
Al confirmar la Universidad Athenaeum que Ionut Mosteanu nunca figuró entre sus alumnos, la controversia centró la atención pública y oficial sobre los requisitos de transparencia en el acceso a cargos estatales en Rumanía, según detalló la información replicada por diversos medios. El escándalo llevó a que el viernes el ministro de Defensa, Ionut Mosteanu, presentara su dimisión cinco meses después de haber tomado posesión, cuando se hizo pública la falsificación de datos académicos en su currículum, hecho reportado por el medio Libertatea.
De acuerdo con lo publicado por Libertatea y recogido por otros medios internacionales, el caso se desencadenó luego de que este jueves el tabloide rumano difundiera un reportaje en el que se cuestionaban los estudios universitarios listados por Mosteanu. Según la investigación periodística, el ahora exministro había incluido en su currículum un título de la Universidad Athenaeum de Bucarest, un requisito indispensable tanto para ocupar funciones relevantes en el Ministerio de Defensa como para acceder al consejo de varias empresas públicas. La propia Universidad Athenaeum desmintió la existencia de registros de Mosteanu como alumno o graduado, hecho que llevó a eliminar ese título de su historial oficial tan pronto asumió su cargo ministerial.
Tras el estallido del caso, Mosteanu intentó justificar la aparición de dicho título en su curriculum mediante la publicación de una fotografía de otro diploma, emitido por la Universidad Bioterra, sosteniendo que todo se debía a un "error". Sin embargo, para entonces el impacto político y mediático ya había causado una fuerte presión sobre el Gobierno de Rumanía.
En una carta publicada desde su perfil personal en Facebook, Mosteanu expuso los motivos de su renuncia: “Rumanía y Europa están bajo ataque ruso. Nuestra seguridad nacional debe ser defendida a toda costa. No quiero discusiones sobre mi formación y los errores que cometí hace muchos años”. El exministro además agradeció a quienes colaboraron con él durante estos meses en el cargo y sostuvo que las prioridades del país requieren que los esfuerzos se centren en los retos por delante, sin distracciones provocadas por errores cometidos en el pasado.
Durante los cinco meses de su gestión al frente de la cartera de Defensa, Mosteanu hizo referencia a los esfuerzos realizados para dotar al ejército rumano de mejor equipamiento, aumentar la motivación interna y fortalecer los vínculos con aliados internacionales, así como mejorar las condiciones de los militares. Estas iniciativas se desarrollaron en un contexto regional marcado por tensiones geopolíticas incrementadas y elevados desafíos en materia de seguridad, tema que el propio Mosteanu subrayó en su mensaje de despedida, según consignó el medio Libertatea.
El primer ministro de Rumanía, Ilie Bolojan, reconoció públicamente la labor de Mosteanu durante esos meses en un comunicado y adelantó que solicitará al presidente Nicusor Dan el nombramiento temporal del ministro de Economía, Radu Miruta, al frente del Ministerio de Defensa de manera interina, según explicaron las autoridades rumanas reseñadas por la prensa local.
Varios medios apuntaron al diputado Alexandru Dimitriu, perteneciente a la Unión Salvar Rumanía (USR), como el candidato con mayores probabilidades para ocupar la titularidad definitiva del ministerio de Defensa. La crisis política abierta por la renuncia ahonda las preocupaciones del Gobierno en el contexto de las tensiones militares y diplomáticas actuales en la región, puesto que se requiere una designación ágil y legítima para mantener la continuidad en áreas estratégicas de la defensa nacional.
El tablado originado por la publicación de Libertatea puso nuevamente en cuestión los controles sobre la verificación de datos personales y profesionales en la selección de altos funcionarios públicos en el país, abriendo un debate respecto a la fiabilidad del sistema. Las repercusiones en la opinión pública y en el funcionamiento del Ejecutivo rumano continúan generando interés tanto en el plano nacional como europeo, a medida que el gobierno busca restablecer la normalidad institucional con un sucesor idóneo para el cargo.

