
Pedro Sánchez argumentó ante el Congreso que la Unión Europea debería buscar relaciones comerciales más diversificadas y fortalecer los lazos con regiones emergentes como Mercosur e Indonesia, frente al alcance del reciente acuerdo pactado por Bruselas y Washington. El jefe del Ejecutivo consideró que la estrategia europea pasa por ampliar horizontes y no limitarse a los intercambios con Estados Unidos, cuestionando así las prioridades del actual pacto y planteando alternativas para mitigar las consecuencias en sectores económicos afectados. Según consignó el medio, estas declaraciones se produjeron durante la sesión de control al Gobierno, en el contexto de un debate sobre el impacto del acuerdo en la industria vasca.
De acuerdo con la información publicada, Sánchez detalló que el respaldo del Gobierno español al pacto firmado en julio entre la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, fue otorgado “con poco entusiasmo o ninguno”. Reconoció que mantiene discrepancias significativas sobre el acuerdo, especialmente en lo referente a los costes que implica para Europa y sus consecuencias para las industrias nacionales y regionales.
La sesión parlamentaria estuvo marcada por la intervención de Mertxe Aizpurua, portavoz de EH Bildu, quien planteó la preocupación sobre los efectos negativos que el acuerdo puede ejercer en la economía vasca. Según reprodujo el medio, Aizpurua cuestionó que Europa termine asumiendo aranceles del 15% y un desembolso de 1,4 billones de euros destinados a armamento y energía procedente de Estados Unidos. En palabras de la diputada, la política comunitaria representa una “imposición” de tributos estadounidenses y evidencia una postura de debilidad y sometimiento europeo. Añadió: “Un negocio redondo para Trump y una ruina para Europa, que enfrentará las nefastas consecuencias económicas y políticas de este acuerdo y que pagarán, como siempre, los trabajadores y las trabajadoras”.
En cuanto a las preocupaciones sectoriales, la portavoz de EH Bildu subrayó que la industria vasca podría enfrentar pérdidas superiores a los 700 millones de euros como resultado directo de los aranceles aprobados, con incidencia especial en el sector automovilístico, donde cientos de empleos podrían encontrarse en situación de riesgo a corto y medio plazo.
Frente a estas inquietudes, Sánchez insistió en que el Gobierno de España ya había puesto en marcha un paquete de medidas para salvaguardar a las empresas nacionales afectadas. Informó que se había aprobado un decreto ley que habilita avales públicos por un valor de 14.000 millones de euros, destinados a mitigar el efecto de la guerra arancelaria sobre el tejido empresarial. Además, subrayó que España no se encuentra entre los países europeos más expuestos a los nuevos gravámenes estadounidenses, según puntualizó el medio de referencia.
A lo largo de su intervención, el presidente del Gobierno reiteró su planteamiento de abrir nuevas rutas comerciales fuera del eje atlántico tradicional. Según indicó, la Unión Europea mantiene en su agenda la finalización de los acuerdos con Mercosur e Indonesia, dos bloques que pueden brindar oportunidades para impulsar la actividad de exportación y reducir la dependencia europea de Estados Unidos. Sánchez remarcó: “Yo creo que el camino que tiene que seguir la Unión Europea es el de diversificar sus relaciones comerciales y en eso está también el gobierno de España”.
El debate continuó cuando Aizpurua expresó decepción por la falta de una respuesta más contundente desde el Ejecutivo. Sánchez, en su última intervención, reiteró que la diversificación de relaciones y mercados representa la vía principal para enfrentar la situación y garantizar mayor estabilidad ante la volatilidad de las decisiones arancelarias globales, según reportó el medio. La sesión cerró con la idea de que el mercado único europeo debe orientarse a la ampliación de acuerdos internacionales que ofrezcan mayores márgenes de maniobra frente a alianzas que, como la actual, puedan tener repercusiones económicas considerables para distintos sectores de la economía europea y española.

