
La Guardia Costera de Turquía ha recuperado el cuerpo sin vida de una persona migrante durante las operaciones de búsqueda y rescate que está llevando a cabo frente a las costas de la provincia de Esmirna, después de que una embarcación solicitara ayuda por riesgo a naufragar.
Como resultado de las operaciones, otros 17 migrantes han sido rescatados con vida de la lancha, que estaba parcialmente sumergida, pero continúan trabajando para localizar a un migrante que se cree que está desaparecido, según reza un comunicado publicado en su página web.
A última hora de la noche del martes, la Guardia Costera turca desplegó un buque, cuatro lanchas y un helicóptero tras recibir un aviso de que una embarcación que transportaba a un grupo de personas migrantes "estaba en peligro de hundirse y solicitaba asistencia".
La ruta del mar Mediterráneo oriental es usada por migrantes para intentar llegar a costas europeas desde Turquía, a menudo tras llegar al país desde Oriente Próximo y Asia central, con más de 2.800 muertos y desaparecidos en la misma desde 2014. En lo que llevamos de año, esta ruta acumula 250 muertos y desaparecidos, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).


