuentes oficiales

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Desde el círculo cercano a Alejandro Gertz Manero se filtró que el funcionario se refirió en su carta de dimisión a un “país amigo” como su próximo destino diplomático, una expresión que, según reportaron fuentes consultadas por varios medios, apunta hacia Alemania. Gertz Manero, de 86 años, deja el cargo de fiscal general de la República antes de concluir su mandato legal, tras un proceso de salida que sacudió a la cúpula judicial y política nacional. El Senado mexicano aprobó la renuncia en sesión nocturna, decisión respaldada por las bancadas identificadas con el Gobierno federal, mientras la oposición expresó su desacuerdo y puso en tela de juicio que el traslado del exfiscal a una misión exterior justificara la terminación anticipada de sus funciones, según consignó el medio El País.

El Senado de México convalidó oficialmente la dimisión, lo que deja vacante el máximo cargo dentro del Ministerio Público Federal a más de dos años de la fecha prevista para el fin del mandato de Gertz. De acuerdo con lo consignado por El País, la renuncia se emitió el jueves y fue considerada de inmediato por la Cámara Alta. La decisión se adoptó de manera expedita y responde a las fracturas internas que se acentuaron tras el cambio de administración presidencial, según informaron fuentes oficiales citadas por el diario.

Las causas principales detrás de la dimisión señalan un claro deterioro en la relación entre Gertz Manero y la presidenta Claudia Sheinbaum, recientemente investida. El País detalló que Gertz era una de las pocas figuras de alto rango que aún permanecían del gabinete de Andrés Manuel López Obrador y había contado con su respaldo para el ejercicio de la titularidad en la Fiscalía General. Rosa Icela Rodríguez, actual secretaria de Gobernación, figura junto a él entre los escasos funcionarios de continuidad entre ambos gobiernos.

La noche del jueves se formalizó la aprobación de la renuncia con el voto favorable de los senadores oficialistas. Mientras algunos legisladores opositores reclamaron transparencia y cuestionaron la suficiencia del argumento oficial expuesto en la carta de Gertz, surgieron interrogantes sobre la idoneidad de abandonar una responsabilidad de esa envergadura para aceptar un cargo diplomático. El propio Gertz, en su misiva, refirió que partiría como embajador a un país “amigo”, expresión que distintos reportes, recogidos por El País, interpretan como una alusión a Alemania. No se ha emitido hasta ahora una confirmación oficial de parte de la cancillería mexicana sobre el país de destino.

La salida de Gertz deja vacante la Fiscalía General, la cual será ocupada de forma interina por Ernestina Godoy. Según explicó El País, Godoy ha ocupado cargos relevantes en la gestión pública y se perfila como figura de transición hasta que el Senado acuerde el nombramiento definitivo del siguiente fiscal general. El procedimiento establecido en la legislación mexicana señala que la nueva persona titular del Ministerio Público federal deberá ser elegida tras un proceso de selección en el Senado con participación del Ejecutivo federal.

Durante los debates en el Senado, miembros de la oposición pusieron énfasis en la importancia institucional del cargo y manifestaron reservas respecto a una remoción que, según su perspectiva, no respondía a motivos graves de salud ni a impedimentos legales. El diario El País destacó que esta salida ocurre en un contexto de reacomodo político tras la elección presidencial que dio la victoria a Claudia Sheinbaum.

Alejandro Gertz Manero llegó a la titularidad de la Fiscalía General de la República tras la transición institucional que siguió a la extinción de la Procuraduría General, habiendo sido nominado y respaldado por el expresidente López Obrador. Su gestión estuvo marcada por investigaciones de alto perfil y por tensiones tanto con actores políticos como con la sociedad civil, de acuerdo con el repaso periodístico de El País.

La remoción anticipada del fiscal general abre interrogantes sobre la dirección futura de la Fiscalía y el vínculo entre los órganos autónomos y el Poder Ejecutivo. Mientras tanto, la figura de Gertz adquiere una nueva dimensión dentro del servicio exterior y sitúa la atención en el destino diplomático que, de acuerdo con informaciones preliminares, sería Alemania, aunque permanece pendiente la confirmación oficial.