El enviado de la diplomacia qatarí, Mohamed bin Abdulaziz bin Salé al Julaifi, sostuvo reuniones en La Haya donde examinó junto a autoridades del Tribunal Penal Internacional los recientes ataques realizados por el Ejército de Israel contra la delegación negociadora de Hamás en Doha. Durante su visita este miércoles, reafirmó la intención del Estado de Qatar de utilizar todas las vías legales disponibles para garantizar que se determinen responsabilidades ante estos hechos, considerados por el gobierno qatarí como delitos sancionables según el Derecho Penal Internacional. Según información proporcionada por el Ministerio de Exteriores de Qatar, recogida por distintos comunicados oficiales y reportada por diversos medios, estos encuentros se centraron en analizar posibles mecanismos de responsabilidad penal internacional bajo la jurisdicción del TPI.
De acuerdo con lo publicado por la agencia de noticias, la presencia del ministro qatarí en la corte internacional se inscribe en una respuesta oficial tras el ataque llevado a cabo la semana pasada en Doha por fuerzas israelíes contra miembros de la delegación de Hamás. El bombardeo tuvo como objetivo a siete altos dirigentes del Movimiento de Resistencia Islámica, quienes se encontraban en la capital catarí participando en conversaciones sobre la propuesta más reciente de alto el fuego para la Franja de Gaza. Entre las personas que integraban esta delegación se identificó a Jalil al Haya, actual líder de Hamás en Gaza, Jaled Meshal, dirigente político del grupo entre 1996 y 2017, Zaher Jabarin, responsable del movimiento en Cisjordania, además del exministro de Sanidad de Gaza, Basem Naim, y el vocero Taher al Nunu.
El ataque descrito por el Ministerio de Exteriores de Qatar habría resultado en la muerte de cinco integrantes de Hamás y de un funcionario qatarí, en un momento en que la delegación discutía la oferta de alto el fuego presentada por el entonces presidente estadounidense Donald Trump. Estos hechos motivaron que el gobierno de Doha movilizara mecanismos diplomáticos y legales a nivel internacional, llevando la cuestión ante instancias judiciales como el Tribunal Penal Internacional. Tal como informó el Gobierno de Qatar en un comunicado oficial reproducido en la red social X, el objetivo central de estas gestiones consiste en evitar que los responsables "eludan el castigo en el marco del Derecho Penal Internacional" y mantener el compromiso qatarí con la promoción de la justicia internacional.
El viaje de Al Julaifi incluyó una audiencia con la presidenta del TPI, Tomoko Akane, en la que según reportó la propia cartera de Exteriores qatarí, se analizaron los acontecimientos recientes y se debatió sobre la aplicación de mecanismos de rendición de cuentas bajo el paraguas del tribunal con sede en La Haya. Además, el funcionario mantuvo una reunión con la fiscal adjunta del tribunal, Nazha Shamim Khan, donde destacó "el firme compromiso" de su país con el Derecho Internacional y reafirmó la "determinación inquebrantable" de defender los derechos de Qatar utilizando medios legales legítimos, tal como comunicó oficialmente el Ministerio de Exteriores.
A raíz del ataque, Qatar ha subrayado la importancia de que se respete el Derecho Internacional y ha puesto en marcha una exploración exhaustiva de vías legales para exigir responsabilidades por lo que denomina un ataque armado ilegal en su territorio. Según consignó el propio Al Julaifi a través de su cuenta en la red social X, la labor del equipo designado por el gobierno se orienta a responder por la vía judicial a este episodio, que insisten debe tratarse como un asunto de jurisdicción internacional.
El medio también recalcó que la delegación atacada se reunía en Doha para abordar la más reciente iniciativa de alto el fuego relacionada con la situación de conflicto en Gaza, propuesta que en ese momento contaba con el impulso de la administración Trump. La acción militar israelí, según los comunicados de Doha, representa una violación de normas internacionales y un desafío directo al papel mediador e institucional que Qatar desempeña en la región. El compromiso expresado por Al Julaifi en La Haya busca preservar el principio de rendición de cuentas y reforzar la cooperación de Qatar con sistemas internacionales de justicia frente a episodios que, según la diplomacia qatarí, constituyen crímenes de guerra o actos de agresión en su territorio.


