
La cobertura vacunal contra la neumonía entre la población infantil en España supera el 95 por ciento, una cifra que contrasta notablemente con el porcentaje de adultos mayores y personas con enfermedades crónicas que reciben esta inmunización, situado solo entre el 40 y el 50 por ciento dependiendo de la comunidad autónoma, según detalló la Real Academia Nacional de Medicina de España (RANME) en el marco del Día Mundial de la Neumonía. Esta brecha en la cobertura está vinculada a una tasa significativa de hospitalizaciones y muertes en personas de mayor edad y colectivos vulnerables por complicaciones asociadas a la neumonía, advirtió el académico Ángel Gil, de acuerdo con la información publicada por Europa Press.
La neumonía genera cada año cerca de 10.000 fallecimientos en España, la mayoría de ellos entre la población mayor de 60 o 70 años, según consignó el medio. Gil detalló que, si bien en la mayoría de los casos la infección se maneja en atención primaria y responde al tratamiento antibiótico, en el 25 por ciento de las situaciones —especialmente entre personas mayores o con enfermedades crónicas— la enfermedad se agrava, requiere ingreso hospitalario y deriva en enfermedad neumocócica invasora (ENI), caracterizada por una tasa de letalidad del 15 por ciento.
Europa Press informó que durante una sesión científica organizada en conjunto por la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) y su Cátedra de Vacunología, con el respaldo de Pfizer, especialistas insistieron en la necesidad de reforzar la prevención mediante campañas de sensibilización y el uso de vacunas conjugadas de última generación, capaces de abarcar los principales serotipos circulantes. Ruth Gil Prieto, directora de la Cátedra de Vacunología de la URJC, subrayó que “la mejor prevención de la enfermedad neumocócica es la vacunación adecuada y sistemática”, y destacó los beneficios que tendrían niveles de inmunización en adultos similares a los alcanzados en lactantes.
La profesora Gil Prieto remarcó la importancia de dirigir los esfuerzos comunicativos no solo a adultos mayores y grupos vulnerables, sino también a personal sanitario y a los cuidadores, empleando mensajes claros sobre los riesgos de la enfermedad y las ventajas de la inmunización. Añadió que algunas regiones han comenzado a implementar sistemas de registro mejorados y emiten recordatorios a la población por diferentes vías, como mensajes electrónicos, SMS o correos postales, con resultados favorables en la mejora de la cobertura.
El medio Europa Press destacó la recomendación de administrar de forma conjunta la vacuna antineumocócica y la de la gripe a personas mayores, siempre que el calendario vacunal así lo permita. Ruth Gil Prieto también señaló la importancia de promover hábitos saludables, una alimentación equilibrada, evitar el consumo de tabaco y mantener buen control de las enfermedades crónicas para reducir la incidencia de la neumonía.
Marisa Navarro, responsable de la Sección de Enfermedades Infecciosas del Servicio de Pediatría del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid, aportó cifras sobre el impacto de esta enfermedad en la infancia. Según Europa Press, cada año a nivel mundial se registran más de 150 millones de casos de neumonía en menores de cinco años, con 700.000 muertes asociadas, lo que representa aproximadamente el 14 por ciento del total de fallecimientos infantiles en ese rango etario, solo superado por las muertes neonatales.
La mortalidad infantil por neumonía en España se mantiene, según Europa Press, en 0,3 por cada 100.000 niños, una estadística que se atribuye a la alta tasa de vacunación, la accesibilidad a la atención sanitaria, la nutrición adecuada y la baja prevalencia de coinfecciones graves en la población pediátrica. En contraste, en países con menores recursos, la tasa de mortalidad por neumonía neumocócica en niños llega a 27 por cada 1.000, reportó el medio.
Navarro indicó, en declaraciones recogidas por Europa Press, que el empleo de vacunas conjugadas neumocócicas —primero la VNC7 y posteriormente la VNC13— ha supuesto una disminución relevante en la incidencia tanto de enfermedad neumocócica invasiva como no invasiva. Actualmente, la circulación de algunos serotipos no cubiertos por la VNC13 ha motivado la adopción de nuevas fórmulas como la VNC15 y la VNC20, cuyo espectro de protección se amplía frente a los serotipos emergentes.
Las vacunas VNC15 y VNC20, que han reemplazado a la VNC13 en diferentes comunidades autónomas, incrementan el alcance frente a variantes del neumococo. La VNC15 incluye los serotipos de la VNC13 además de los 22F y 33F; la VNC20, por su parte, ofrece cobertura adicional sobre los serotipos 8, 10A, 11A, 12F y 15B/C, cubriendo así el 68 por ciento de los serotipos que circulan actualmente en menores de cinco años, frente al 20 por ciento que cubre la VNC13 y el 40 por ciento de la VNC15.
La especialista Navarro, citada por Europa Press, puntualizó que la protección óptima en pacientes inmunodeprimidos o niños con factores de riesgo requiere el uso de la VNC20, que ha pasado a sustituir la anterior vacuna polisacárida VPN23. Aunque ésta ofrecía protección frente a un número amplio de serotipos, inducía una respuesta inmunitaria menos robusta y menos duradera en el tiempo.
La prevención de la neumonía a través de la vacunación, el diagnóstico oportuno, los registros sanitarios precisos y la promoción de estilos de vida saludables forman parte de las estrategias recomendadas por los expertos reunidos en la jornada científica, según reflejó Europa Press. El desafío continúa siendo elevar las tasas de inmunización en adultos mayores y personas con enfermedades crónicas para reducir la morbilidad y mortalidad asociada a esta infección.


