
Al salir de la iglesia de Santa Ana en Sevilla, tras despedirse afectuosamente de su sobrina Tana Rivera y de José Luis López 'El Turronero', Cayetano Rivera ofreció respuestas a las preguntas sobre su supuesto vínculo sentimental con la reportera Gema Camacho. De acuerdo con la información publicada por el medio, el torero restó importancia a las especulaciones con la siguiente declaración: “Todo muy bien. Si cada día me sacáis una ilusión... Hoy seguramente me sacaréis otra”, pronunciando sus palabras en tono de broma y mostrando distensión ante la prensa reunida en el lugar. La presencia de Cayetano en este acto familiar se produjo en un contexto marcado por la atención mediática, dado que en las últimas semanas había acaparado titulares tanto por su vida privada como por un accidente de tráfico reciente.
Según detalló el medio, Cayetano Rivera reapareció ante los medios en el bautizo de su sobrino Nicolás, tercer hijo de Francisco Rivera y Lourdes Montes. La ceremonia familiar, celebrada en la histórica iglesia sevillana, fue ocasión para que se reencontrara con parte de su familia y para exhibir una actitud cordial que, según publicó la fuente, desmontó los rumores de alejamiento entre los hermanos Rivera. Se señaló que, a pesar de los comentarios surgidos tras el accidente de tráfico que protagonizó semanas atrás, el exmatador de toros acudió a la celebración arropando a su hermano Francisco, ejerciendo así un papel visible en esta jornada.
El reportaje recordó que el 9 de noviembre pasado Cayetano Rivera sufrió un accidente de tráfico cuando ingresaba a la urbanización donde reside en Sevilla. De acuerdo con el relato de los hechos, su vehículo impactó contra una rotonda, provocando el derribo de dos palmeras y ocasionando daños materiales que dejaron su furgoneta en estado de siniestro total. El medio consignó que, tras este incidente, se espera la resolución de un proceso judicial ya que, según el atestado policial que recoge la fuente original, Cayetano se habría negado a realizar la prueba de alcoholemia solicitada tras el suceso.
El episodio incrementó el escrutinio mediático sobre Rivera, quien tradicionalmente ha preferido mantener su vida alejadas del foco de la prensa. Como resaltó el medio, el torero ha visto cómo su vida personal también ocupa espacio en la agenda informativa, en particular a raíz de filtraciones y testimonios que le asocian sentimentalmente con la reportera de Mediaset, Gemma Camacho. Esta última, ante la consulta de los periodistas, ofreció una respuesta abierta en la que confirmó que mantiene con Cayetano una relación de amistad y, añadiendo que ambos, como personas solteras y adultas, tienen libertad para compartir tiempo juntos. Tal como detalló la publicación, parte del origen de los rumores derivó de que ambos habrían compartido un viaje a Italia durante un fin de semana.
A lo largo del evento familiar, Cayetano Rivera mantuvo su habitual discreción sobre ciertos aspectos. Informó el medio que, al ser consultado sobre la ausencia de su hermano Kiko Rivera en la ceremonia, evitó referirse al asunto y se limitó a responder: “Sabéis que no hablo de estas cosas por favor”, negándose a alimentar más polémicas en torno a su entorno familiar.
El atuendo y la imagen de Cayetano durante la ceremonia también llamó la atención. Según consignó la fuente original, asistió con un traje gris, corbata de rayas, el cabello engominado hacia atrás y gafas de sol. Destacó, además, que llegó a la iglesia como último invitado y en un vehículo que él no conducía, contexto en el que se ha discutido la posibilidad de que pueda perder temporalmente su carnet de conducir como consecuencia del accidente mencionado.
El medio relató que, a su llegada al lugar, Cayetano se dirigió a los periodistas que le esperaban con ánimo jocoso y una frase irónica: “Yo que llegaba tarde pensando que no estaríais, fíjate...”, exhibiendo una actitud relajada, pese a las controversias recientes. Este comportamiento refuerza la imagen de gestión distendida de la presión mediática, un papel que resulta central para comprender la cobertura otorgada a sus últimas apariciones públicas.
Según publicó el medio, la reaparición pública de Cayetano Rivera en este contexto coincidió con diversas conjeturas sobre una supuesta distancia entre los hermanos, circunstancia que la propia actitud del torero se encargó de desmentir al participar activamente en el bautizo y mostrar apoyo a Francisco en un día relevante para la familia. Así, la jornada ofreció, según la crónica, un retrato actualizado del presente del diestro, inmerso en un escenario mediático donde cuestiones legales, familiares y personales tienden a entremezclarse en cada comparecencia pública.

